Tonto, pero no Tanto. ʰʸᵘⁿˡⁱˣ

Capítulo 2

No había transcurrido mucho tiempo para que el corazón de Felix lo tuviera Hwang entre sus manos y viceversa. Porque cada día se enamoraba más de cada gesto, cada palabra y su maravillosa actitud.

Su bebé grandote era perfecto.

Y ambos no tardaron en descubrir esa atracción arrasadora que se tenían mutuamente cada vez que sus miradas se conectaban casi por instinto. Así que eso los llevo a que tomaran la decisión de empezar un noviazgo. Uno que se reforzaban día con día, ahora no era de extrañarse que toda la atención de Felix la tuviera el humano Hyunjin y que incluso este pueda dominar a tal bestia.

Eran como uña y carne, se necesitaban mutuamente por eso la mayoría del tiempo se encontraban siempre juntos.

Desde la llegada de Hwang a la universidad fue como una bendición, porque desde entonces la actitud rebelde de Felix estaba cedita. Como si su antídoto para su actitud de perra haya sido un humano simple como Hyunjin, el más consentido y mimado por el enorme Omega león. Si, Felix lo mimaba mucho y su lado protector salía a relucir casi siempre al lado de Hwang y era de esperarse que intimidara a los demás si tratas de siquiera tocar a su bebé grandote Hyunjin.

Desde entonces Hwang se volvió intocable. Una pieza de cristal valiosa para el Omega, y nadie se atrevía a decir lo contrario con el temor de ser asesinado.

Felix ahora si confesaba que Hwang Hyunjin tenía el completo dominio de su persona, el chico azabache para su sorpresa sabe cómo controlarlo y descontrolarlo.

Debajo de la sombra de un árbol ambos descansaban en la fresca grama a la hora del receso. Con Felix apoyando la espalda en el árbol mientras Hwang recostaba su cabeza en su regazo recibiendo caricias en su pomposo cabello negro, como le gustaba.

Estaba a punto de caer en los brazos de Morfeo cuando un grito alarmante que exclamaba el nombre de Felix le hizo pegar un brinco del susto. El pecho de Felix vibró en un gruñido cuando un Alfa se aproximaba hacia ellos, por lo que de manera protectora se coloco de pie frunciendo la frente mientras mantenía a Hyunjin detrás de su espalda.

—¿Lee Felix?— con cansancio a causa de la carrera por encontrar al Omega león, el Alfa mantuvo cierta distancia entre ambos porque sabía cuan celoso y protectores eran los Omegas leones con su pareja y padre de sus crías, así que quería ahorrarse una muerte segura.

—Si, ¿Que mierda quieres?— a la defensiva cuadro sus hombros, odiando la manera en que interrumpió su momento con su pareja. Si, Hyunjin es su pareja, el padre de sus futuras crías.

—Es Jisung. El Omega entro en celo en los baños del segundo piso, vengo a avisarte para que puedas auxiliarlo— desvío la mirada hacia la segunda persona que yacía a la espalda del Omega encontrándose a un Hyunjin con la frente fruncida, seguro molesto. —Dejé algunos Betas fue del baño para que no permitan la entrada de ningún Alfa—

—De acuerdo, iré en seguida— asintiendo agradeció implícitamente hacia el chico quien se retiró no sin antes realizar una respetuosa reverencia al león. —Hyun me tengo que ir—-

—Voy contigo— y antes de que Felix pudiera negarse, el mismo se le adelanto. —No es una pregunta, hyung. Iré contigo—

Y el león no pudo negarse, no a Hwang Hyunjin. Pero algo dentro de sí le decía que algo saldría mal.

[...]

Hyunjin con una genuina curiosidad observaba entretenido como Felix llevaba cargando al otro chico omega que se retorcía por algo que estaba fuera de su conocimiento. Solo podría mirar y escuchar ya que su hyung le había advertido que por lo más que quiera no se acerque ni toque al otro omega por su bien.

Era todo completamente extraño. Nunca había visto por su propia cuenta el estado de un Omega en celo. Pero ahora que lo veía le había entrado una gran curiosidad de saber más sobre el tema, ¿Acaso su hyung pasaba por lo mismo? ¿Se comportaría de la misma manera? Quería saberlo y descubrirlo por su propio medio.

Visualizo una sustancia extraña surgir entre las piernas del chico, algo que captó su atención y estuvo a punto de interrogar a Felix por ello para calmar su curiosidad, pero una vez lo miro tratando de no dejar caer al chico que se movía como una lombriz, fue a su ayuda más no logro siquiera rozarlo cuando Felix le había gruñido molesto por su acción.

—¡No lo toques Hwang!— asustado había retrocedido con las mejillas sonrojadas, obedeciendo al león. —Tú eres mi pareja y no tienes que tocar a otro Omega que no sea yo, ¿Entiendes?—

Movió su cabeza en asentamiento provocando que su cabello algo largo con ondas revoloteara al son de su movimiento. No quería por ninguna circunstancias que Felix dejara de hacerle cariñitos. Así que esperó obediente hasta que Felix volvió de la recamara del otro chico donde supuso que lo dejo.

Una vez el Omega estuvo de nuevo frente suyo se atrevió a depositar un pequeño beso en sus rosados labios. A Hwang le encantaba hacerlo ya que Felix siempre ronroneaba como gatito y también le quitaba toda molestia que tenia, casi como su medicina.

Le causaba diferentes reacciones y le gustaba provocar eso en el omega macho.

—Hyung, ¿Tu también pasas por lo mismo que él?— quería respuesta y las obtendría para luego también investigar por su cuenta. Ahora que contaba con un hermoso novio Omega tendría que saber todo lo originado sobre él para mantenerlo feliz.

Asintiendo Felix le confirmo. —Si, y es un completo asco—

No le agradaba en lo absoluto la llegada del Celo, como Omega león solo pasaba por ello una vez al mes pero era tan intenso que lograba ponerse tan sumiso que con tan solo sentir las feromonas de algún Alfa se doblegaría ante él sin darse cuenta.

Lo odiaba.

—¿Por qué?— Hwang elevó una de sus manos para acariciar la mejilla derecha de Felix, quien había cerrado los ojos e inclinado a ese sutil toque, tan necesitado de él.

—Por que siento una arrasadora necesidad de aparearme, tanto que me asusta. Una vez al mes paso por ello y mi león exige que alguien nos llene con su semen para darle crías— confesó sumido en el toque cálido de la mano de su bebé grandote.

Ya lo habían decidido, querían a Hwang Hyunjin en su próximo celo. Deseaba tanto que él los llenará con su semen para darle crías de él, para él.

Ante la confesión Hyunjin sintió un arranque de electricidad emocionante y una profunda curiosidad lo lleno por saber si él podía ser de ayuda para su hyung.

—Y... ¿Alguna vez has pasado tu celo con alguien?— Felix escuchó temor en esa interrogante, no quería decepcionar a su humano.

—No, mi león no acepta a nadie que no sea digno de aparearse con él— un ronroneo escapó de sus labios cuando Hyunjin le dio dos besos en cada una de sus mejillas, mimándolo.

Y entonces Hwang soltó la bomba, logrando que el león de Felix rugiera en aprobación y anhelo, y que Felix lubricada por el deseo.

—Hyung, ¿Me consideras digno para aparearme contigo en tu próximo celo? Quiero estar ahí—

Joder, si.