Amor eterno (Jack Frost y tu)

Capitulo 4

-Abuela, ¿falta mucho para llegar?-

El viaje había sido agotador, en primera, odio los aviones y en segunda hay tanta nieve que estamos atascados en el trafico, lo bueno es que David se quedo dormido y asi no me puede estar molestando ya que es su costumbre hacerlo cada vez que esta aburrido.

-Pues si esto sigue así, yo creo que llegaremos en la noche- Al parecer mi abuela también estaba algo estresada.

-No lo puedo creer- Me queje –¿Y en donde nos quedaremos?-

-En una pequeña cabaña- dijo muy tranquila

Ya me estaba estresando así que decidí dormir un rato, tome mi celular y me puse a escuchar música.

Alguien comenzó a moverme para que yo despertara pero yo no quería ya que me había acomodado muy bien en el hombro de mi amigo.

-Vamos, ya despierta no seas floja- me movían de los hombros con cuidado

-Cinco minutos mas, por favor- Yo solo me tape con el gorro de mi gabardina para evitar que me siguieran molestando.

-_____, ya llegamos anda levántate o si no te dejaremos aquí en el taxi- David me comenzó a mover mas fuerte hasta que abrí los ojos.

-Esta bien, esta bien, ya , no molestes- di un fuerte bostezo y baje del taxi, al darme cuenta de donde estábamos me quede muy sorprendida ya que el lugar era hermoso lleno de arboles cubiertos de nieve y una linda cabaña.

Cuando entramos me di cuenta que era un lugar muy lindo y acogedor, muy diferente a lo que yo me imaginaba, subí a ver cual era mi cuarto, de las tres habitaciones que había escogí la que tenia un balcón que daba vista al hermoso paisaje invernal, puse mi maleta en mi cama y me dispuse a desempacar.

-Veo que ya te pusiste cómoda- Dijo mi abuela entrando a mi habitación.

-Perdón por no preguntar cual iba a ser mi habitación pero es que vi este cuarto y me encanto- dije con una sonrisa nerviosa.

-No te preocupes, de echo este cuarto lo arregle para ti, sabia que te iba a gustar- se acercó a mi lado y me llevo hacia el balcón- Espero que la vista sea de tu agrado- Me dio un lindo abrazo.

-Claro que me gusta- Le sonreí y ella me abrazo.

-Será mejor que vallas a dormir, ya que mañana te espera un gran día- Me dio un beso en la frente y salió del cuarto.

Fui a buscar a Dave a su cuarto para platicar con el, lo bueno es que queda enfrente del mío

-¿Puedo pasar?- pregunte tocando la puerta.

-Claro que si _____, pasa- El estaba acabando de acomodar sus cosas y me senté en su cama. –¿Te ocurre algo?- dijo sentándose a mi lado

-Pues, la verdad no se, me siento algo rara, es una sensación muy difícil de explicar- recargue mi cabeza en su hombro y suspire.

-Vamos, dime que es lo que te pasa- dijo con una sonrisa y acaricio mi cabello.

Yo trate de explicarle todo lo que pasaba con mi abuela, lo extraño que se estaba comportando desde que me había dado el anillo, la historia de amor de mi tátara... no seque abuela, que si supuestamente creía en la reencarnación, los sueños que había tenido con ese chico extraño y lo que había pasado cuando me coloque el anillo. El me miro algo sorprendido y se quedo un rato en silencio.

-¿Que es lo que piensa?- Pregunte ya que el se quedo como que en un transe.

-Pues, a mi también se me hace raro todo esto, pero mas que nada por tus sueños, ¿Como puedes soñar diario desde hace mas de un año con la misma persona?- se quedo un rato meditando- ¿Sabes que?, yo te ayudare a investigar sobre todo esto, solo espero que no nos metamos en muchos problemas- Soltó una risa nerviosa y yo comencé a reír también.

-Bueno, entonces será mejor que me valla a dormir, así podremos investigar desde mañana- Le di un beso en la mejilla y un abrazo –Muchas gracias Dave por ayudarme con esto-

-No te preocupes sabes que yo te quiero mucho ____- Me levante de la cama y salí de su cuarto. –Descansa y sueña "lindo"- dijo con un torno de burla.

-Ja,ja,ja que gracioso- dije con tono sarcástico ya que sabía que iba a soñar con aquel chico castaño.

Como no tenia sueño decidí sacar una silla al balcón y mirar la luna un rato y el hermoso paisaje, pero en eso mi vista se desvió hacia el bosque donde había un chico sentado debajo de un árbol abrazando sus piernas lo cual me sorprendió, tome una cobija y salí brincando por el balcón, corrí lo mas rápido que pude hacia el y cuando estuve a unos pasos de el lo mire mejor, era un chico como de mi edad con una sudadera de color azul y sus pantalones eran de color café, pero lo que me dejo sin palabras es que ese chico no llevaba zapatos, así que decidí hablar.

-Oye ¿Te encuentras bien?, ¿Que haces aquí tu solo?- trate de sonar lo mas amistosa posible ya que no quería que el se asustara o algo asi.

Poco a poco levanto su mirada y se notaba algo triste sus ojos azules eran hermosos

-¿Me.... Me... estas hablando a mi?- su expresión era de sorpresa y creo que se le notaba un poco de miedo.