Tío kazutora! | Hiatus

Después de ti : Niño tigre

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¿Qué tipo de crimen tan grave hizo en su anterior vida para estar como estaba? ¿Tan desgraciado habia sido su otro yo para que el karma cayera en él con tanta potencia y maldad?

En la vida hay momentos inexipicables, momentos los cuales te preguntas ¿Por qué a mi? ¿Esto me está pasando enserio? y muchas más del mismo estilo, ninguna con una respuesta fija u otras que si la tienen. Cosas del destino.

Pero, en su caso, aquel destino que le habia tocado era tan malo y sin compasión. No se veía a si mismo alguien malo, más bien siempre trató de ser bueno y... dar todo su amor sin importar quien era. Realmente fue amor.

Se sentía asqueado, horrible, destrozado, usado... usado un todo los sentidos.

Entonces si era una persona de bien ¿Por qué le estaba pasando eso? ¿Dios no le perdono algún pecado que cayó todo las consecuencias de este asi de la nada y con tanta fuerza como crueldad?

Tal vez no tenía nada que ver con este mismo, tal vez solo fue una enseñanza de que no hay que confiar en ninguna persona, sin importar su raza, forma de ser o... su linda sonrisa y su forma de manipularte.

¿Cómo es que su vida cambio tanto de un momento para el otro? Hace unas semanas juraba ser el preferido de Dios, ahora se sentia de la forma contraria.

No podía dejar de mirar abajo cada vez que lo recordaba.

¿Tan idiota fue para caer tan bajo?

Era imposible no vomitar después de eso, o quizás no era ese el caso. Sus entrañas se retorcian de asco de tan solo generar imagenes de aquello, o quizas no tenia nada que ver con ello. Ya no tenía ganas de levantarse de la cama, pensando que tiempo atras tenia con quien levantarse a la par, o quizas no era eso que lo tenía tan impaciente por su anhelo.

Era repugnante pensar en él , más no imposible para su corazón roto que aún pensaba en reconquistar su amor cuando este no era el problema de aquello. Simplemente tan repugnante.

Vomito en unos arbustos voluptuosa que estaban al lado de la banca donde se encontraba. Su garganta dolía y su boca sabía a mierda ¿Había una posibilidad de devolver algo que no existía? El líquido que se mostraba en las plantas era transparente.

Se encontraba tan mal, quería desmayarse, más no se lo permitía en aquel lugar. Quien sabe que cosas tan asquerosas le harían si lo encontraban ahí tirado. No se queria arriesgar.

"Es una puta mierda". Dijo en voz alta, subió sus piernas a la banca y paso sus manos de arriba para abajo con el objetivo de calmarse.

Pero era imposible aquello. Sus piernas temblaban como si el frío fuera infernal, aun estando bien abrigado sentia la helada brisa recorrer su cuerpo. Odiaba otoño.

Se enjuago la boca con la pequeña botella de agua que cargaba consigo, se la tomó y lo escupió en las mismas plantas de antes.

Tenia hambre, pero no quería salir del comedor con aquellas miradas de despreció y burla.

Su mano acarició su vientre, sentia como esta lo calentaba y se permitió, después de tiempo, sonreir.

Tal vez no iba ser tan malo esto.

Tal vez solo se estaba engañando a si mismo.

Su tripas reclamaban comida, haciendo que estas rujieran a más no poder.