capítulo 1: origen

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Un hombre entró al despacho más alejado del edificio, llevaba consigo una fila de documentos, procedió a entregar los documentos a la persona del otro lado del escritorio.
Nadie se puede imaginar que la persona dentro es la emperatriz de las sombras aquella que gobierna el mundo interestelar, pero que nadie a excepción de los líderes mundiales de cada país sabe de su existencia.
Todas las órdenes las da ella, todos pueden pensar que es una anciana.
Sin embargo aquella persona sentada no pasa de los 30 años, en este mundo la longevidad de Vida llega a los 300 años incluso más.

La gente común conoce a long Haotian como su rey pero solo pocos saben que Lin yezhi es la verdadera gobernante.

-Majestad, el rey me pidió que le trajera esto, nesecita de su aprobación- aquel hombre no se atrevía a mirarla directamente a los ojos mientras hablaba.

-yutian~... -la suave y lenta voz de la emperatriz le dió al hombre un escalofrio en la espina dorsal, el sabe que cuando ella habla de esa forma es por qué está enojada. Ella observo al hombre quién era el secretario del rey con resignación, suspiro y solo indico que los papeles se dejarán a un lado.
Quería quejarse del inmenso trabajo que el maldito rey le dejaba cuando sonaron las alarmas de alerta.

-Esto no es un simulacro, repito, esto no es un simulacro, todas las personas deben dirigirse a los refugios.- se escuchó la voz por toda la capital.

-Es otro ataque, maldita sea creo que llegaron en un buen momento, debo dejar salir toda esta frustración- comento la emperatriz, sin dejar que el hombre respondiera.

Cuando el hombre se dió cuenta ella ya no estaba ahí, inmediatamente salió del lugar para ir al lado del rey.

Por otro lado la emperatriz utilizo su poder espacial para llegar rápidamente al campo de batalla, sin embargo se dió cuenta que la situación era más crítica de lo que imaginaba, los monstruos obscuros estaban a un nivel más avanzados de lo que se había visto a lo largo de la historia, el portal que se abrío daba una sensación siniestra, y lo supo, con solo ver a sus enemigos y al mismo rey luchando sin acertar un golpe crítico, se dió cuenta de que si no peleaba en serio lo lamentaria cuando fuera demasiado tarde.
Un ataque se dirigía a su gente, no lo pensó más y activo su poder espacial, dirigiendo el ataque al espacio, solo ella sabía cuan poderoso fue.

-Haotian!!! Toma a tu gente y vayanse, esto no es algo que puedas manejar, incluso yo no sé si podré derrotarlos!!- grito la emperatriz, de hecho no estába segura de que pudiera matarlos, pero se aseguraría de enviarlos a otra dimensión si era necesario.

-yezhi, no te dejaré sola-el rey ya se había acercado a ella cuando la escuchó gritar. - podemos juntos si lo intentamos, no voy a dejarte sola.

-tonto, aún eres débil por eso no puedes sentirlo pero esto está más haya de tu imaginación, solo vete, protege al imperio y se un buen rey.- ella tomo al rey y los que estaban detrás de el, utilizo su poder para crear una barrera dimensional en todo el imperio, Luego se dirigió a su gente.- están listos para morir?-pregunto. Los hombre y mujeres en su grupo estaban preparados para todo, ella los entreno pero también les dió a elegir, eran un equipo de uno para todos y todos para uno, nadie se dió la vuelta por qué al escuchar a su maestra se dieron cuenta de que ella estaba preparada, entonces ellos también.- es hora.

Todos liberaron sus sellos y comenzaron a pelear, monstruos caían del cielo completamente masacrados pero eran interminables, uno por uno del grupo fueron comidos, hasta que solo quedó la emperatriz, con toda la fuerza que le quedaba destrozó a los monstruos y se dirigió al portal, después de que entró vio una flota de millones de monstruos esperando pasar por el portal ahora cerrado. Se percataron de la presencia desconocida que entró y arremetieron contra ella.

No tuvo más opción que liberan su poder del vacío, nadie sabía que ella tenía otro poder, está era su carta de triunfo. Cuando el vacío la cubrió alcanzó un radio de 300 metros, todo lo que envolvía este espacio se movía por voluntad de ella, incluso enemigos más fuerte tendrían dificultad para moverse. El tiempo pasó y no sabía cuánto tiempo había estado ahí, cubierta de sangre y cansada miro a su alrededor, lo que antes eran millones ahora se reducía a Miles, hasta que vio a un sujeto que solo la observaba con diversión, en su sonrisa se apreciaban dientes afilados, <el monarka demonio> fueron las palabras que se le vinieron a la mente.
Una presion aplastante sintió al mirarlo, no había hecho siquiera un movimiento pero sabía cuan fuerte era el enemigo.



Rebirth: gobernare desde la obscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora