Midnight Sky.

Capítulo I.

Parte I

Mientras veía las gotas caer de las tejas de mi casa, me encontraba sentado en mi silla, tan solo, quería evitar todo y a todos, quería olvidar quién era, el porqué de todo, porqué era así, porqué era incapaz de hacer lo que cualquier otra persona normal podría hacer, pero, aquí estaba, sentado, viendo cómo caen las gotas y cómo yo solo me hundía en ellas...

-Debería quizá hacer algo para distraerme...-

Me miré al espejo y vi mi figura, intentando recordar lo poco que me gustaba de mí mismo, mis ojos azules y mi pelo blanco, era lo único que medio aceptaba de mí mismo, no tenía un complejo de musculoso, ni mucho menos estaba delgado.

Pensaba, con una mirada decaída hacia el suelo y apretando mis manos, apoyadas en mis labios.

-A ver qué hora es, vaya, las 1:27 de la madrugada, quizá, deba acostarme o, no sé, ojalá pudiera entender cómo acabo hablando conmigo mismo siempre, no sé si será del todo sano, pero bueno.

Comencé a guardar mis cosas, apagué mi portátil, bebí agua y seguido a eso, me tumbé en mi cama, me puse de lado, mirando a la pared cómo hacía siempre, eso me traía tranquilidad y luego me tapé con una manta de suave lana que tenía desde hace ya un tiempo puesta.

Tan solo, quiero entender qué he hecho mal, por qué no puedo, por qué, por qué no soy capaz de abrirme, de ser mínimamente más social, solo soy un error, algo que ni siquiera fue deseado, quizá deba acabar todo algún día, sería mejor para todos.

La lluvia comenzaba a intensificarse, mientras sonaba el viento golpeando a la ventana cómo si tratase de entrar a buscar lo que era suyo y, de pronto, el cielo comenzaba a iluminarse un poco por los rayos, cómo si fuera un espectáculo de luces.

-En fin, será mejor que intente dormir, estoy cansado ya, no quiero pensar...

Puse el móvil a cargar, cómo hacía de costumbre antes de dormir y apoyé mi cabeza, hundiéndola en la almohada y poniendo mis manos al rededor de ella, esperando poder dormirme pronto y que mañana el día fuera lo más ameno posible, luego, comencé a cerrar los ojos lentamente y haciendo una pequeña técnica de respiración para relajarse, denominada técnica 4-7-8, respirar 4, mantener 7 y soltar 8, así hasta quedar prácticamente dormido.

-Algún día...

Parte II

Comenzó a sonar la alarma de siempre, a la hora de siempre, otro día más, eran las 7:43 am.

—Mhm, qué asco.

Sin ganas de levantarme, me quedé mirando al techo por unos minutos, pensando en qué debería hacer el día de hoy, otro día más en bucle.

—"Debería levantarme, pero, no tengo ganas."

Pensaba, para luego finalmente levantarme unos 5 minutos después de que sonase la primera alarma, luego de ello, desconecté el resto y me puse un conjunto que me gustaba medianamente, un guardapolvos actual negro de un cuero especial, una sudadera, estilo Techwear de lino negro, por debajo y debajo de ello, una camiseta blanca básica de una suave lana sintética y para acabar, otros pantalones vaqueros elásticos de estilo Techwear también, adoraba bastante ese estilo y sobretodo sus detalles.

Tranquilamente y sin prisa alguna, me empecé a poner la ropa para al final acabar con unas botas negras y luego ir al baño para lavarme los dientes, peinarme y lavarme la cara.

—Debería comprarme algo para las ojeras, la verdad.

Pensaba en voz alta y hablaba conmigo mismo, era una costumbre rara que tenía, pero, me traía algo de calma. Luego de ello, guardé mis objetos importantes en una bandolera que llevaba siempre conmigo, dentro guardé mis gafas de aviador de acero con cristal tintado de azul oscuro, mi móvil, las llaves de mi moto y una pequeña pelota con la cuál me entretenía de vez en cuando y el dinero suficiente para aguantar el día.