Capitulo 4

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- ¿Cómo debería llamarte? – la mujer encapuchada la observo de reojo y sin poder evitarlo sus labios pronunciaron lo primero que se le vino a la cabeza en un sonido mudo pero que al final la persona a su lado pudo interpretar asintiéndole satisfecha de la misma forma – Kaname.

Sus párpados se entre abrieron al mismo tiempo que su entre cejo se deformaba levemente deteniendo sus movimientos permaneciendo estática en su lugar.
- Juri sama – murmuro la mujer que se encontraba arrodillada y totalmente expuesta frente a ella.
- Vete – respondió con su usual y agradable tono de voz sin siquiera dirigirle la mirada.
- ¿Sucede algo? – la mujer cuestiono insistente y curiosa ganándose una mirada sería de esos ojos de hielo – discúlpeme me retiro entonces – se apresuro a decir haciendo una reverencia que le costó por el miedo que se había apoderado de su cuerpo y finalmente dejando sola a la pequeña niña que sin mucha importancia se dejo caer de espaldas hasta terminar recostada sobre el frío suelo con la vista en el techo.
- Al menos me hubieras borrado la memoria de esa forma sería mas fácil cumplir con tu deseó pero supongo que el ser egoísta es parte de nuestra naturaleza y eso tu y él me lo enseñaron mejor que nadie, ahora que el juego ha comenzado me pregunto ¿Cuándo harás tu primer movimiento? Tal vez mas pronto de lo que imagino, pero para eso siempre tengo una buena estrategia – una pequeña sonrisa se formó en sus labios mientras sus ojos destellaron cual carmín.

En alguna otra parte él sangre pura se hallaba sentado frente a su tablero de ajedrez observado fijamente cada pieza perfectamente alineada en su lugar correspondiente, admiro a detalle las piezas contrarias especialmente la pieza que representaba a la Reyna para luego observar esa misma pieza en la palma de su mano antes de apretarla suavemente y por último colocarla justo a lado derecho de su Rey.
- La última vez no me permitiste ninguna oportunidad y ahora que tengo una segunda no pienso desaprovecharla aun si eso significa que uno de los dos caiga – Kaname se levantó de su lugar para dirigirse hacía la puerta donde una Yuki algo apagada se encontraba de pie apunto de llamarlo - ¿Qué sucede Yuki? ¿No puedes dormir?
- No – Kaname sonrió ligeramente elevando su mano para acariciar dulcemente la cabeza de la menor.
- ¿quieres que duerma contigo?
- Si – respondió sin dudar.
- Vamos entonces – así ambos sangre pura se dirigieron a la habitación de la menor – Yuki.
- Si.
- ¿Qué piensas sobre invitar a la pequeña Juri a pasar unos días con nosotros? Se que tienes a los miembros de la clase nocturna acompañándote pero no estaría de mas tener otro tipo de compañía y además – Kaname detuvo sus pasos y por ende Yuki también – después de todo también es familia.
- Tienes razón pensaba comentártelo en algún momento pero no encontré la oportunidad, la verdad es que tengo mucha curiosidad por la pequeña Juri.
- ¿es así?
- Hay algo en ella que me llama la atención pero no se que es , me gustaría poder conocerla mejor – la voz de Yuki a pesar de ser baja denotaba emoción y obvia curiosidad tan característico de ella.
- Es bueno saberlo, hablare con Ichijou para que visite a Tsukiyami entonces pero me preocupa que la pequeña Juri pueda sentirse incomoda por la repentina proposición – Kaname fingió preocupación en sus palabras a la vez que cerraba puerta detrás suyo y caminaba con Yuki hacia la cama.
- Entonces deja que acompañe a Ichijou sempai.
- Si eso deseas por mi esta bien, ahora duerme ya Yuki – los brazos de Kaname rodearon el cuerpo de su pequeña hermana quien no tardo en caer en un profundo sueño, por su parte Kaname solo podía pensar en su siguiente jugada una vez ella entrara en sus territorios.

-	Discúlpeme mi señora ¿Acaso no fue de su agrado la cena de anoche? – Kazuya se atrevió a cuestionar observando a la infante en su labor de jardinería la cual consistía en recolectar aquellos lirios semejantes al color de la sangre

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- Discúlpeme mi señora ¿Acaso no fue de su agrado la cena de anoche? – Kazuya se atrevió a cuestionar observando a la infante en su labor de jardinería la cual consistía en recolectar aquellos lirios semejantes al color de la sangre.
- No tenía apetito – respondió sin mas con su natural desinterés sin dejar de ser angelical.
- Ya veo, lamento no poder ofrecerle mas de lo que me gustaría.
- No te preocupes por eso, lo que necesito pronto vendrá por si solo sin necesidad de esforzarme en conseguirlo.
- Aun así me preocupa que sus fuerzas no se hayan restaurado aún.
- Es normal después de mucho tiempo y si lo que te preocupa es que puedan ir tras de mi pierde cuidado, hasta donde yo se Kaname no dejara que eso suceda porque esta tan encaprichado con el pasado que mientras le sea de valor me necesitara, por cierto mi habitación ya no me es cómoda, la sola intromisión de esas sanguijuelas que sirven a ese hombre me revuelve el estómago.
- De inmediato hare que preparen una habitación nueva.
- No será necesario – Kazuya no pudo cuestionar nada cuando uno de los sirvientes se acerco anunciado la llegada de visitantes.
- Buenas tardes Tsukiyami san – saludo Takuma.
- Bienvenidos Yuki sama y joven Ichijou.
- Lamentamos haber venido sin avisar.
- Para nada es un honor que Yuki sama me visite, pero tengo curiosidad por saber la razón.
- Bueno la verdad es que me gustaría invitar a Juri chan a pasar una temporada en mi hogar.
- Es muy considerado de su parte ¿Usted que opina Juri sama? – él noble vampiro aparto su atención de la sangre pura hacia la infante a sus espaldas quien aun sostenía las llamativas flores.
- Me encantaría por supuesto – Yuki no pudo evitar sonreír desganada por la contrariedad de las palabras con los gestos de la pequeña.
- Hola antes no tuvimos la oportunidad de hablar – Takuma se acerco confiado y alegre hacia ella inclinándose para poder estar a su altura y extenderle su mano con una amplia sonrisa – mi nombre es Ichijou Takuma pero puedes llamarme oni chan – la infante observo por unos segundos la mano que él rubio le tendía para  terminar correspondiendo al gesto dejando sorprendido al noble mayor y un poco a Yuki que si bien para ella Juri era una niña lo suficiente intimidante cómo Kaname solo que con la diferencia de que al mismo tiempo provocaba querer habrazarle y cuidarla.
- Un gusto Takuma ni chan.
- Que linda por cierto veo que te gustan las flores, oh es cierto, si lo pienso con atención tu nombre tiene el mismo significado, bueno creo que ya que Juri chan ha aceptado venir tengo que avisar para que todo este listo así que de momento esperaré afuera – una vez él noble se retiró Yuki aprovecho para saludar también y conversar un poco mientras Tsukiyami ordenaba que prepararan las cosas de su señora.
- Entonces Juri chan ¿Cuántos años tienes? – cuestiono Yuki provocando que internamente la contraria se divirtiera por lo tonto que eso le pareció.
- Solo tengo diez años Yuki ne san, así que como veras estoy en pleno desarrollo y necesito alimentarme bien ¿No te gustaría alimentarme? – por primera vez Yuki pudo ver una expresión diferente en el níveo rostro de la pequeña y sin querer los bellos de su nuca se erizaron – es broma, solo necesito un poco de energía vital para estar satisfecha.
- Oh si, cla…claro – la sangre pura no lo sabía en ese momento pero ese sería el principio de un juego donde ella sería el blanco de diversión de la traviesa vampiresa.

Las dos Reynas (Kuran Kaname)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora