"En casos extremos y desenfrenados, la condición llamada como ######, suele pasar rápidamente a la fase 2, lo cual, hace que la tasa de vida de la persona que tiene esta afección baje de 70 por ciento, a 40 por ciento"
Capítulo 32, La Historia de la Humanidad
Yaku cerro libro que tenía en la mano, mirando a kenma, el cual, le pidió que leyera un pedazo de la Historia de la Humanidad, llevaba preocupado días, después de lo que había pasado con Kuroo, estaba entrando en la cuenta de que realmente Kuroo, ya conocía a su alma gemela eso, lo hizo enojar realmente, frunció el ceño y se levanto, dispuesto a ir a la casa de Kuroo, había faltado ese día, Yaku lo miro, sabia lo que haría
Yaku: ¡Kenma! -se levantó lo más rápido que pudo, tomó el brazo de el chico- no creo... que sea buena idea
Kenma: ¿por qué no?... kuroo... -murmuro, frunciendo el ceño con fuerza, de verdad estaba frustrado... ¿por qué estaba así de frustrado? ¿Seria por qué encontró a su alma gemela y no le dijo? O simplemente... por tener un alma gemela- Kuroo, se va a morir por culpa de... de la persona que esta enamorado
Yaku: todos lo haremos en cualquier momento Kenma... solamente, que -un suspiro salió de su boca, no sabía cómo decirle a kenma sin sonar cruel y crudo- deja que Kuroo nos diga todo a su debido tiempo
Kenma: Kuroo no nos dirá nada, el es terco con estas cosas... se lo va a guardar hasta que muera, así que iré allá yo mismo y haré que suelte todo -se soltó del agarre de Yaku, tomando sus cosas, no se quedaría al entrenamiento de ese día, debía ir a ver a Kuroo... Quería verlo, sus mejillas se encendieron... Negó varias veces y salió hecho un rayo-
Esta vez no saco su juego, ni si quiera tomo su mochila, la dejo en medio pasillo, mientras corría, pensando en todo lo que pasaba con Kuroo, siempre lo ... trataba tan bien, lo hacía feliz, realmente, nunca lo juzgaba, se preocupaba por el, por más cosas que le pasarán, el siempre seguía a su lado, ¿por que se sentía así?, sentía desesperación por llegar... La sentía, sentía su pecho palpitar, llego a la casa, toco desesperadamente, la mamá de kuroo salió
Mamá: ¿Qué nece... oh, ¿Kenma? ¿Vienes a ver a Kuroo? -Pregunto la señora, ladeando la cabeza, mirando al chico jadeante delante de ella, el sólo asintió- Pasa por favor, Kuroo esta arribaKenma no necesito otra excusa, subió las escaleras hecho un rayo jadeando, sentía que cada paso que daba, su corazón se agitaba, le costaba respirar, su estomago estaba como un loco, realmente empezaba a entenderlo, abrió la puerta del cuarto con fuerza... sin dejar que Kuroo reaccionara
Kenma: Kuroo... -murmuro, sentía que debía de gritar, realmente sentía esto, pero sólo se limito por caminar a su cama, se sentó a los pies de esta, viendo a el chico de cabello negro y piel algo pálida... Suspiro, aliviado, al saber que no era un sueño para él-
Kuroo: ¡¿kenma?! ¡¿Q-qué haces aquí?! -grito, algo sobresaltado al escuchar la puerta abrirse así de violentamente- Tú entrenamiento es hoy y...
Kenma: No digas más kuroo -murmuro, sin poder mirarlo directo a sus ojos, realmente le estaba costando... mucho, demasiado, nunca había tenido la necesidad de decir algo acerca de sus sentimientos, Kuroo solía leerlo bastante bien, pero ahora sólo los ojos de aquel chico lo veían atentamente, esperando con esperanza a que dijera lo que el quería escuchar- Kuroo, yo... Yooo
Kuroo: ¿Qué sucede Kenma? -murmuro mirándolo, atentamente, contemplando sus expresiones, dios, era tan lindo, se lo iba a repetir, como siempre "La mejor alma gemela" -
Kenma: yo, yo, de verdad esto nunca, me había pasado -murmuro, frustrado sin saber como sacarlo, tomo la mano de Kuroo- Kuroo, Te, yo te quiero
Kuroo: -una risita, salió, sus ojos no pudieron evitar comenzar a lagrimear, de verdad, se sentía la persona más dichosa, tallo sus ojos- T-te amo Kenma, te amo -murmuro tapando sus ojos con su brazo, no quería que lo viera llorar como un niño pequeño-
Kenma: -Un suspiro salió de su boca, quito su brazo, mirándolo curioso, como un gato- No tienes por que llorar... no te va a pasar nada más, lo juro -murmuro, la extraña sensación de que sus brazos picaban de hacía presente, miro su brazo, sus pétalos habían, comenzado a caer-
Kuroo: Siempre pensé que tus pétalos eran lindos Kenma -murmuro, tomando su mano, besando la palma de su mano, cosa que hizo sonrojar a el rubio, no sabía que decir, sólo miro a otro lado, sin quitar la mano-
Kenma: ¿Por que nunca me dijiste? -murmuro, ahora frunciendo el ceño, un suspiro salió de la boca de kuroo, junto con una sonrisa-
Kuroo: A ti nunca se te escapa... nada ¿cierto Kenma?
Kenma: Dímelo, ahora -murmuro, realmente no quería saber que pasaba, tenía miedo, mucho miedo-
Kuroo: -suspiro, rascando su nuca, miro de nuevo a Kenma, sus ojos lo miraban tanto, una sonrisa melancólica salió de sus labios- Yo quería que te enamoraras por tu cuenta... no quería que lo hicieras por que estoy a punto de mori-
Kenma: -Este no lo dejo terminar, puso sus manos en la boca de kuroo, negó, sin poder mirarlo, no podía aceptar, que Kuroo, estaba por morir, no quería saber cuando, no quería saber como, pero allí estaba, tapando su boca- Cállate... no quiero que digas de nuevo, que te vas a morir, no quiero, volver a oírlo-
El chico sólo asintió, Kenma quito su mano, ambos se miraron, Kuroo acaricio su mejilla, había esperado tanto para poder hacerlo, la acaricio como si fuera lo único, ambos se miraron atentamente, se acercaban de poco, nada, ni nadie arruinaría ese hermoso momento, ambos rozaron sus labios, apunto de hacerlo, Kenma no evito cohibirse un poco, pero no se detuvo, sus labios se juntaron un segundo, cuando escucharon un maullido, se exaltarón sonrojados
Kuroo: E-es un gato... -murmuro, miro a Kenma, quien pasaba sus dedos por sus labios, varias veces, sin poder evitarlo, una risita salió de sus labios-
Kenma: ¡No te rías kuroo! -grito, empujándolo levemente, miro la ventana y se acerco a gatas para abrirla, el gatito negro con blanco los miraba atentamente, el chico lo acaricio y lo tomo entre sus manos, pasándolo adentro-
Kuroo: Uh, mira, se dejo al instante -murmuro, acariciando al pequeño felino, quien se dejo instintivamente-
Kenma: Es nuestro ahora -murmuro acariciándolo, lo alzo haciendo que la cara de ambos quedara juntas- Capuchino se llamará
Kuroo: -una sonrisa salió, mirando a el chico que tenía frente de no saber que era la bebida favorita del chico le parecería raro- Capuchino me parece perfecto -sonrió, acariciando la espalda del felino, pero déjame besarte bien -se acerco apoyándose en la cama-
La sorpresa de Kuroo fue cuando Kenma puso a el gato frente a él haciendo que besara su naricita, miro al chico, quien lo miraba algo sonrojado
Kenma: A-ahora no, capuchino esta con nosotros -murmuro sonrojado, sin poder mirarlo del todo-
Kuroo: -un quejido salió de sus labios, resignado se alejo levemente- Bieeeen
Más paginas rotas de el libro de la humanidad
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𝓔𝓵 𝓱𝓮𝓬𝓱𝓸 𝓭𝓮 𝓶𝓸𝓻𝓲𝓻 𝓷𝓸 𝓬𝓪𝓶𝓫𝓲𝓪 𝓷𝓪𝓭𝓪🌻 (Completa)
FanfictionMitos y mitos acerca de las almas gemelas, cuando sólo uno es cierto... Los pétalos en la piel.