°·Segunda Oportunidad·° Tudoque.

°·Malentendido·°

Todo fue un silencio, nadie hablo En ningún momento, todos estaban demasiados sorprendidos para reaccionar a lo que observaban.

Patana dejo las miles de preguntas que tenía en la cabeza, y se abalanzó a el chimpancé con lágrimas en los ojos, en verdad que extraño demasiado a su tío.

Tulio no había dicho nada, estaba demasiado nervioso, nadie sabía que iba a ocurrir a sí que prefería esperar y verlo por si mismo.

Había cerrado los ojos por unos momentos, se había puesto más nervioso al ver como la pájara corría hacia el.

Los abrió rápidamente al sentirse como unos brazos los rodeaban, para luego sentir como más personas se acercaban a y abrazarlo, los observó detenidamente, para luego corresponder a el abrazo de todos sus amigos.

Al terminar el abrazo el cual les fue un poco difícil separarse, Patana observó el chimpancé para luego realizarle una pregunto.

--Que haces aquí tío Tulio?-- dijo guardándose las ganas de volverlo a abrazar, en verdad que lo extraño.

--Pues verás...........................................

...

--Lo vas a contar Tío?--

--Enceguida sobrina. --

...

Todos miraron detenidamente a el chimpancé, la verdad no les fue muy difícil creer lo que escucharon, pues nunca a sido un santo después de todo, con el orgullo que llega a cargar, no sería fácil dejar que se lo recompensaran.

Después de unos segundos, lo volvieron a abrazar, en verdad hacia demasiada falta la idiotez de aquel conductor.

Juanin se separó, y recordó que tan sólo faltaban unos minutos para que empezará el programa, llevando a él conejo rojo donde correspondía.

[...]

Ya había terminado el programa, y ya los trabajadores del programa estaban regresando nuevamente a sus hogares.

Los dos mejores amigos se dirigían a la salida, sus planes eran llegar a la mansión Triviño, pero tuvieron la idea de ir a algún lugar a cenar.

A si que para cumplir con lo pensado, tuvieron que volver a subirse en un auto, antes el chimpancé se colocó la capucha.

A subirse a el auto, el conejo cerro los ojos, intentando relajarse, lo que logró con un poco de dificultad.

El sitio no estaba tan lejos, a si que a los pocos minutos, llegaron a un restaurante.

Antes de entrar, el conejo le dijo que se colocará la mascarilla, así nadie lo reconocería, entraron a aquel lugar, el cual no mostraba ser algún restaurante de mala reputación, se sentaron en una mesa, y pidieron lo que más le agradaba del menú.

Tulio no le llego a agradar mucho el silencio que se formó entre el y su mejor amigo, así que tuvo le idea de preguntarle algo.

——Hace cuenta que tomaste mi trabajo?—— dijo con algo de curiosidad el chimpancé, no tenía ni idea de cuanto tiempo pasó.