Capítulo 10: No debo... Pero quiero

631 47 2
                                    

Aquella noche había sido una de las mejores de su vida y a su vez una de las últimas. Ahri sabía que no quería volver a ver a esa alfa, prefería guardarlo como un recuerdo que usaría cuando se masturbara. 

No iba a negar que, probablemente, había encontrado a la mejor amante que jamás había tenido. Ese Hambre que había tenido por ella la había hecho disfrutar como jamás había pensado que podría con un Alfa.

-Kai...sa...- murmuró su nombre al girarse en la cama en el nuevo hotel donde se hospedaba, luego de haber viajado de nuevo.

No tenía fecha de retorno próximo a la Ciudad, aunque esperaba que fuera pronto, necesitaba poder relajarse un poco de todo su trabajo, reuniones y demás temas sociales.

A veces, hablaba con Evelynn por teléfono cuando tenía la oportunidad. Si bien era una buena forma de distraerse cada tanto. En su mayoría debía escucharla quejarse de tener que ir a las reuniones del consejo de Omegas, ya que Ahri no podía suplantarla, algo que de verdad le molestaba.

-Actúa como adulta, Eve. No puede ser tan malo cumplir con tus obligaciones.- le insistió la rubia.

-Recuérdame ¿porqué dejamos que Sonna tome el control de los Omegas?- se escuchó del otro lado cansada.

-Porque tu no quisiste tomarlo cuando te lo ofrecieron.- le remarcó esta entre dientes.

-Umph... no sé que odio más, si a Sonna en una posición de poder o el tener que venir estas reuniones inútiles.- afirmó.

-Aguantátelo, tu fuiste la que rechazó el puesto de Alta Omega de la ciudad no te hagas la victima en todo esto.- le contestó irritada al teléfono la rubia, entendía que no le gustara pero siempre el oirla quejando era una molestía.

-No me arrepiento de hacerlo. Pero ¿por qué no tomaste tú el puesto de Alta Omega, que tenías que dejárselo a Sonna?- le insistió.

-Exactamente por como estamos ahora, sabes que por trabajo paso muchísimo tiempo fuera de La Ciudad.- le aclaró finalmente.- no me gusta hacer las cosas a medias.

Se escuchó como la sirena, del otro lado de la línea,resoplaba cansada. Cierto era que nada se podía hacer. Ahri era una actriz, modelo y productora con fama mundial y por esta razón era que una vez al año salía de La Ciudad para cerrar negocios y conseguir nuevos además debía continuar aumentándo su popularidad.

-Eve...

-¿Sí, cariño?

-Nada, olvídalo. Debo colgar, te llamaré pronto.

Ahri iba a comentarle sobre lo que había sucedido con aquella alfa, pero antes de siquiera decidir mencionarla prefirió callar.  Algo le dijo que a Kai'sa debía guardarla en un cofre de tesoro y conservarlo para ella sola. Nadie debía saber de ella ni siquiera su mejor amiga o, mejor dicho, en especial su mejor amiga.

***

Como toda omega, solía tener sus necesidades durante los viajes y no dudaba en tener reuniones clandestinas con alfas para calmarse. Antes cuando estaba comprometida con Thresh, él viajaba con ella y le hacía el favor.

En ese instante entendió porqué le había ocultado a la sirena sobre su encuentro con Kai'sa. Su parte omega no quería que esta la buscara. Si la alfa debía ser apacionada con alguien solo quería que lo fuera con ella.

A veces cuando estaba sola, se imaginaba parte de su encuentro con la alfa. Como aquella noche que de recordarla hizo sentirse necesitada.

Sus dedos habían vagada por su cuerpo rumbo a su sexo sin muchas escalas, recordaba lo largo y finos que eran los dedos de la alfa y lo bien que se sentían en su interior. Kai'sa había usado y abusado de su cuerpo aquella noche como jamás pensó que alguien podría hacerlo. Y sin embargo había disfrutado más que jamás en su vida.

Mal Acostumbrada - OMEGAVERSE - Kai'sa x AhriDonde viven las historias. Descúbrelo ahora