La necesidad de placer era mayor a su cordura, la impulsividad de Vegas era una característica que todo aquel que lo conociera sabe que la posee. Por lo que no tardo en detener la felación que su novio estaba realizando empujando suavemente su rostro lejos de su miembro, haciendo que este le mirara de una forma retadora, había un secreto de esta pareja que nadie conocía puesto que se trataba de su intimidad. Pero yo puedo decírselos, Vegas siempre follaría a Pete hasta que este cambiará esos ojos retadores por un cara de cansancio y satisfacción, no importaba el lugar ni el momento, Saengtham no podía dirigirle esa mirada a él.
-Ven aquí y déjame comerte el culo.-Indicó, haciendo que el pálido saliera de su escondite para posicionarse con su pecho sobre la mesa y sus rodillas sobre los muslos del pelinegro, alzando su trasero al aire permitiéndole a este tener un panorama completo.
Pete tenía frente a él los rostros de los invitados, nadie hablaba sólo miraban en silencio, nadie se atrevía a moverse porque no había algo que diera más temor que Vegas fuera de control y eso es lo que el pálido había provocado. Se permitió cerrar sus ojos, al sentir el húmedo y experto musculo de novio pasar de forma vertical sobre su entrada.
En el pasado Saengtham hubiera asesinado a aquel que siquiera hubiera insinuado que el haría tal cosa, pero con Vegas descubrió un lado de él que no quería soltar nunca, él dolor convirtiéndose en placer, la máscara de perfección rompiéndose permitiéndolo sentir por primera vez que aquel vació que sintió por tanto tiempo se llenaba.
ñññTal vez ahora mismo no quedaba sombra de ese Pete que fue el jefe de guardaespaldas de la primera familia, pero con Theerapanyakul era el jefe de la segunda familia así que su pasado no importaba, ahora podía ser tan atrevido como quisiera pues sabía que su novio le permitiría ser libre.
[...]
La entrada del pálido se contraía ante la estimulación que su novio le brindaba, con una mano el pelinegro lo masturbaba lentamente mientras que con la otra se encargaba de separar sus glúteos para comenzar a simular penetraciones con la lengua al ritmo de su mano. El pecho de Pete se encontraba pegado a la mesa junto con su cabeza, sus ojos cerrados y permitiéndose ser ruidoso con su boca abierta, gimiendo gustoso ante la sensación que invadía su cuerpo.
Don Fabio había girado su silla para no ver más de ello, su hijo mayor había copiado su acción pero el menor y su mano derecha se habían mantenido firmes siendo espectadores de la caliente escena frente a ellos, lo lascivo que era esto provoco que sus partes bajas comenzaran a despertar.
-Por favor Señor Theerapanyakul, tómeme.-Una suplica escapo de los labios de chico que reposaba sobre la mesa ante la necesidad de sentir el miembro de su novio dentro de él.
-No lo sé, no has sido un buen chico.-Lo tomo por la cintura haciendo que doblará sus piernas por completo para sentarse sobre la pelvis de su novio, podía sentir la extensión desnuda de su novio contra la piel de su trasero.
Vegas con su mano derecha lo tomó por el cabello, haciendo que este levante su cabeza al frente.-Mira en la situación que nos has puesto Pete, no creo que sea apropiado premiarte después de esta travesura.-Lo levantó, y se puso de pie el mismo, dejo que los pies de su novio tocaran el suelo y se posiciono detrás de él, volviendo a recargarlo contra la madera de la mesa. Levanto la camisa que su novio llevaba puesta para ver claramente su trasero, para proseguir a dar el primer golpe, la espalda de Pete se arqueo y su boca se entre abrió, su pálido glúteo tomo un color rojizo al instante.
-Agh...más.-Levantó su trasero colocándose de puntillas. Se suponía que debía ser un castigo pero Vegas era obediente así que palmeo un vez más el trasero de su novio, lo escuchó gimotear y siguió hasta que los dos glúteos quedaron completamente rojos y la esencia de su pareja había caído sobre la mesa.
No hubo que jugar más, Theerapanyakul estaba cerca de llegar a su límite y deseaba con locura enterrarse en el culo de su novio, así que procedió a alinear su miembro contra la entrada de Pete disfrutando cómo esta comenzaba a succionar toda su extensión hasta admirar cómo sus rojizos glúteos chocaban contra su pelvis. Sobra decir, que sí antes Saengtham era ruidoso, ahora no tenía límites, realmente estaba disfrutando como su novio lo llenaba por completo.
Apretaba sus puños con fuerza al sentirlo salir, pero un espasmo de placer comenzó a recorrerlo cuando este volvió a entrar inmediatamente golpeando su punto dulce. Las manos de Vegas sostenían posesivamente las caderas del pálido donde seguramente quedarían marcados su dedos.
Un vaivén rápido era el ritmo que tenían, empujaba con tanta fuerza el pene dentro de su chico que incluso hacía temblar la mesa, disfrutando de cómo su miembro se perdía entre los glúteos de Pete y la maravillosa sensación de calor que le brindaba su interior, podía sentir cómo se volvía cada vez más apretado. Sabía que Saengtham estaba por correrse, pero no iba a permitirlo tan fácil, así que dio una estocada realmente profunda recargando todo su cuerpo sobre él para llegar a su oreja.-Si quieres venirte, primero hazme correrme.-Mordió el lóbulo de su oreja y bajo hasta su mandíbula un par de besos húmedos.-Móntame.-Sugirió, a lo que recibió un gemido como afirmación.
Salió del interior de Pete con cuidado y tomo asiento en el lugar que se encontraba anteriormente, se permitió observar lo caliente que era su novio a medida que este se sentaba a horcadas encima de él. Se recostó un poco para que su pene quedará correctamente alineado a la altura de su entrada.-¡Jodida mierda!-Exclamó Vegas cuando sintió como su novio se dejo caer sobre su miembro de golpe, el calor lo invadió rápidamente y no podía evitar sentirse agitado ante la forma en la que su entrada apretaba su miembro.
Saengtham se aferraba con fuerza al cuello del pelinegro mientras comenzaba a mover sus caderas arriba y abajo, siendo el quién mantenía el control de las estocadas. Rápidamente el pálido busco los labios de su pareja y los unió en un fogoso y caliente beso, donde sus lenguas mantenían una guerra por el dominio.
Pete rompió el beso para impulsarse hacia atrás y posicionar sus manos sobre el borde de la mesa de madera, y plantando sus pies en la orilla del colchón del asiento en el que se encontraban, Vegas podía observar el miembro de su pareja goteando el preseminal así que lo empuño con su mano derecha y comenzó a masturbarlo al mismo ritmo de las estocadas. El pálido estaba perdiéndose en el placer de ser estimulado por ambas partes, así que dejo de moverse a un ritmo marcado y movía sus caderas de forma necesitada dando a entender que su orgasmo comenzaba a querer hacerse presente. Vegas coloco sus brazos detrás de las rodillas de su pareja y lo sostuvo con fuerza, para levantarse con él encima y recostar su espalda contra la dura mesa.
Tomó el control colocando los tobillos sobre sus hombros y comenzando un vaivén rápido, sintiendo cómo su abdomen bajo se contraía y Pete apretaba con mucha fuerza su miembro, las estocadas no llevaban un ritmo ambos necesitaban alcanzar el orgasmo con mucho anhelo. Por lo que sus movimientos buscaban la liberación de sus esencias, y después de un largo gemido Pete logró correrse por segunda ocasión sobre su abdomen. Vegas saco el miembro de la entrada de su pareja y después de un par de movimientos de muñeca arriba y abajo logro venirse manchando con su esencia la pelvis y parte del abdomen de su novio.
Se permitió observarlo por un momento, su chico se encontraba con sus cabellos revueltos, con aquella sonrisa de satisfacción en su rostro y un par de ojos cansados, la camisa se encontraba aun cubriendo su pecho pero mantenía expuesto su miembro y parte de su abdomen donde se encontraba la esencia de ambos.
Una caliente imagen, que sólo Vegas podría apreciar de cerca.
[...]
Ya sólo queda el final de la obra y listo.
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✔️PLACER [VEGASPETE]+18
Fanfiction"Donde Vegas el líder de la segunda familia tiene un novio bastante travieso, que siempre obtiene lo que quieres sin importar la hora o el lugar. Pete sin duda tiene el control sobre Vegas."