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Min Yoongi, hijo único de Min Seung, dueño de varias casas productoras en todo Corea y parte de Estados Unidos.

Es el CEO de la casa productora en Daegu, pero su vida es tan aburrida y monótona, que está cansado de hacer lo mismo día y noche, los siete días de la semana, los trescientos sesenta y cinco días del año.

Es por eso que en cuanto su padre le propone mudarse a Seúl, para dirigir la empresa, este acepta de inmediato, pensando así que podría darle un poco de diversión a su vida, saliendo a diferentes bares por las noches después de salir del trabajo.

Habían transcurrido ya ocho meces desde que llegó a Seúl y cada día de esos meces ha llegado de madrugada a su casa, metiendo a diferentes mujeres a esta, tratando de saciar su deseo por el sexo, fallando en el intento en cada uno de ellos.

Su primo jungkook, quien es su mano derecha en la compañía, lo ha invitado a un bar diferente, y cuando le dijo diferente, jamás se imagino que en realidad era diferente al resto.

– Te lo dije kook, todos los putos bares en el mundo son iguales, aburridos y sosos – se quejo el pálido al ver la fachada del bar

Las luces neon parpadeando de forma tétrica, pero con un llamativo nombre en mayúsculas, que al leer, hizo que Min riera a sus adentros.

– ¿Es encerio? – se burló – ¿Encerio está mierda se llama el CLOSET? –

– No siquiera has visto por dentro y ya te estás quejando – Jungkook se acercó a la entrada, mostró su pase y le sonrió al guardia – este pálido gruñón viene conmigo – le informo al guardia señalando a su primo

Yoongi, al ver cómo el guardia le guiñaba un ojo a Jungkook, hizo una mueca, pero aún así lo siguió al interior del bar.

Sus ojos se abrieron en grande al ver a unos chicos bailar en una especie de tarima, un puñado de hombres sentados en una especie de sillones en forma de U, con mesas en el centro donde tenían sus bebidas.

Yoongi y su primo se fueron a tomar asiento en un lugar más reservado, dónde justo en frente de ellos se encontraba una pequeña tarima con un tubo de metal en el centro de esta.

– Hola, ¿Van a beber algo en especial? – preguntó un chico de linda sonrisa cuadrada y rostro hermoso y sexy

– Yo quiero un whisky en las rocas – pidió Jungkook

– Vino tinto – Min pidió sin expresión alguna

– ¿Desean una botana? – preguntó anotando el pedido en una comanda

– A ti muñeco – Jungkook sonrió coqueto

– Ya sabes dónde está mi habitación bebé –

– No juegues conmigo Kim, sabes que me molesta que toques a otros – gruñó molesto el pelinegro de sonrisa de conejo

– Esto es trabajo, no todos nacimos en cuna de oro como tú – respondió dando media vuelta para ir por los pedidos

Min estaba por preguntar que había sido todo ese show que le armó al mesero, pero su pregunta quedó solo en su mente cuando el Dj hablo anunciando que la sensación de la noche.

– Pongan mucha atención todos – llamo la atención el Dj – con ustedes, el más sexy, candente y tierno.......... MinMin – presento

Acomodándose mejor en su lugar, Min observó como el telón se abría y un chico con pantalones de cuero negro y camisa del mismo color salió, con tres botones desabotonados mostraba sus lindas clavículas, dándole un aspecto sexy.

Con un antifaz de siervo color negra, sus labios gruesos y ligeramente rosas le daban un aspecto jodidamente sexy.

El pelinegro comenzó a bailar de manera lenta, con movimientos sexy comenzó a bajarse los pantalones, Side to side de Ariana grande sonaba dándole un ambiente más candente.

Yoongi no podía dejar de mirar al chico sexy, trago grueso cuando el chico conecto miradas con él y sonrió ladino, al ritmo de la música, MinMin se fue asercando a la mesa de Min, logrando que este se acomodara mejor en su lugar.

Subiéndose a la tarima que se encontraba frente a la mesa de Yoongi, MinMin comenzó con su baile sexy, tomo el tubo y de un salto comenzó a girar en este, arqueando su espalda llevo su cabeza hacia atrás dandole un aspecto caliente, sus labios entre abiertos dando a entender que gemía de placer.

Dejando caer su cuerpo lentamente hasta tocar el suelo con sus perfectos y redondos glúteos, unos que Min noto a la perfección, MinMin dió vuelta en el suelo colocándose en cuatro, comenzó a mover su trasero como invitando al público, o más bien a Min a entrar en él.

Se levantó de manera sexy y comenzó a desabotonar los botones de la camisa negra, quitándosela y pasándola al público, de un solo movimiento se deshizo de sus pantalones, ya que estos solo tenian Velcro a los costados.

Cuando el pálido vio al chico quedar solo en boxer, unos que eran muy pequeños, dejando resaltar su redondo trasero y su semi erección, coloco su mano en su entrepierna, sintiendo lo duro que se había puesto con solo ver a ese chico.

MinMin se acercó a Yoongi, colocándose ahorcadas en él, meneando sus caderas de adelante a tras, provocando que el miembro de Min se restregara en su trasero, haciéndolo gemir despacio al imaginarse a ese duro pene dentro de él.

Lentamente acercó sus lindos labios a los de Min, creando un rose entre ellos.

MinMin sintió el aliento fresco chocar en sus labios y volvió a gemir, haciendo que Yoongi sonriera ladino.

Esos lindos ojos verde jade conectaron mirada con los del pálido, que eran más oscuros que la noche sin estrellas, pero que reflejaban lujuria pura en ellos.

Yoongi quedó cautivado de esos hermosos ojos y labios gruesos, o quizás enamorado del stripper que le bailaba de forma sensual, restregando su exquisito trasero en su pene.

Taehyung, el mesero, se acercó a ello y justo cuando Min estaba por robarle un beso al lindo y sexy stripper, este le susurro al oido.

– MinMin, los de la mesa cinco quieres que les bailes a ellos y te pagaran el doble de lo que te dan cada noche – dijo tomándolo de la muñeca para ayudarlo a bajar del regazo dónde estaba

– Mmmm...... Lo siento guapo, el el deber me llama – susurro sobre sus labios

– No – negó el pálido sujetándolo de la cintura con posesividad – quédate y te pago el triple si te vas conmigo a la cama  – susurro sobre sus labios

– Tentadora tu oferta mi amor, pero solo soy stripper no un jodido puto – gruñó levantándose y alejándose de él

Min se levantó molesto y camino a la barra donde se encontraba el mesero que los había atendido y saco su tarjeta de su billetera y pago para después salir del bar con una puta erección y unas tremendas ganas de besar a ese sexy stripper.

– ¿Molesto porque MinMin no quiso salir contigo? – le pregunto Jungkook con diversión

–Ese muñequito estará en mi cama, ya lo verás – gruñó molesto y subió a su auto seguido de jungkook

Esa noche, Min Yoongi durmió con una jodida erección que ni masturbándose en memoria del sexy stripper se le bajó la calentura, jamás se había sentido atraído por una persona de tal forma de no poder dormir de lo exitado que estaba.

Es más, él jamás había tenido un puto sueño húmedo, y menos con un chico.

Ahora solo tenía dos opciones, una era seguir con su maldita vida aburrida y rutinaria, o, investigar quién era el sexy y ardiente stripper y conquistarlo.

Mi vecino es Stripper [YM]{+21}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora