Between the mist

Capítulo 40

Ratatatatatatatatattata!! Se oye por todos lados y mi cabeza retumba, son balazos. Paso mi mano por mi cabeza y compruebo que no estoy descalabrada ni nada, solo fue el golpe; me siento algo mareada y cuando mi visión se normaliza veo que sigo encerrada en el armario. Tiros y mas tiros. Empiezo a tantear por todos lados y encuentro un cordel colgando del techo, tiro de el y se enciende un foquito; los balazos se oyen en el piso de abajo, y van siendo mas y mas cerca; quien quiera que sea está a unos 3 o 4 pisos de donde está Chris. A pesar de todo no puedo dejarlo asi; empiezo a buscar como o con que abrir la mentada puerta y solo hay armas y cajas con papeles. Abrir la puerta a tiros no es una opción, revelaria mi posición y es un peligro hacer saber que estoy armada; sigo buscando y recuerdo que traigo pasadores en mi cabello. Tomo un par de pistolas ( en la vida he disparado un arma pero, supongo no hay mucha diferencia con jugar GTA o con una Nerf de agua y dardos de fomi) y las escondo una en el pantalón y una la llevo en la mano; por precaución. me dispongo a forzar la cerradura con un pasador; y despues de batallar por alrededor de 20 minutos al fin se abre, el tiroteo sigue en el piso donde estaba escondida me armo de valor y trato de ocultar mi pánico en la mayor medida posible y abro de una patada la puerta, dandole en las narices a alguien. Escucho el impacto contra el suelo y un quejido agudo, regreso lentamente la puerta y me encuentr cara a cara con ni mas ni menos que Hit Girl. Siento que mis ojos estan por salirse de sus orbitas y pienso que tengo los segundos contados, ella me ve y también está muerta de miedo, por no decir que de sorpresa.
-- tú?
- vete chica! Tienes libre la planta baja!
- pero...
- vete! Mandaran mas matones en cualquier momento, BANG! le voló los sesos de un solo tiro a un tipo que estaba detrás de mi con una metralleta.
- lo ves?
- si, si... ok. Empecé a correr hacia el elevador, pero me volví y... - ehm.. hit girl...
- volteó sorprendida al oir que sabia su nombre; -Gracias y... ten cuidado.
Solo asintió, encontré las escaleras de emergencia y empecé a subir. No soy tan mala atleta después de todo. Me crucé con alggunos gorilas armados hasta los dientes, venian dispuestos a tirar a matar; no les importaba de quien se tratara, yo era una intrusa y por ende una amenza, saqué la pistola y recordé las novelas de narcos que pasan por las noches en televisión, apreté los ojos y empecé a disparar sin ton ni son. Abro los ojos después de 4 tiros, están muertos o al menos inmovilizados, uno de los hombres en su agonía tomó un wokitoki y me voceo; para... salvarme? " no le den a la morena de jeans violeta. Es de casa" dijo esto dos veces y expiró; me duelen las piernas y empiezo a subir con mas lentitud y sigilo, son las 3am. Debo haber estado inconsciente unas 3... 4... horas, que mas daba. Mas y mas tipos subiendo y bajando con armas de altísimo calibre; paso inmune a ellos, solo disparo una vez mas, esto es peor que los juegos del hambre; matar para vivir. Llego un piso abajo del penthouse y me quedo oculta en un ricon, escucho gritos y golpes, entre las voces de todo aquel jaleo distingo las voces de Chris, Frank D'Amico y Hit Girl; no sube ni baja nadie por alrededor de una hora, de repente todo queda en silencio por cosa de cinco minutos mas, de repente; se oye como si quemaran fuegos artificiales en la parte de arriba, seguidos de un enorme estruendo. Una explosión, que incluso logró cimbrar las paredes del edificio. El escandalo me aturdio, espero un poco a que la sordera y la migraña pasen, boto la otra pistola, vacía y preparo la otra. Subo lentamente la escalera al puro estilo de los ángeles de Charlie y esbozo una malevola sonrisa recordando cuando jugaba a cosas de onda policíaca cuando era niña, escalón por escalón; llego al final y abro la puerta despacio, con la punta de la pistola por delante. Termino de abrir de un empujón y hay todavía un par de tipos, muy mal heridos y dispuestos a dejarme como un colador sin ninguna compasión aparente; para estas alturas ya no tengo miedo y disparo, atinandoles en el cuello, el estómago, el pecho y la cabeza. Aterrada los miro desangrarse, es una sensación horrible saber que ahora cargas con unas cuantas muertes encima. Pienso en tomar el elevador y huir de vuelta a casa pero... alguien me llama al final del pasillo. Era Javier. Estaba golpeado y amoratado, pero vivo.
- Gabriella!! Pero qué... acaso estas loca?
- no... pero un simple pasador puede hacer maravillas.
- asi que tu eras la "morena de jeans violeta a la que no debíamos disparar"
Asiento rápidamente, mi cabello es un desastre y tengo la ropa salpicada de sangre.
- y Chris?
- el... creo sigue allí adentro, pero su padre...
No lo dejo decir mas, arrojo la pistola y me echo a correr, entro y lo veo cojeando hacia el balcón con una katana en las manos, me detengo en seco en la puerta al ver semejante escena; kick ass y hit girl dejando el edificio juntos, volando en una jet pack, alejandose hasta perderse de vista en el claroscuro cielo de la madrugada. Chris arroja la katana y suelta un par de maldiciones, para después quedarse de pie, mirando en silencio a la ciudad... abro un poco mas la puerta y...
- Chris?
Voltea a verme pero no responde, está todo golpeado y le rompieron la nariz, está ensangrentado; casi irreconocible.
- Gab? Eres tú?
- no... soy batichica, menso.
- estas... bien... viva...
Al verlo así no puedo mas y corro a abrazarlo, estaba vivo, y todo esto habia terminado...
- pero qué hacias aquí? Porqué viniste desde anoche?
- te dije que estaría contigo en todo momento; que no tenía miedo. Llamaremos a una ambulancia y tú y tu papá van a estar bi...
- Gab... mi papá. .. no pudo acompletar la frase, derramaba lagrimas...
- ay por Dios...
Fue entonces que se quebró, me abrazó rompiendo en llanto. Acababa de perder al motor de su familia; todo habia acabado. Frank D'Amico, muerto...
Ahora Chris estaba a la cabeza de todo, y eso signoficaba una sola cosa; que ahora si lo había perdido para siempre...