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B U I L D

Podía sentir como su garganta se secaba con tan solo contemplar aquella imagen tan surrealista; tres chicos. Impresionantes, dos con el hábito de sacerdote y uno más vestido de manera semi-formal pero igual de maravilloso. En realidad, él se había llevado más su atención.

Intentaba con todas sus fuerzas no malinterpretar el juego de palabras utilizado. Por supuesto; falló. Pero era inevitable y más con el tono en que lo había expresado sumado a la profunda mirada que estaba recibiendo. En lugar de sentirse aliviado, pudo sentir el sudor recorrerle la espina dorsal al ser una potencial víctima a la vista del depredador.

¿Bible? le resultaba un nombre curioso, poco común, aún así no pudo cuestionar. Su mente estaba en otro sitio bastante lejos de ahí. Tan solo siendo capaz de regresar ante la pronunciación del misterioso depredador, como lo había llamado.

Descuida, estarás en buenas manos. —le brindó una sonrisa que a simple vista era difícil de descifrar, pero no indagaría en ello, tenía un par de preguntas y poco tiempo.

Sí nos permiten, el hermano Job y yo tenemos un par de pendientes en el campanario. Hermano Bible, quedas a cargo de guiar a nuestro nuevo hermano... —hizo una pausa alargando la palabra al desconocer ese detalle, obligando al pequeño desastre tembloroso a reaccionar sin tartamudear en el proceso.

B-bui-ld —artículo con dificultad, provocando una sonrisa en Bible— mi n-nombre es Build. —se obligó a hablar con mayor firmeza. No quería dar una impresión más débil de la que ya había otorgado.

Acompañame, Build. —dando un paso atrás, Bible señaló hacía el costado derecho, guíandolo hacía el confesionario. Con lentitud y conservando el temblor en su cuerpo, siguió sus órdenes. Estaba apunto de arrodillarse ahí pero una mano se posicionó sobre su hombro, deteniendo sus movimientos—. Dudo que quieras que alguien te escuche, ven, es aquí. —abrió una puerta y lo hizo pasar a la pequeña habitación donde en ocasiones guardaban artículos sin uso para la iglesia, por supuesto estaba lleno de imágenes sagradas por todos lados.
Acercó una silla para que pudiera tomar asiento y él hizo lo mismo a una distancia corta.

¿Por qué aquí? —su curiosidad no pudo mantenerse en el interior, a veces, tan solo a veces su filtro se dañaba y pasaba las palabras tal cual aparecían en su mente.

Hay más privacidad, ¿no te parece? Ahora dime, ¿qué es eso que tanto te aflige? —sin querer, el lamentable hombre había caído en manos de quien, si bien buscaba ayudarlo con su problema, no era precisamente con las mejores intenciones y eso era algo que le resultaba intrigante.

Las expresiones tan transparentes del tembloroso joven lograban capturar la atención del más bajo, pues le miraba con detalle, recorriendo la forma de sus labios, la deliciosa forma en que los apretaba y un sinfín de pensamientos indecentes cruzaban su mente. Build apretaba sus propias rodillas con las palmas de vez en cuando y luego de unos segundos en silencio, se decidió a hablar.

Me gusta un chico. —Lo sabía. Bible lo sabía, esa preciosa criatura no podía estar lejos de su alcance— No, no, más bien, estoy confundido. No soy gay. —Aclaró de forma inmediata, provocando una sutil sonrisa en el menor—. Nos conocemos hace mucho y él... Bueno, él a veces se comporta como una chica, incluso luce como una, debe ser eso. —Tú también. Quiso decir, pero se mordió la lengua solo para acercarse un poco más al inclinarse sobre el asiento, como consecuencia el mayor retrocedió al instante. Estaba nervioso, casi podía olerlo.

𝐓 𝐀 𝐊 𝐄   𝐌 𝐄   𝐓 𝐎   𝐂 𝐇 𝐔 𝐑 𝐂 𝐇   [ EN PAUSA ] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora