No sé cómo ni por qué, pero sí, esto me está pasando.
No solo que logré morirme, sino que en estos momentos estoy manteniendo una conversación con Freddie Mercury.
Cuando termino de asimilar los hechos, quiebro en llanto.
La gata se acurruca junto a mi, y paso cuidadosamente mi mano por su cabeza.
-Oh Tiffany, no la molestes -exclama él a su gata.
-Por favor, no molesta -no sé cómo podría molestarme la gata de Freddie Mercury- tengo una en casa, Bomi.
-No es que...
-Ya se, es nombre de hombre, pero cuando me la regalaron, no sabía -explico yo, y luego doy un suspiro- la maldita se hace extrañar.
-Eso es lo que nos pasa a todos al irnos...
-También les pasa a los que se quedan...
Acabo de enterarme de la existencia de un después, y entender que ahí (aquí, en realidad) también se siente. Pero tengo muy en claro que los que más sufren son los vivos: el muerto muerto es, y listo; el problema es la gente que deja atrás.
Podría pensar en mil y un ejemplos, pero el que más viene al caso es el de Freddie: su muerte marcó vidas, a lo largo del tiempo y espacio.
-¿Cómo es...? -insinúa Freddie- ¿Cómo es el mundo ahora?
-Desde que te fuiste todo es una mierda -respondo, sin pensarlo ni un segundo- incluso para mí, que ni siquiera había nacido para cuando estabas ahí. Cada vez tengo menos fe en nada.
-¿Qué pasó con Queen?
-Dos de ellos siguen, se supone que iba a poder verlos en septiembre. De lo personal no sé nada, pero supongo que deben estar bien, todavía heridos, pero bien; como todos.
-Gracias...
-¿No sabías nada de nada?-le pregunto- Cuando creía,pensaba en ángeles, y los imaginaba viendo todo lo que pasaba entre los vivos, cuidándolos.
-En realidad si - responde el, con una sonrisa que me hace sentir que ni siquiera la muerte es tan terrible- solo quería saber como se veía desde ahí.
Empezó a caminar, y Tiffany lo siguió. Decidí seguirlos.
-Tengo muchas dudas.
-Querida, no soy un maldito profesor.
-¿Entonces por y para qué estás conmigo ahora?
-Para abrirte los ojos.
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Don't Try Suicide
FanfictionMaia es una chica algo diferente, que llega a convencerse de que su tiempo en vida acabó. Al tomar su coctel mortal, se encuentra con sus ídolos muertos: algunos integrantes del club de los 27, y el mismísimo Freddie Mercury; quienes le harán ver q...