Capítulo nueve.

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-Eso es! Puja!-animaba seokjin a aquella humana que estaba en trabajo de parto-Vamos!

-AAAHHHHH!!!-gritó desgarradoramenre la humana.

-No va a lograrlo Seokjin! Es muy pronto para que la criatura nazca, la estas matando!-dijo hoseok desesperado

-De todas formas morirá, al menos que de a luz antes de hacerlo. Sigue pujando!

En ese momento el llanto de un niño colmó la habitación.

-Mi... hijo....-dijo la humana antes de cerrar sus ojos para entregarse a la muerte.

-Tiene alma humana! Lo logramos Hoseok!-festejo mientras cargaba al niño que lloraba mientras veía a su madre morir.

Poco a poco el llanto del niño fue cesando, junto a su respiración y su ritmo cardíaco.

Y poco aquella cria semicelestial con alma humana se entrego a la muerte al igual que su madre.

Hoseok observo aquella imagen con sus ojos bien abiertos y su corazón a mil por hora.

Había descubierto y aprendido algo de aquella simple humana que acababa de morir junto con su hijo.

Algo que definiría tanto el destino del Reino celestial como el del Infierno.

Hoseok halló la forma de matar a un semicelestial.

-Maldita sea!-bufo Seokjin- Tenía la esperanza de que sobreviva. Que fue lo que paso?!

-Yo... no lo se.-Mintió.

-Le diré a padre que la humana número 38 tampoco lo logró. Supongo que tendremos que ir a buscar más humanas para otra ronda de fecundación.

-Oye Seokjin... puedo hablar contigo?

-Si vas a empezar con tu estúpida moral entonces...

-No es eso!-Interrumpió- Yo...

-Tu que?

El arcángel estaba siendo carcomido por la duda.

¿Debería decirle?

¿Debería seguir su instinto y guardar el secreto?

Todo era tan confuso en ese instante.

-Yo ya no quiero liderar los viajes a la tierra en busca de humanas.-Mintió por segunda vez- Preferiría el trabajo de controlar los embarazos, ya sabes... son muchas y los Querubines no son tan listos como yo para hacerse cargo de todas

-Hablaré con padre y te diré que opina

-Gracias.

-Deshazte de esos cuerpos, tiralos junto a los otros.

-De acuerdo.

En este ultimo tiempo Jimin aprendió a controlar sus dones y sus alas a la perfección

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En este ultimo tiempo Jimin aprendió a controlar sus dones y sus alas a la perfección.

Se dedico a entrenar con Namjoon y sus hijos todos los días la mayor cantidad de horas posibles.

SEMICELESTIAL -kookmin-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora