Introducción

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Era un día lluvioso en el pueblo 1.
Auron había salido a coger madera.
Megara veía la televisión, junto a su hermano Axozer.
-Axo, ¿sabes una cosa? - preguntó Megara.
-Dime - respondió su hermano.
-Dicen que los días lluviosos, un monstruo de hiervas ataca a los niños - explicó ella.
-Yo soy un niño - dijo el.
-Eso ya lo sé - aclaro ella.
Pegaron a la puerta. Megara se levantó a ver quien era. Era Auron.
-Hola niños - saludo y entro a casa.
-Auron, ¿sabes que hay un monstruo de la lluvia? - el pequeño Axozer le pregunto.
Auron lo miro raro.
-No hay ningún monstruo de la lluvia - aclaro.
-¿No? - Axozer se desilusionó.
-No - dijo Auron dejando la madera en el cofre. En realidad hay un monstruo que se come a los niños que no se van a dormir pronto.
-Y no vuelven a sus casa nunca - Megara lo agarró de los pies y los volcó boca abajo.
Axo se puso a gritar.
Auron empezó a reír, junto a Megara.
Megara lo soltó en el suelo y Axo se volvió al sofá.
-Bueno, ahora en serio, como no os vayáis a dormir, el monstruo seré yo - aseguro Auron.
-Pero si es temprano - replicó Megara.
-A dormir - no dijo nada más.
Megara tenía que hacerle caso, era su padre, pero el no le gustaba que se lo dijeran.
Subieron a sus habitaciones y cada uno de tumbó en su cama.
Megara  cerró los ojos, pero noto una presencia a su lado.
-Axo vete a tu cuarto - dijo.
-Tengo miedo - dijo el.
-No hay ningún monstruo, para tu información. 
-Quiero dormir contigo - replicó el.
-Solo esta noche, ¿entendido? - se hecho a un lado.
Axozer asintió, <<aunque no sería verdad>> y se tumbo a su lado.

La mano negra de Tortilla Land Donde viven las historias. Descúbrelo ahora