Mal Acostumbrada - OMEGAVERSE - Kai'sa x Ahri

Capítulo 9: Imposible de olvidar

Podía sentir esa piel otra vez en sus manos y en sus labios. Cálida y con ese aroma que jamás había abandonado su sistema. Escuchaba su voz en suaves suspiros y jadeos. Podía volver a besar esos labios carnosos tan suaves y deliciosos.

Su alfa estaba extasiado de sentir a la omega zorruna. A su presa, a la omega que consideraba suya por dictado natural. 

-Hermosa...- jadeó contra la piel entre los pechos de la omega al dejar un beso y subir hasta la base del cuello.

Miró a los ojos a la omega, de solo hacerlo, el mundo se detenía, se olvidaba de donde estaba, se olvidaba que estaba en pareja,  para ella y su alfa solo existía aquella omega, como si fuera la única del mundo.  Acarició los costados de esta con sus manos hasta tomar su nuca y las caderas para ir recostándola quedando entre sus piernas. La admiró y descendió a besarla.

-Dios, eres hermosa...- miró todo el cuerpo de la omega al arrodillarse para terminar de desnudarse.

-Kai...- Extendió sus brazos para recibirla, sintiendo como el peso de esta se iba apoyando suavemente sobre ella y la cubría con su cuerpo.

El calor del cuerpo de la omega y su olor le embriagaban. Hundió su rostro en el cuello y depositó un beso. Otra vez usaba un chooker como medida de seguridad. No podía culparla porque si le daba la posibilidad no dudaría en hincar sus colmillos en su nuca y hacerla suya, suspiró tratando de controlar ese impulso animal que la dominó en un instante.

La marca del vínculo ya se había desvanecido con el tiempo que no se veían, pero no se resistió a hacerla de nuevo atrapándola en brazos.

-Aaahhh... ing... aaaahhh....

La escuchó gemir cerca de su oreja aferrándose a sus cabellos y a sus espalda, no le molestaba si esta vez clavaba las uñas en el proceso. La idea de sentirla aún más profundamente en su ser superaba su psiquis, su alfa estaba dispuesto a permitirle cualquier cosa, y ella también. 

En un momento que se alejó de los pechos que tanto gusto le daban tener en su boca, sintió las suaves manos en su mejilla y sobre sus labios, los entreabrió al relajarse permitió que el pulgar se deslizara al interior el cual lo chupó con deseo, todo era afrodisíaco para ella, jadeó al sentir como este acariciaba sus colmillos. Cerró un ojo con fuerza al sentir como esa caricia enviaba un impulso eléctrico a todo su cuerpo. ¿Acaso sus colmillos se habían convertido en una zona erógena solo porque Ahri los había tocado?

La omega se levantó tomando su rostro y sonrió buscando un beso. La mano que estaba jugueteando con sus colmillos descendió a su sexo y lo empezó a masajear para guiarlo a su entrada.- Métela...- jadeó con dominancia.

Kai'sa dejó que la guiara a su entrada y completó la penetración con sus caderas. Estar unida a ella era maravilloso. El cielo en la tierra, el universo en sus manos  cuando tomó la cintura con sus manos y se movía disfrutando suavemente de la sensación y los sonidos húmedos que se producían por el exceso de humedad al entrar y salir de ella.

Se le formuló una sonrisa al oirla gemir, una sonrisa de felicidad de sentirse tan completa con aquella omega. Otra vez, deseaba que la noche no terminara. Que no pararan y que el tiempo se detuviera en ese instante para tener a la omega zorruna en sus manos, para sentirse la ama y señora del universo entero.

***

Kai'sa había salido de la ducha y se estaba secando el cabello cuando se sentó en el borde de la cama. Ahri estaba con la bata de ducha recostada en la cama. No se hablaban luego de haber terminado y cada una haber tomado un turno para darse un baño y sacarse el sudor y el olor a sexo de sus cuerpos.