Capítulo 004: La verdadera Leah

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Todos obsecraban a la rubia atónitos

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Todos obsecraban a la rubia atónitos. Habían pasado muchos años sin saber si quiera de su hermano. Tampoco es como si les hubiese interesado un poco.

—— ¿Ya se olvidaron de mí? — Leah preguntó con sarcasmo a sabiendo que a ninguno le importó...pero estaba errónea, a uno sí —

—— ¿Estás viva? — solo salió eso de la boca de Marcus mientras que todos seguían paralizados. Leah volteó a Reginald y bajó la mirada, fingió una sonrisa y lo miró —

—— ...Les dijiste que estaba muerta... — Reginald desvió la mirada mientras que la rubia sentía su rabia crecer y crecer. Quería acabar con el —

—— Tu moriste... — Alphonso le contó frunciendo el ceño sin entender nada de lo que estaba pasando —

—— Ohhh, y ustedes le creyeron...bravo... — le responde con el mismo sarcasmo a pesar de que estaba molesta y un poco herida por culpa de su padre. Ni siquiera investigaron más a fondo sus hermanos. Solo le creyeron y ya —

—— ¿Segura que eres Leah? — le pregunta Fei mirándola confundida —

—— Soy la misma Leah pero diferente...es complicado de explicar, pero no es culpa mía. — observa al anciano a su lado —

—— ... — Ben seguía procesando lo que acababa de pasar por eso no decía nada al respecto —

—— ¡Leah! — Sloane corrió hacia Leah y la abrazó muy fuerte — Ay, pensé que habías muerto...¿donde estuviste? ¿Por que no regresaste? — tomó los brazos de su hermana — Bajaste de peso... ¿Comes acaso? ¿Cómo estás? Tengo tantas preguntas.

—— Se nota... — le contesta Leah — Mi preciosa, Sloane...¿cuando tiempo? Te extrañé, mucho... Más que... — mira detrás de Sloane y asiente — Más que a todos de hecho.

—— Me alegra verte de nuevo, número ocho. — Habló Marcus con su tono frío, ella rodó los ojos y se separó de Sloane y le asintió —

—— Me alegra verte Cris, espero que no sigas enojado conmigo — Cristopher se le acercó y ella lo acarició sonriendo — Oye, Jayme...¿sin rencores? — mira a su hermana quien la analiza pensando que tiene un plan de venganza o algo —

—— Aún no lo sé, depende si sigues siendo la misma llorona.

—— Ya lo verás, arpía. — Negó sonriendo y saludó a lo lejos a Alphonso quien sonrió y le saludó, miró a Fei quien se le acercó —

Mi amor de la infancia - BEN SPARROW  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora