Dear teacher (Ziam)©

3.

El fin de semana había pasado tan rápido que pensaba que necesitaba unos días más de descanso, adoraba que Lex, su hurón casi no fuera mucho problema, era sencillo cuidarlo cuando se tenía el dinero, y era entretenido cuando estaba despierto porque el animalito solo quería jugar, jugar, y comer.

Dió una mirada al animalito dormido en su jaula y termino por ponerse el suéter, era un día frío, así que prefirió un suéter antes del saco, llevo su bolso junto al bolso de su computadora para terminar de subir las calificaciones, y un paraguas por las advertencia de lluvia.

Llegó a salvó a su salón, ya había uno que otro alumno ahí, dejo sus cosas y de su bolso saco los informes ya revisados, dejandolo en una de las esquinas del escritorio, fue saludando a la gente que iba llegando y cuando entro el último y la hora de comenzar la clase empezó, cerró la puerta.

Comenzó con la clase totalmente tranquilo, la mayoría de sus alumnos ponían atención, quince minutos luego de que comenzará la clase la puerta fue tocada, dió una mirada a su reloj y suspiro permitiendo la entrada, Zayn Malik apareció por la puerta, poniendo sus manos tras su espalda, sus mejillas rojas por completo.

— Tarde, Zayn — Liam hablo tras darle una mirada, siguiendo con lo que escribía en la pizarra

— Lo lamento, profesor Payne, prometo que nunca pasará de nuevo — Murmuró Zayn con timidez yendo directo a su asiento, el lugar más cerca del escritorio de Liam.

— Muy bien — Liam se giró — Revise sus informes y quiero decirles que la mayoría estuvo bastante mediocres — Nego despacio — La verdad esperaba más de ustedes, ya son adultos, que no sepan hacer un informe aceptable es difícil de creer, les daré sus informes y verán mis notas para que los corrijan, solo hubo uno que fue perfecto y por eso tendrá puntaje extra para la siguiente calificación — Dijo dándole una mirada a Zayn, Malik escribía en su cuaderno, pero al momento de oírlo elevó su mirada para verlo, sonriendo tímidamente, con sus mejillas rojas — Los voy a ir llamando uno a uno, si tienen una queja o pregunta me dicen cuando tengan su informe en mano

Dicho eso Liam se sentó en su lugar y comenzó uno a uno a llamar a sus alumnos, llegando al último, su alumno estrella, quien al escuchar su nombre cerró rápido su cuaderno, se levantó y camino lentamente hacia el mayor, parándose junto al escritorio.

— Creo que ya sabes lo que te diré — Liam dijo extendiendo las hojas hacia el moreno — Buen trabajo, Zayn, cómo siempre, haces un buen trabajo

— Gracias, señor Payne — Sonrió Zayn tomando con cuidado las hojas

Tras terminar aquello les dijo que podían irse, se levantó para borrar la pizarra, siendo interrumpido por una de sus alumnas, quien se acercó para preguntarle varias cosas, mientras todos los demas salían.

La hora del almuerzo llegó y fue a comer algo, se encontró con una de sus compañeras de trabajo quien lo invito a almorzar, acepto, ella era una mujer linda, bonito cabello castaño y ojos azules, una bonita mujer.

Cuando volvió a su salón listo para dar su siguiente clases vio la puerta levemente abierta, su ceño se frunció, y se acercó rápidamente a su bolso, dentro habían dos hojas dobladas perfectamente, solo un bajo suspiro.

Genial, ahora eran dos.

Decidió leerlas al llegar a casa, había tomado una decisión ese fin de semana, dejaría que las cartas siguieran sin decir más, dejaría que aquel chico sacará todas las fantasías que tenía con él y luego simplemente, acabarían.

Iban a acabar ¿No?

En el momento que llegó a su departamento, tras el largo día de clases dejo su bolso en el sofá, Lex seguía completamente dormido, así que reviso su agua, y luego fue a comer algo, cuando estuvo con su ropa cómoda tomo ambas cartas del bolso y se recostó en su cama, eligiendo una de las dos cartas.

Querido profesor

¿Sabe lo caliente que es escuchar mi nombre salir de sus labios?

Cada vez que lo dice siento que voy a correrme, es tan injusto no ocasionar eso en unsted, pero no importa, se que en un momento usted va amar escuchar como gimo su nombre con cada embestida que dará contra mi

— Este chico — Suspiro Liam con sus mejillas levemente rojas, removiendose algo incomodo en la cama

Hoy al estar tan serio se veia malditamente caliente, no puedo creer que deba esperar hasta el miércoles para verlo una mísera hora, pero usaré la imagen de mi favorito y sexy profesor para masturbarme hasta el miércoles.

Lo veo en clases profesor

— Dios no puedo creerlo — Se quejó Liam

¿Por qué tenía una erección?

Dejo la carta a un lado, solo debía ser la soledad y el tiempo que había pasado sin masturbarse, era eso, no las cartas de uno de sus alumnos.

Claro que no.

Tomo la otra carta en sus manos y la desdoblo, intentando ignorar el problema en sus pantalones.

¿Sabe lo malo que es?

Vaya, no hubo un “Querido profesor".

¿Una cita con la profesora de lengua?

No puedo creerlo, solo al verlos irse juntos sentí que que quería saltarle al cuello, ¿Por qué con ella?

Digo, todo el mundo sabe que ella está enamorada de usted, TODOS

T O D O S

Menos usted, y me jode como no tiene idea, y eso me molesta aún más porque no es la forma que me gusta ser jodido es tan injusto profesor, no quiero esto.

¿Cree que por tener novia voy a parar?

Se equivoca, yo sé que soy mejor que ella, que puedo hacerlo sentir un placer tan exquisito que se olvidaría de todas las parejas que tuvo antes, no me voy a detener profesor

Hasta que sea totalmente mío

Una de las cejas de Liam se levantó y soltó una baja risa — Un alumno celoso, quien lo diría — Susurró antes de darle un problema a la enorme erección en sus pantalones de pijama.

Suspiro pesadamente, se negó a aceptar que esa erección fuera provocada por las sucias cartas de un alumno celoso.

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Se mal acostumbran a tener capítulos seguidos