── Cuando a Shuhua se le ocurrió eso, Soojin resopló. Por supuesto que ganaría, pensó, ¡era un par de miles de años mayor que ella! La ángel más joven se cansaba de las cosas con bastante facilidad. No había manera de que ella perdiera esta apuesta...
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Ha pasado un tiempo desde que llegaron a la Tierra y las cosas iban...
No tan mal en realidad.
Terminaron en Seúl. Aparentemente era una ciudad bastante famosa, y también era enorme.
Encontrar un lugar para quedarse no fue tan difícil como pensaba Soojin, y los humanos resultaron ser más interesantes de lo que había imaginado.
¿Eran, en su opinión, innecesariamente complicados?
Claro, la Tierra era mucho más grande de lo que Soojin había imaginado, pero ¿en serio? ¿Miles de lenguas para una sola especie? Por supuesto que eso no era un problema para ellas ya que, siendo ángeles, conocían todos los idiomas que habían sido creados, pero ¿por qué complicar sus vidas de esa manera?
También tenían este extraño complejo de autoabsorción. No es que pudiera decir mucho al respecto, pero al menos los ángeles no pensaban que eran la especie superior.
Bueno...
De acuerdo, tal vez no eran tan diferentes después de todo. Pero era unpoco molesto viniendo de humanos, sabiendo con certeza que había cientos de especies mejores que ellos de cabo a rabo.
Además, Soojin notó que tenían esta extraña obsesión con las apariencias. El llamado "bonito privilegio" era probablemente la cosa más ridícula pero divertida que había aprendido sobre los humanos. Probablemente fue la razón por la que lograron encontrar un apartamento tan fácilmente sin siquiera haber encontrado un trabajo todavía, y siendo ángeles literales, sabía que a veces sería útil.
Así que sí, no fue tan malo después de todo.
Fue un miércoles flojo. Soojin estaba viendo sus dramas habituales en la televisión cuando Shuhua regresó a casa, pero fue un punto de quiebre en la historia, por lo que le prestó poca o ninguna atención a Shuhua, solo asintió rápidamente en su dirección y dijo un "Hola" en voz baja antes de volver a lo que estaba viendo.
Allí estaba, la respuesta que había estado esperando desde que comenzó el drama, la música dramática sonaba a todo volumen, todos los personajes se quedaron en silencio y...
Espera.
"¿Shuhua?"
"¿Sí?" Shuhua se detuvo en seco, dio un paso atrás y asomó la cabeza por la puerta para que Soojin la viera, esta última hizo una pausa en su programa porque no quería perderse nada.
"Déjame ver todo tu cuerpo".
Shuhua obedeció lentamente.
Sí, ella vio correctamente.
"¿Qué estás haciendo?" No sabía si podría haberse reído o si debería haber estado más preocupada.
Shuhua permaneció en silencio durante un par de segundos, con la confusión creciendo en su rostro.
