Nunca en mi vida había dormido tan cómodamente. No se ni que hora es pero solo se que estoy en el sillón de la casa de los Norris. Se escucha algo de ruido desde la cocina pero decido no darle importancia y tomo mi teléfono. Me han mandado el horario y gracias a Dios tengo las clases en los primeros dos pisos de 7 qué hay en la uni.
Mañana es mi primer día del segundo año y estoy contenta de regresar. Quiero ver si entran estudiantes nuevos para ver si así dejo de ser la fuente de chismes. Todos en la uni piensan que no me doy cuenta pero son cero discretos.
-Buenos días pequeña jirafa. ¿Cómo amaneciste?
-Buenos días Lan. Creo que bien. Duele solo un poco.
-De acuerdo. El doctor dejó que reposo hasta que empezarás la universidad así qué hay que continuarlo. ¿Quieres desayunar? Los chicos y yo preparamos el desayuno.
-No estoy muy segura de querer probar esa comida-digo como broma.
-¡Te escuche Luciana! Te arrepentirás de no probar mis increíbles huevos revueltos.- Carlos grita asomándose con la pala en la mano y señalándome acusadoramente.
-¿No se supone que debes estar viendo los huevos?
-¡Los huevos! ¡Que se me queman!
Lando y yo reímos. El me abraza y me da un beso en la cabeza después de mover el gorro del mameluco.
-Me pasas las muletas por favor.
-No. Nada de eso señorita. Por el momento usted tiene transporte gratis-mi cara pasa a una confundida de inmediato pero el solo ríe.
Lando me toma en brazos como bebé y me lleva a la cocina para ayudarme a sentarme en el lugar junto al de él y al de Carlos. El más lejos de Pierre.
-El desayuno se ve bien. Un poco quemado pero...
-No te preocupes Lu. Eso solo le dará sabor.-interrumpe Carlos con aires de superioridad.
-Si tu lo dices.
El desayuno transcurre entre risas y comentarios chistosos por parte de los chicos. Debo admitir que juntos son un caso serio todos ya que es como si tuviera un circo privado.
-Lu, ¿cuando entras a la uni?
-Mañana Dan. Y ahora que lo pienso no tengo nada preparado.
-Tengo una increíble idea-dice George.
-Tengo miedo pero a ver dila.
-Vamos todos de compras para ver qué te falta. Nosotros te ayudaremos.
-Eso es una excelente idea. Así no te estresas tu solita y me podré asegurar que estes bien.
-Lando, no es necesario que todo el tiempo veas como estoy.
-Lo es.
-No lo es.
-Lo es para mi. Deja que las personas se preocupen por ti. No todos son como tus padres.
Auch, golpe bajo. Finjo que no duele y termino de comer lo poco que me quedaba de desayuno. Nadie se ha dado cuenta del comentario estúpido e innecesario de Lando y lo agradezco.
Mis muletas están en la sala así que sin que Lando se de cuenta le pido a Carlos que me traiga las muletas. El lo hace y con su ayuda me pongo de pie. Al ya estar de pie me apoyo rápido en las muletas y me voy de la cocina a mi casa para arreglarme.
-Gracias por el desayuno chicos, estuvo rico. George, ¿a que hora te quieres ir?
-Cuando tu estés lista. Nosotros te esperamos.
-Gracias. No tardo.
-Ey, ¿a donde vas?
-A mi casa Norris. Necesito arreglarme.
-Estás enojada.
-No es cierto.
-Si lo es.
-No lo es. George, te aviso cuando esté lista.
-Si Lu, no te preocupes.
Salgo de la casa lo más rápido que puedo para que Lando no me siga. No se por que no lo hace pero lo agradezco. Si lo veo justo ahora solo se arriesga a que dañe su hermosa y preciosa cara llena de lunares que me encantan.
Termino de arreglarme con Harry Styles sonando en los alta voces de mi casa. Decidí ponerme unas licras de ejercicio y arriba la férula y una camisa blanca básica con una hoodie. No iba a hacer mucho y prefería ir cómoda.
Al terminar me dirijo a la casa de los Norris y Carlos me abre la puerta.
-Chicos, ya llegó Lu. Podemos irnos.
Mi teléfono comienza a sonar así que en lo que los chicos vienen me siento en el sofá y contesto la llamada.
No fue nada importante ya que resultó ser el mecánico diciendo que ku coche estaba listo y lo podía pasar a recoger hoy mismo. Aprovecharé que estoy con los chicos para que alguno se traiga mi coche, al fin y al cabo ahora se que manejar no es problema para ninguno de ellos.
Todos salen y nos repartimos en los autos de todos. Lando no dejo que me fuera con alguien mas así que en su coche solo veníamos nosotros dos.
-¿Por qué te molestaste?
-No me moleste.
-Vamos Lu. Lo sé, estas molesta por algo.
-Ya te dije que no. El semáforo está en verde.
-¿Fue por lo de tus padres?
-Dobla en esta esquina para llegar a esta papelería.
-Es por lo de tus padres. Mira, lo siento mucho pero quiero preocuparme por ti y tu no me dejas.
-Hay más maneras de hacer que me deje cuidar como por ejemplo solo pedirlo.
-Lo siento. No quise traer el tema de tus padres a la conversación.
-Solo me recordaste que mi familia no me quiere.
-Y por eso llegaste a la mía. Mi familia te quiere mucho. Mamá te quiere como una hija más al igual que papá. Cisca recurre a ti para lo que sea. Sav te encarga a Mila. Mila te quiere más que a mi. Yo te quiero-dice muy rápido, como si estuviera nervioso. Creo que mi corazón se derrite aun más. Lando Norris acaba de decir que me quiere. Sigo como en un estado de shock. Nadie me había dicho esas palabras más que mis abuelos.
Salgo de mi trance cuando escucho mi teléfono sonar. Es mi tío.
-Hola insecto.
-Hola tio. ¿Sucede algo?
-No mucho en realidad. ¿Que tal las cosas por allá?
-Tranquilas, creo.
-¿Paso algo?
-Caí y rompí los ligamentos de la rodilla.
-¿Y que pasará si te piden modelar insecto?
-Ouh, no lo había pensado. Tendré que avisar a la agencia.
-Eso sería buena idea. Te hablaba para saber si quieres quedar con nosotros para cenar.
-¿Puede ser en mi casa? Mañana empiezo clases y ahora me duele un poco la rodilla-volteó a ver a Lando que solo escucha la conversación en silencio. Puedo ver que reprime algunas risas pero no le doy importancia.
-De acuerdo. Llegamos a las 8:30.
-Está bien tio. Traigan suficiente pizza.
-Adios insecto, nos vemos en la noche.
Cuelgo y Lando deja la carcajada que tanto estaba guardando.
-¿Por que insecto?
-Mis padres me encargaban semanas y semanas con mis tíos y un día mi primo se peleo con mis tíos quejándose del insecto que apestaba su casa.-digo soltando un suspiro no muy cómoda con la situación.
-¿Y que tiene que ver contigo?
-Yo era el insecto. Yo me quedaba en su casa. Yo invadía su espacio. Eso es lo que soy para mi familia. Los únicos que me aguantaban un poco más eran mis abuelos pero ellos ya no están. No tengo a nadie. ¿Acaso no lo entiendes?- mi respiración aumento significativamente, me tiemblan las manos, estoy sudando y tengo muchas ganas de llorar. El se da cuenta y en un rápido movimiento mueve el coche fuera de la calle para detenerse y desabrocharse el cinturón y poderse girar más cómodo.
Por el espejo puedo ver como los chicos que venían atrás de nosotros se dan cuenta del movimiento de Lando y se detienen en fila atrás de nosotros. Momentos más tarde está Carlos en la ventana de Lando esperando a que el le abra para hablar.
-Ahorita nos vamos. Dile a los chicos que no tardamos-Lando interrumpe a Carlos antes de que el si quiera haya empezado a hablar. El se da cuenta de la voz que utilizo Lando, una exigente y seria, y sin rechistar va a informar a los chicos-. Ven acá. Necesito que respiremos juntos, ¿recuerdas como lo hicimos la primera vez?
El se acerca más a mi para envolverme en sus brazos y ayudarme a respirar bien de nuevo.
-Dime qué no soy un estorbo para ti. Desde que llegue solo he causado problemas.
-Nunca causarías un problema Lu. No eres un estorbo y nunca lo serás. Si tus padres o toda tu familia no te quiere no te debe importar. Tienes a la mía y te puedo jurar que estos chicos que están atrás dd nosotros no te van a dejar sola de nuevo. Es imposible librarse de ellos.
Los chicos se asoman por las ventanas del auto sonriendo y saludando felizmente provocando que un intento de sonrisa salga de mi y una enorme carcajada de Lando.
-¿Lo ves? Ellos se han convertido en una familia para mi y no tardarán en convertirse en una para ti. Eres maravillosa y que se joda el que piense diferente por que, ¿quien a tu edad ya trabaja y paga su propia universidad, se mudó a una casa sola y se compró el coche de sus sueños?
-Gracias-me permito esconder la cabeza en el pecho de Lando mientras el me hace mimos en la espalda y besa mi cabeza. Unos minutos después noto como Lando baja los vidrios del auto y los chicos se acercan de nuevo.
-¿Que sucedió?-Alex pregunta por el lado de mi ventana.
-¿Por que ese movimiento? Por poco y no nos damos cuenta.-George complementa la idea de Alex.
-Mi culpa. Lo siento chicos.
-No fue tu culpa y no te disculpes-Lando levanta con cuidado mi cabeza para mirarme a los ojos y hacerme entender.
-Pero si yo tuve el ataque.
-Y yo decidí detenerme.
-Bueno chicos, se veían tan tiernos abrazados que Carlitos y yo tomamos fotos. Luego a nos agradecen-canturrea Daniel.
-¿No las publicaron, cierto?
-No. Sabemos que si se filtran bye a la privacidad. Te las mando llegando a tu casa.
-De regresó pasemos por pizzas extras y cenamos todos en mi casa.
-Excelente plan Lulu-dice Charles.
-¿Estas mejor?-Lando dirige su mirada a mi de nuevo y yo asiento con la cabeza dándole un último abrazo.
-Podemos irnos. Son muchas cosas de comprar.
-Vámonos Lu. Chicos nos vamos ya.
Los chicos se suben de nuevo a sus autos y arrancamos a la papelería para comprar mis útiles.
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TODO GRACIAS A UN ACCIDENTE
FanfictionTodo en mi vida esta hecho pedazos y gracias a ese accidente con el café tú la reconstruiste.