María José viaja desde New York para trabajar en un hospital de California junto a su mejor amigo Alejo. A los 2 años desea casarse con la que se suponía era el amor de su vida pero descubre su engaño y esa noche, en un caso inesperado conoce Daniel...
¿cómo pasó tanto? (fue lo que me pregunté a mi misma cuando puse más atención a lo que en verdad estaba haciendo)
En estos momentos iba saliendo de una joyería, compré un anillo para proponerle matrimonio a mi novia, la historia no es increíble de contar, al contrario, es muy sencilla, todo eso comenzó en un bar, un par de días antes de mi llegada oficial al Hospital en donde iba a trabajar, por la sobra de días que teníamos decidimos con Alejo salir y distraernos en un bar, al llegar nos dirigimos a la barra, mismo tiempo en donde una chica rubia, de ojos marrones canela oscuros se acercó y me invito a bailar, a partir de eso empezamos a conversar, casualmente resulto algo mejor que solo una aventura a mi parecer, Alejo solo se alegraba por mí aunque no le cayera muy bien Isabel, pero después de todo solo era un recelo ¿no?.
La joyería estaba a unos 20 minutos de casa, que por cierto es una maravilla, definitivamente la casa era hermosa, todo gracias a Juliana Calle y la selecta elección de casas que me dio Calle Soto Real Estate Agency, su definición era indescriptible para mí, su diseño exterior era agradable, no era demasiado llamativa ni escandalosa, por ello guardaba su elegancia y el interior era mayormente iluminado por luz natural que entraba por las ventanas, la parte trasera era bonita, tenía piscina y lugar de fogata, esta descripción es muy breve a lo que representa la casa.
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