Epílogo

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-2027-

Un día nos daremos cuenta que algunas personas están destinadas a vivir en nuestros corazones y no estar en nuestras vidas

Ahora por fin tomaba sentido aquella frase que había escuchado hace unos años atrás cuando pensaba que el fin de un tiempo era inalcanzable y todavía contaba con bastantes años para arreglar todos mi errores que había cometido en el pasado.

Sin embargo el futuro es bastante incierto y aprendí de eso en un momento inoportuno.

El viento del otoño mueve las hojas muertas de los arboles, haciéndolas caer para pintar el suelo con sus colores naranjas y amarillos, el viento frio pega ligeramente en mi rostro alzado ligeramente al cielo azul que el día de hoy nos ofrece, caminando entre el pasto húmedo por el rocío de la mañana, caminando entre todas aquellos nombres en grandes piedras hasta llegar a la lapida de mármol blanco con letras doradas con algunas flores marchitas sobre ella.

Hola cariño, sentimos haber tardado tanto en venir pero ya estoy aquí gatito. -sonreír ligeramente sintiendo un apretón en mi mano de parte de mi esposa.

Milena Romanoff Maximoff 2004-2023

Nathaniel Barton Maximoff 2001-2023

Eran los nombres que se podían leer en ese lugar sintiendo como un nudo se formaba en mi garganta.

Ya habían pasado varios años desde su partida y cada año dolía como si fuera el primero.

Muchas veces había venido sin embargo no estaba lista para aceptar que mi hija ya no estaba, quedando siempre en la entrada de la mano de mi esposa sin poder dar un paso dentro del lugar, sintiendo como si mis pies se quedaran pegados en la entrada y no pudiera dar ni un solo paso, pensando en que al dar un paso dentro del lugar estaría aceptando que me arrebataron a mi hija.

Estando tan molesta con ella por su estúpida decisión de dar su vida a cambio de las de personas que solo la trataron mal por mucho tiempo, por personas que no tomaban en serio la gravedad de su enfermedad y dar sus últimos días de vida a cambio de quedar conectada a máquinas en una camilla.

De cambiar sus últimas sonrisas por lágrimas de dolor solo por ser tan orgullosa como su madre.

Sin en cambio ya no existía ningún enojo con ella en la actualidad y había perdonado sus decisiones.

Solo podía agradecer al destino por haberme dado el privilegio de ser madre de una luz tan luminosa como la de mi pequeña Milena y ser iluminada por ella hasta que se extinguió.

Y esto que amor. -llame la atención de mi esposa señalando la caja que se encontraba en el lugar.

Es de mi suegro Erik, le pertenecía a Milena y siempre viene a mover las piezas de la partida. -sonrió mi esposa poniendo las nuevas flores tras limpiar.

Hoy mi hija estaría cumpliendo veintitrés años.

Pero nuestra hija ya no está jugando la... -me hizo la seña de silencio señalando a nuestros nietos.

Hakemate. -grito Luna empujando a su hermano tras mover una pieza de la caja.

Ganamos, ganamos. -le siguió la cantaleta su hermano sacudiendo sus pantalones.

Ellos son los que juegan por su madre, son los que mueven una pieza cada vez que vienen. -río mi esposa poniendo una mano en mi pecho mientras recargaba su cabeza en mi brazo.

Ya sabía que tendría que encontrar nuevos rivales. -escuche la voz de mi padre a mi lado.

Son hijos de tu nieta, que esperabas. -di un apretón en su mano viéndolo asentir con nostalgia.

Life Is Short (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora