"Piloto automático off, piloto automático off!"
La carretera se veía borrosa por las lágrimas que estaban saliendo, no sé si lloraba por él o por sentir que estaba traicionando mis ideales por el nuevo trabajo. Recordé lo que hace un par de horas ha...
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+18 ADVERTENCIA
S Narra Andrea
El beso es desesperado, la mano que tenía en mi cadera se va hacia una de mis piernas y la sube a su cadera, sin pensarlo lo enredo con las dos piernas y siento su miembro duro, muerde mi labio, suelto un gemido bajo. Se que está mal esto, estamos desviando la atención del problema con sexo; me gusta pero no es sano.
Me coloca en la cama, le quita la funda a dos de las almohadas, con una me amarra los brazos a mi espalda y la otra me la pone en la boca, estoy atónita ante lo qué pasa delante de mi; Max y yo habíamos hablado de nuestras fantasías sexuales y cómo nos gustaba, sabía que era rudo Justo como me gustaba, pero no lo habíamos puesto en práctica por una u otra razón.
-Tú no te irás de mi lado- lamé mi mejilla- Nunca- susurra en mi oído; una mano está en mi muslo derecho, notó humedad en mis calzoncillos- Eres mía- al decir esto sube la mano hasta mi clitoris por encima de mi ropa interior.
Mi cuerpo disfruta pero también siente ansiedad de estar así, estoy a su merced, estoy vulnerable y no me gusta la idea, trato de distraer mi mente pero regreso a la realidad cuando mete un dedo en mi interior, me hace gimotear por no verlo venir.
-Estás lista para mi- saca el dedo y lo lama- Dulce - desabotona la camisa que traía puesta- Deliciosamente mía- abre el sostén que llevo, con broche por delante porque soy una tonta con los normales- Debo remarcar mi territorio- las marcas de hace casi una semana se están desvaneciendo, siento su barba cerca de mis pechos, mis pezones se ponen duros- Tú cuerpo ya me reconoce- toma mis pechos en su boca, se que me está marcando; pierdo la noción del tiempo.
Después de un buen "mantenimiento" a mis pechos, se va directo a mi vagina; que si fuera posible hubiera inundado esta habitación por la excitación que sentía, su barba pica, su lengua y está en mi clitoris, mete dos dedos en mi, estoy arqueada mientras dura aquello, cuando estoy a punto de venirme se detiene.
-Todavía no mi leona- podría jurar que tuve un orgasmo auditivo cuando me dijo así- Este león quiere sentirte- me quita la funda de la boca- Por más que adoré tus gemidos y que digas mi nombre, no lo harás hoy- me pasa la punta de su lengua por los labios entreabiertos- Hay invitados y no queremos que sepan como te hago venir- me vuelve a poner la mordaza improvisada.
Se quita el short y su bóxer, joder! todo él me hace vibrar de solo verlo; me voltea poniéndome en cuatro, mis oídos buscan sonido alguno, pero solo si respiración y mi corazón se escuchan, una nalgada cae en mi trasero, lo tenso, segundos sin nada, otra nalgada un poco más fuerte, mis manos aún en mi espalda se entrelazan, tratando de darle la señal que siga. Abre mis piernas, mi sexo está totalmente expuesto a él, una palmada con toda su mano, el ardor lo siento desde mi clitoris hasta mi vagina.
-Lo de hoy no será como hace unos días- me penetra de una estocada llena de salvajismo- Te voy a enseñar quien manda- los pocos sonidos que salen de mi boca, se ahogan en la funda; mis manos arañan mi espalda por no poder sentirlo totalmente- Oh cariño- pega su abdomen a mi espalda y brazos- No podría dejarte ir nunca.
