十三

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¿𝐎𝐓𝐇𝐄𝐑 𝐖𝐎𝐑𝐋𝐃?
𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐓𝐇𝐈𝐑𝐓𝐄𝐄𝐍

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-¡Piedra, papel o tijera!

-¡Eh! ¡Gané! ¡Pasa la mano!

-¡Mi muñeca está roja!

-¡No hay marcha atrás! -dijo, frotando con el dedo índice y el medio la muñeca de Venti. Después de unos segundos levantó los dedos y los golpeó contra la muñeca adolorida. Venti chilló en su sitio.

-¡Au!

En uno de los bancos de madera de la Catedral estaban jugando Venti y (T/N). Se divertían jugando el juego que le había enseñado al chico. Al principio le pareció divertido al chico, pero después de recibir castigos que le daba la joven si perdía, fue todo menos divertido para él.

Aunque fue gratamente divertido para la mujer ver lloriquear a un Dios. Por el rabillo del ojo pudo notar como Aether volvió, pero no parecía traer buenas noticias.

-No funcionó -dijo Aether, soltando un largo suspiro y bajando los hombros. Habían vuelto al inicio otra vez.

-Lo sabía. Contigo tampoco funcionó... -suspiró Venti, frotándose la muñeca con el dolor proporcionado por la joven, que miraba para otro lado.

-"¿Lo sabías?" -repitió Paimon, confundida.

-Solo quería ver qué tan influyente era Aether, el juego recluta de la Orden -respondió Venti. Aether se sintió ofendido a ser probado de esa manera. Venti lo notó de inmediato-. Ya sabes, los mejores caballeros siempre han de presentarse con la mejor espada. Pero henos aquí... ¿No es algo digno de ser cantado? -rio entre dientes, despreocupado de que el plan A no haya funcionado.

-¿Qué quieres decir? ¿Qué no somos lo suficientemente buenos? -interrogó Paimon, también ofendida por los comentarios de Venti.

-No, no me entendiste -negó con la cabeza Venti, sonriendo levemente-. Quiero decir que es una pena que nadie en Mondstadt sea capaz de apreciar la valía de un caballero como tú. -Aquellas palabras hicieron que los dos se dejaran de sentir ofendidos y se sintieran felices-. Pues bien. Si por las buenas no podemos obtener la Lira Sagrada, tendrá que ser por las malas.

Aether y Paimon quedaron pálidos al saber en la idea que estaba pensando Venti. (T/N) sonrió con diversión al ver sus rostros. Sí que eran unos ángeles.

-Todas las ideas son bienvenidas. ¿Alguna sugerencia de cómo robarla? -cuestionó Venti, colocando las manos en la cintura. Aether quedó mudo-. Hablen. Que no les dé vergüenza. Son libres de decir lo que piensen.

¿𝑶𝒕𝒉𝒆𝒓 𝑾𝒐𝒓𝒍𝒅? | 𝑮𝒆𝒏𝒔𝒉𝒊𝒏 𝑰𝒎𝒑𝒂𝒄𝒕Donde viven las historias. Descúbrelo ahora