Pero por la gracia de Dios

Capitulo 6

2009

Misato miró hacia la entrada del cuartel general subterráneo de NERV.

Bueno, esto es todo, papá. Supongo que es hora de ver por qué tanto alboroto y ver por qué pasaste mucho más tiempo con estas personas que conmigo y con mamá.

Ella tocó su collar. Todavía no podía decidir si se había unido a NERV para fastidiar a su padre o para honrarlo, y no creía que alguna vez lo haría. Lo único que sabía era que iba a vengarlo. Los Ángeles se lo habían quitado de muchas maneras: su investigación sobre ellos lo había alejado de ella durante toda su infancia, y luego el Segundo Impacto lo había alejado de ella para siempre. Él había dado su vida para salvar la de ella, y por mucho que ella quisiera odiarlo por haberla dejado sola tanto tiempo cuando era una niña, no podía odiarlo por ese último acto de desinterés, y en cierto modo el hecho de que no pudiera odiarlo hizo que lo odiara aún más.

"¿Misato? ¿Vas a entrar o te vas a quedar ahí parado mirando la entrada todo el día? Quiero decir, puedo asegurarles que no es la parte más impresionante del edificio. Es solo una entrada."

Misato puso los ojos en blanco y se acercó para unirse a Ritsuko y Kaji mientras entraban en las instalaciones y activaban las escaleras mecánicas que bajaban al geofrente.

"Dale un respiro," estaba diciendo Kaji. "Todo está muy bien para ti, ya has estado aquí cien veces. Tu mamá trabaja aquí.

"Yeah Yo supongo. Pero esta es la primera vez que vengo por méritos propios y voy a trabajar en mi propio laboratorio. Incluso si anticipo que la mayor parte de mi trabajo consistirá en alejar a mamá del comandante Ikari. Realmente no sé lo que ella ve en él. Para ser justos, tampoco sé qué ve el profesor Ikari en él, pero cada uno por su cuenta.

Misato dejó que los dos siguieran discutiendo mientras se dirigían al cuartel general. Parecía que Ritsuko, al igual que ella, no podía decidir si se uniría a NERV a pesar de o debido a su padre adicto al trabajo, aunque con Ritsuko, Misato tuvo la impresión de que se unía más para vigilar a su madre y asegurarse que ella no hizo nada raro. Al menos Misato sabía que no tenía que preocuparse de que ninguno de sus padres hiciera algo vergonzoso.

Sin embargo, Kaji era más un misterio. Ella sabía que él había trabajado para NERV en el pasado aquí y allá, pequeños favores extraños para el Comandante Ikari que lo alejaron por unos días, siempre muy silenciado y saludando con la mano. Ella sabía que él había estado espiando. Lo que ella no sabía era por qué ahora él se había unido legítimamente, a menos que fuera porque ella se había unido. No estaba segura de hacia dónde iba su relación. Se habían encendido y apagado tantas veces que estaba empezando a pensar que el interruptor de encendido y apagado estaba roto y aleteaba sin rumbo. O tal vez era solo que estaba rota.

Suspiró, y debió haber sido audible porque Ritsuko se giró hacia ella.

"Vamos, no puede ser tan malo ya, acabamos de llegar".

Misato negó con la cabeza. "No no. Estaba a millas de distancia."

Ritsuko miró de Misato a la nuca de Kaji y levantó una ceja. Misato estaba un poco contenta de que estuvieran en una escalera mecánica en movimiento en ese momento porque estuvo muy cerca de golpear a su amiga en la cabeza, pero no quería perder el equilibrio y rodar por veinte pisos de la escalera mecánica en su primer día antes de que incluso tuviera la oportunidad de ver el EVA o conocer al profesor Ikari.

Continuaron hacia abajo, y Misato miró la forma turbia suspendida en el tanque de líquido oscuro a su lado. Ese era el Evangelion, la Unidad-01 casi lista para la acción cada vez que los Ángeles decidieran llegar.