... Y el sol que salió de noche.

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Muchas gracias por seguir leyendo mi historia!!! Ha pasado más tiempo del que me gustaría desde que publique el primer capítulo de esta serie, así que les debo una disculpa, espero poder darles más capítulos en menos tiempo, sin mucho más que decir, buenas noches y disfruten de este capitulo!!!

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Estaba paralizada, no me podía creer lo que estaba pasando, pero esa esfera de luz expandiéndose me decía que esto era real, y que tenía que hacer algo rápido o acabaría como los árboles que salían volando en cuanto los tocaba la corriente de aire que provocaba aquella luz...

Tomé rápido mi mochila y saque una cuerda con la que Karen y yo subimos aquí, rápido tome la mochila de Karen y puse ambas en mi pecho y espalda, para al final arrastrar lo más rápido que me era posible a Karen hacia el árbol, prácticamente lanzandola para que se estrellara con el dandole la espalda a la explosión, ella trató de decirme algo, pero no pude oír nada aún estando a centímetros de ella por el sonido del viento mortal que venía hacia acá.

Con toda mi fuerza lancé la enredada cuerda alrededor del nogal haciendo que diera varias vueltas en este y apretándolo después de habernos rodeado unas tres o cuatro veces, sujetandonos tanto a mi como a Karen, quién estaba a un lado mío, para terminar con un rápido nudo hecho a prisa por mi, el cual por el miedo no pude comprobar si estaba bien hecho o no...

-¡SUJETA...!- Aquella frase dirijida hacia mi hermana fue totalmente silenciada por una presión tal en todo mi cuerpo que todo el aire en mis pulmones salió casi arrancado de mi, seguido de una explosión tan fuerte que lo único que pude escuchar después de eso fue un pitido tan molesto que me dolía la cabeza...

La presión del aire no paraba, intentaba gritar o mover algo pero me era imposible, lo único que podía hacer era abrazar a mi hermana y al árbol, llorando y rezando que no saliera arrancado del suelo como los otros que eran arrancados de raíz debajo de nosotras.

¿Cuánto tiempo va a durar esto?...

Quiero ir a casa...

¿Cuánto falta para que suene mi alarma para ir a la escuela?

La luz del horizonte sigue haciéndose más y más grande...




Ayuda...









...









Perdí el conocimiento por unos segundos, solo para despertar de golpe por la falta de aire, aquella presión del viento ya había terminado, así que desate la cuerda tan rápido como pude con mis brazos medio dormidos y tanto Karen como yo caímos al piso tosiendo y tomando bocanadas de aire para recuperarnos.

Los 3 minutos más largos de mi vida, habíamos logrado recuperar el aliento, pero estábamos tiradas en el suelo por el cansancio.

Estamos...

¿Vivas?

-¿Q... *Cof* Que demonios fue eso?- Karen fue la primera en hablar, y realmente no sabia que decir, había tanta información que procesar que simplemente me quedé viendo hacia la base de aquel nogal, el cual estaba ahora tan inclinado que le daría envidia a la torre de pizza.

Ahora que lo pienso...

Solo seguimos vivas porque las raíces del árbol estaban muy profundas en la tierra, y el choque del aire no fue tan fuerte como los libros decían, supongo que la distancia afectó en eso...

Me siento como puedo en el frío suelo, para ahora voltear a ver el horizonte, aquella luz cegadora había desaparecido, dando lugar a la fría noche, y dejando en su lugar una gran figura de humo parecida a un hongo gigantesco.

El Sol Que Salió De Noche Donde viven las historias. Descúbrelo ahora