Demon Statue

Capitulo 13: Caminata nocturna

Sam se despertó tras unas largas horas de siesta, le dolía muchísimo la cabeza, así que se levantó de su cama para buscar alguna pastilla, todo su apartamento estaba en silencio con excepción de la sala, que se escuchaba la tele, al ir hacia ella, vio las luces apagadas, la televisión prendida y a Bolt y Emma acostados en el sillón de cuero durmiendo abrazados, aunque su líder aparentara ser rudo y risueño, en realidad era muy dulce y tierno, siempre se había preocupado por el, así que levanto a su hermana del sillón y la dejo sobre su cama con suavidad, y luego hizo lo mismo con su capitán, pero se le quedo mirando, lucía muy tierno durmiendo, pero ¿Por qué él estaba pensando eso? Se estaba empezando a sentir muy gay, quizás lo seria, pero no había tiempo para reflexionar sobre su sexualidad, así que salió de su habitación, tomo un tarro de pastillas, se tomó una y luego miro el reloj, eran las 12 de la noche, había tenido un día largo, quizás dar una caminata para pensar sería una buena idea, dentro de todo, llevaba varios días en los que estaba a full, tomarse un respiro le haría bien, pero antes tenía que cambiarse de ropa, seguía usando la misma del combate del mismo día, que esta toda sucia y raspada. Al revisar su ropero, encontró una remera blanca y una chaqueta azul oscuro casi negro y un pantalón gris oscuro, quizás no era la mejor combinación de ropa, pero nadie lo iba a ver, era muy tarde y ninguna persona cuerda estaría afuera, además que su caminata iba a ser por un sendero en un pequeño bosque que se ubicaba a un par de calles de la base. Al llegar allí empezó a caminar, solo se escuchaba su propia respiración, sus pasos y el cantar de los grillos, la noche estaba hermosa, las estrellas brillaban, alumbrando el precioso cielo nocturno, pero aun con toda esta bonita ambientación, Sam no podía parar de pensar en la imagen de su compañero dormido ¿Por qué mierda tenía que verse tan tierno? No podía sacarse eso de la cabeza, como alguien se llegue a enterar... No valia la pena pensar en eso, entonces logro despejarse por unos instantes, hasta que escucho un ruido detrás suyo, así que se volteo activando su poder, haciendo una fuerte mueca de dolor al no estar completamente curado, pero igual estaba listo para el combate, pero vio a Bolt tirado en el suelo, así que lo ayudo a levantarse

— ¿Qué estás haciendo aquí? -le pregunto Sam avergonzado mientras desactivaba sus poderes-
— Escuché que te fuiste de la casa, y me dio curiosidad, así que te seguí
— Tengo que admitir que me disté un buen susto, pensé que eras un demonio
—Lo siento -Dijo el rubio entre risas-

 Ambos siguieron caminando mirando al cielo y apreciando el bonito silencio, cuando Sam escucha como un encendedor se prende, voltea ver a su líder y estaba prendiendo un cigarrillo

—No deberías fumar, hace muy mal a la salud –Aconsejo el joven quitándole el cigarro de la mano-
—Lo se, ojalá fuera tan fácil
—Lo sé, pero por algo se empieza –Sam apretó la droga y la rompió con las manos-
— ¡Sam!
— Bolt, es lo mejor para ti, puedes morir si seguís así y.... no quiero que nos quedemos sin un líder tan bueno como tú

La expresión del capitán cambio de enojo a estar impactado, no entendía porque le importaba tanto a un miembro de su equipo, pero se sintió tan conmovido, que lo abrazo y él se lo correspondió

— Voy a intentar dejarlo, gracias por preocuparte
—No es nada Bolt, para esto estoy

Dijo el joven de pelo azul marino, mientras el abrazo se mantenía, por un buen rato. Luego de esa charla, ambos volvieron a la base, había que descansar, tenían que entrenar para no perder musculatura, pero mientras caminaban con rumbo a su descanso Bolt le pregunta a su amigo

—Oye ¿Qué les paso a tus padres?

Sam bajo la cabeza, dejando que su pelo cubra sus ojos de dolor, pero no pudo ocultar esa lagrima que se le cayo

—Ellos eran héroes, y bueno...

Su voz no salió, se le armo un nudo en la garganta, su voz se cortó y el colapsó, las lágrimas comenzaron a desbordar de sus ojos, se sentía frio, sus piernas comenzaron a temblar, cuando un calor empezó a rodear su cuerpo, su líder lo estaba abrazando

—Lo siento mucho, no debí preguntar, pero no estás solo, yo pasé por lo mismo, eres fuerte

—Gracias...

Sam se sentó en el suelo a llorar mientras su líder lo consolaba, el cielo observaba todo con total admiración, los dioses habían mandado no solo a un guerrero excepcional, también a una excelente persona que, aunque parece ser un total patán, se preocupa por todos, es valiente y tierno al mismo tiempo que se esfuerza constantemente en mejorar, para no ser del todo humano, es el ser con el corazón más grande que existe vivo en la tierra.

Una rato más tarde Bolt se paró y le dio la mano a su amigo para ayudarlo a pararse

—Hace frío, es hora de que volvamos ¿Crees poder caminar?

—Si, no te preocupes

Ambos caminaron en silencio, mirando las estrellas, observando el cielo, la tranquilidad abundaba, tanto que cuando se dieron cuenta, ya estaban en sus camas descansado.