4. ¡Corre!

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[ Lunes 15 de enero, 2:17 p.m, 2018, Estados Unidos, Washington Seattle]

Pov's Masón.

-- Mierda, mierda, mierda -- maldije mientras me dolía más y más la pierna.

-- ¿Te querés callar? Haces mucho ruido -- dijo Richard en susurro.

-- Sí, por lo menos agradece que te salvamos de ese imbécil, o sino, estarías muerto en este momento -- habló Luke.

-- Ustedes no saben qué se siente tener una bala en la pierna, ¿o sí? -- dije entre jadeos -- Además, también agradezcanme, sin mí, ustedes estarían sin vida -- ellos pararon y ambos me voltearon a ver.

-- Pues gracias por tu ayuda, Masón, pero ahora necesitamos que también tengas cooperación y dejes de hablar -- Luke sonrió sarcásticamente y miró mi pierna -- Tenemos que sacar la bala en la enfermería y-...

Luke fue interrumpido por dos disparos en el salón de ciencias, solamente estábamos a dos pasillos de llegar, justo ahí nos dirigiamos.

Quise creer que eran unos de los del grupo que habían tomado un arma y le hubieran disparado a ese idiota, pero gracias a la ruidosa risa de él, supe que no era así.

Él mató a dos de nosotros.

-- ¡Cambio de plan, cambio de plan! -- susurró lo más audible para nosotros, Richard estabas entrando en pánico.

-- ¡Al gimnasio, vamos! -- abrazé a Luke y a Richard por los hombros mientras mantenía la pierna sin tocar el suelo y con la otra me ayudaba a poder caminar más rápido, ahora tenemos que correr por nuestras vidas.

Los tres al entrar al gimnasio, Luke cerró la puerta rápidamente haciendo ruido, algo que nos podía delatar.

-- ¡Haz silencio! -- susurró Richard.

-- ¡Tú también haz silencio, pelo de zanahoria!

-- ¡¿Se pueden callar ambos?! ¡Nos va a encontrar por su culpa! -- susurré audible para ellos, ambos se taparon la boca gracias a que se escuchaban pasos oír frente a la puerta del gimnasio.

Me tapé la boca rezando en que no abriera esa puerta por nada del mundo. Estaba asustado, los tres.

-- Luke, si este es el final, quiero decirte que lamento haberme comido tu pastel el viernes -- susurró Richard, Luke lo vió indignado y después de miró a mí -- Y a ti... No, contigo no tengo algo qué lamentar, siempre fastidiabas a Aidan después de la salida con Josh y Dan -- me fulminó con la mirada y se volvió a tapar la boca.

-- ¿Entonces tú te comiste mi pastel el viernes? -- preguntó entre susurro.

-- Lo siento, en verdad lo siento, culpé a Mel para que no te molestes conmigo -- Luke le dió un leve golpe en la nuca, mientras yo reí en un tono muy poco audible.

-- ¡Los escucho, y sé que están por ahí! -- gritó el loco entre los pasillos, mi risa, los lamentos y los golpes leve de los tres pararon.

-- Fue buen momento mientras duró -- susurré, el rubio y pelirrojo asintieron sin nada más qué decir.

Sentía más miedo que en la escena de Toy Story cuando todo están apunto de caer al fuego entre la basura.

𝐈𝐭 𝐡𝐚𝐬 𝐛𝐞𝐞𝐧 𝐜𝐥𝐨𝐬𝐞𝐝. [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora