pasiones.

11 1 0
                                    

Han pasado tres meses desde que me enteré que Ethan estaría en una silla de ruedas. Han sido muy duros estos últimos tres meses, los doctores han dicho que su mejora a sido demasiada lenta, han sido días buenos y días malos, aunque siempre tengo la esperanza de que se alivie y vuelva a estar bien. También me ha costado mucho trabajo lidiar con su cambio de humor, va a sus terapias y eso le ayuda en un momento, pero después vuelve la desesperanza y se vuelve a hundir, es ahí cuando me toca estar a su lado apoyarlo y siempre darle ánimos para que salga adelante.

Para subirle un poco los ánimos los chicos y yo hemos pedido permiso en su casa para ensayar, tocar la guitarra es algo que siempre le anima y yo he estado aprendiendo a tocar mejor, Jack a sido mi maestro en estos últimos 3 meses, quise prepararme para tocar una canción para el. El día de hoy le tengo planeada una sorpresa, lo llevaré al parque y de ahí nos iremos a un lugar donde nadie nos moleste, donde podamos estar juntos, estoy planeando hacer un picnic y llevarme mi guitarra, tocarle ahí la canción que escrito para el con ayuda de mis amigos, espero que eso pueda subirle el ánimo y sepa que yo lo amo.

Como siempre me entran los nervios cuando voy a verlo, así que antes de llegar a su casa y tocar el timbre suspiro profundamente.

Su madre no tarda en atenderme, me dice que pase a su cuarto y lo veo sentado en su silla de ruedas mirando hacia la ventana como si estuviera pensativo... Me acerco a él y le tapó sus ojos con mis manos, el lleva sus manos hacia su cara y sabe que soy yo se voltea a mirarme y me dice:

-Hola dulce Saory, con una sonrisa.

- Hola hun, ¿Cómo estás hoy? Le digo.

-hoy no he tenido efectos secundarios. Me dice emocionado.

-¡perfecto!, le digo. Yo tengo una sorpresa para ti, ¿ Me acompañas? le pregunto.

- ¿A dónde vamos?, me dice.

- no te diré, lo verás con tus propios ojos, Te amo, le dijo.

Acercándome a él llevando mis labios a sus labios besándolo nuevamente. sintiendo que nuestros cuerpos tiemblan juntos y se vuelven uno solo como si nuestras almas se juntarán en un simple beso.

Ethan

Ha sido increíble, todo lo que he pasado, nunca nadie me ha apoyado como ella lo hace cuando estoy triste o simplemente enojado. Ella tiene el poder de cambiar la perspectiva que siento, me hace soñar y pensar que estaremos juntos, es el motivo más grande que tengo para salir adelante. Cada vez que me besa no puedo dejar de sentir el deseo de tenerla entre mis brazos, tomarla sin que nada ni nadie me importe y hacerla mi mujer, tal vez es algo muy irónico porque aún somos pequeños de edad, pero sé que esto que siento por ella nunca lo había sentido en mi vida. Estoy emocionado porque ella me cambio totalmente, y no me atrevería a hacerla mi mujer, nunca podría perdonarme si algo le pasará. No sé qué hacer con este deseo, cada vez que ella se acerca a mí y tengo que sentir su aroma a vainilla me vuelvo loco, mi cuerpo no deja de temblar y pedir a gritos qué seamos uno solo, no sé de dónde saqué toda esta pasión que irradia mi cuerpo pero es algo que ella me provoca.

Llegamos a un pequeño lugar dónde está rodeado de pasto y flores, se puede ver todo el pueblo. Tiene una vista increíble y todo está listo, al parecer se puso de acuerdo con alguien, pues hay una sábana blanca con rayas negras encima del pasto, a un lado está una canasta hay un vino, dos copas, en un plato hay fresas, en otro plato hay sándwich y jugo, está todo hermoso.

Además de esta hermosa sorpresa, ella está hermosa, en esta ocasión se puso un vestido blanco con rayas negras, unos tenis blancos, su cabello va suelto, sus pestañas se ven más grandes por la tinta que tienen, sus labios se ven más rojos de lo normal y ella está totalmente deseable, su aroma me penetra mis sentidos.

El frío de tu adiósDonde viven las historias. Descúbrelo ahora