Gyenyu

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Era el imperio más "moderno" de la época y uno de los más poderosos, ricos e independientes. Actualmente era gobernado por Masaru Haitani, un hombre muy poderoso.

El emperador Masaru tenía por herederos al trono Ran Haitani y a Rindou Haitani, la primera línea en la sucesión era el príncipe Ran y después le seguía Rindou. Si Ran se negaba a heredar el trono, automáticamente Rindou pasaría a ser el principe heredero.

Este imperio era muy conocido por la moda que se manejaba, una muy poco común en otros imperios del país, era una idea muy interesante ante el concepto de la vestimenta para las damas.

En ese imperio era muy normal ver a damas utilizando pantalón de vestir y saco formal, siempre y cuando tuvieran tacones, esa era la única regla.

Ya que los tacones para ese imperio representaban el poder de la mujer, ese concepto había surgido gracias a Annie, la madre de Los príncipes Haitani's. Quien siempre había priorizado su comodidad antes que los estándares de vestimenta que existían, así fue como Masaru se enamoró de ella siendo el príncipe heredero.





Estaba descansando en mi recámara mientras leía un libro, era tanta mi tranquilidad, que alguien le tuvo que venir a estropear. Kurenai la concubina de mi padre, gracias a ella tenía dos hermanos más.

-Ran, el emperador solicita tu presencia en su despechado inmediatamente- mi miro con un poco de curiosidad y luego se retiro de mi recamara.

La mire de reojo y simplemente la ignore.

Después de una media hora fui al despacho de mi padre y a paso lento llegué como una hora después de su llamado.

-Me has llamado? - entre sin saludar ni hacer una reverencia.

-Que falta de respeto- Bramo bastante molesto y me miro con un poco de enojo- te cite aquí porque en unos días viajaras a Racshan a visitar a la princesa T/n durante algunas semanas, junto a Rindou- En ese momento mi mal humor y enojo se fueron, iba a ver al amor de mi vida.

-Empacare para viajar- dijo emocionado y mi padre me dejo salir.

Gracias a las leyes del estado, mi trono no corría peligro, de hecho, ninguno de los hijos de mi padre que hayan sido concebidos fuera del matrimonio imperial podía heredar el trono.

Algo que aseguraba mi trono, o mejor dicho el trono de Rindou.

Ya que, yo no pensaba quedarme en Gyenyu, estaba completamente enamorado de la princesa T/n Shinji, a quién conocía desde que era un pequeño niño de 4 años, ella era heredera del imperio Racshan.

No la miraba para que fuera mi emperatriz, era evidente que ella no quería venir a Gyenyu. Y yo no la quería traer a sufrir aquí, ya que este imperio era sumamente conflictivo y agresivo con todo lo que era referente a las chicas.

Las costumbres en mi imperio indicaban que lo adecuado para un emperador era tener por lo menos 3 concubinas. Yo pensaba cambiar esa obsoleta ley cuándo tomara el trono, y yo no pensaba pelear con mi hermano por el trono, si el desea quedarse con el imperio así sería, le dejaría fácil la jugada.

Sempiterno (Ran Haitani X Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora