𝒞ℯ𝓂ℯ𝓃𝓉ℯ𝓇𝒾ℴ - 𝒮ℯ𝒾𝓈𝒽𝓊 ℐ𝓃𝓊𝒾

5

-Seishu Inui, han llegado por usted.

-Está bien...

Ya estaba a punto de salir de la celda cuando Hanemiya me llama.

-Inupi, ¿Ya te vas?.

Me miraba con curiosidad.

-Si, ya vinieron por mi.

Él sonrió y se acercó a mi. Me abrazó que hasta sentí mis órganos salirse.

-Espero te vaya muy bien, compañero.

-Igualmente.

Yo solo le di unas palmaditas en la espalda, no me gusta tanto el contacto físico pero tampoco quería parecer grosero al apartarlo.

-¡Seishu Inui!. Segunda llamada.

Hanemiya me tomó el hombro y me sonrió.

-Algún día nos volveremos a encontrar, Inupi.

-Tenlo por seguro. Mientras no me secuestren todo estará bien, te vendré a visitar cada semana.

Se le iluminaron los ojos, creí que al menos alguien vendría a verlo... pero por lo que veo no.

-¿Sabes? Eres la única persona que vendrá a verme. Ya no tengo a nadie en mi vida ni quien se preocupe por mi, después de todo terminé solo.

-Hey, no estás solo. No soy la mejor persona pero acá tienes a un conocido.

-Jajaja, es la segunda ves que lo dices.

-¿Ah si?. Sorprendente.

-¡Seishu Inui!. ¡Tercera llamada!. Si no sale ahora ya no podrá irse.

Voltee de nuevo hacia Hanemiya y me despedí finalmente.

-Adiós, Hanemiya.

-Nos vemos, Inupi.

Y salí de la celda. El policía me guió por todo el pasillo hasta llegar a la salida, me habían dado una bolsa de plástico con la ropa con la que ingresé. Bueno, al menos tengo un nuevo conjunto de ropa, y gratis. Se abrió la puerta y vi a Kokonoi esperándome.

-Inupi, cuanto tiempo.

-Hola Koko, me alegra volver a verte.

-Que bien. Ahora debemos esconderte para que la tipa esa no te encuentre.

-Koko, ella ya sabe dónde vives. Probablemente nos esté mirando en este mismo momento.

-Pues que venga y le partimos su cara.

-¿Quieres que te arresten?.

-Tú la ibas a golpear, yo solo soy un simple civil que presencio un acto violento por parte de un chico rubio.

-Este chico es hermano del amor de tu vida.

-No metas a Akane en esto, ella debe descansar tranquilamente.

-Entendible.

-Iremos rápido a comprar cosas para la cena, te toca cocinar.

-Como digas.

Nos dirigimos a la tienda, otra vez, y ahí estaba ella. Viéndome con una sonrisa algo tétrica, estaba vestida de negro y su maquillaje estaba corrido.

-Koko, es ella.

Koko volteo y la vio, se sorprendió.

-Esperaba que estuviera más fea, ¿enserio rechazas a una linda chica?.

-Ajá, una linda chica que me secuestró y me metió a la correccional. Esta completamente loca.

-Si pero es muy linda, no entiendo porque...