XIII

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Capítulo 13. -  Tredecima Noche.

꧁༺༒༻꧂


El día transcurrió de manera lenta para los cazadores que habían logrado encontrar una cueva justo a tiempo mientras el sol asomaba por el horizonte para ocultar a los vampiros de sus rayos.

En cuanto amaneció, las criaturas nocturnas comenzaron a sentirse somnolientos. Zhan dejó de ronronear en sus brazos y Luhan simplemente dejó de intentar soltarse del otro cazador y se dejó ir.

Yibo miró a su vampiro dormido, ya no lucía tan pálido, por el contrario, parecía casi satisfecho. Sabía que en cuanto Zhan despertara tal vez le reclamaría por haberse aprovechado de su adicción a su sangre pero, ¿qué más podía hacer? Xiao no estaba escuchándolo ni quería hacerlo a pesar de saber que ambos cazadores los salvaron minutos antes.

En ese momento solo pudo pensar en apretar su muñeca donde el corte por la copa la noche anterior le había hecho mientras ardía en celos por verlo beber de aquella mujer. Manchar su cuello con su palma ensangrentada le dio el control total de la situación, pero no pudo evitar excitarse en cuanto Zhan clavó sus colmillos y comenzó a succionar haciendo ruiditos obsenos que le erizaron la piel.

Ni siquiera le había importado frotarse con Zhan ante la mirada de su compañero, solo estaba feliz complaciendo a su hermoso vampiro quien aún era muy adicto a su sangre, eso le aliviaba bastante.

Aún así, tenía que saber porqué Zhan había podido alimentarse de la reina, saber el porqué aquellos vampiros ahora los perseguían, ¿se habían escapado? No lo sabía y aunque necesitaba respuestas, para él lo más importante fue que finalmente había encontrado a su hermoso vampiro y lo tenía en sus brazos dormido plácidamente, satisfecho por su sangre y por si orgasmo en conjunto.

No le importaría enfrentarse a la mujer, tal vez debía mover sus fichas e idear un nuevo buen plan para hacer que el consejo se encargara de ella para que él finalmente pudiese estar en paz con su vampiro.

Ya no quería luchar más, quería dejar atrás esa vida, ahora entendía a la perfección que no todos los vampiros eran malos y no todos los cazadores eran buenos, no le importaba lo que ocurriera más adelante, solo quería estar con él, pero sabía que las cosas no serían tan fáciles. Nada en esta vida lo era.

Sehun lo sacó de sus pensamientos cuando este se acercó al vampiro rubio que reposaba en el suelo durmiendo con sus manos cruzadas en le pecho como el típico cliché de un vampiro.

Lo miró en la penumbra por algunos segundos, luego con mucho cuidado acercó la mano al rostro del rubio y tomando sus pestañas, las jaló suavemente hacia arriba para abrir los ojos del vampiro, apenas y se podía distinguir entre la oscuridad de la cueva pero Sehun tenía que saber que no había imaginado el brillo en los ojos del chico.

- ¿Qué haces? - Lo cuestionó Yibo.

- ¡Sh!

- No lo molestes... se ponen muy irritables si los despiertas durante el día. - Susurró.

- Es que... solo quiero saber por qué.

- ¿Por qué es ciego?

- Mn, no creo que lo fuera la primera vez que lo vimos.

- No sabría decirtelo, apenas y lo noté. - Dijo acomodando con cuidado a Zhan en sus brazos, se detuvo cuando el vampiro frunció ligeramente el ceño.

Nocturnos (YiZhan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora