La llegada

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-Sus majestades, estamos llegando al palacio de los emperadores del imperio de Oriente- hablo Silvia, llamando la atención de Aruna y Victoria que se habían distraído leyendo unos libros.

-Gracias por avisar, Silvia- respondió Victoria, apartando su vista de el libro para ver el paisaje -Es muy bello este imperio.

-Sí que lo es- respondió Aruna,  viendo junto a su hermana la preciosa vista.

Dos días antes.

-Recuerda ser precavida, y estar atenta por si pasa algo. No te preocupes por el imperio nos haremos cargo de todo, y cuidaremos del 'jardín de joyas', tu ve tranquila- habló la dulce voz de Violeta, su madre.

-Gracias, mamá y a ti también papá- Aruna respondió con una sonrisa.

Llevaba un vestido rojo junto a una corona roja, este era su vestuario favorito y lo amaba sin duda alguna.

-Y tu señorita, hazle caso a tu hermana en todo momento- dijo Violeta, a su hija menor Victoria, quien asintió inmediatamente -Por favor Aruna, visita a Dafne y mándale mis saludos. Se que no te agrada por sus intentos de ser adoptada, pero es la hija de mi difunta amiga y la aprecio- Violeta pudo oír un suspiro pesado salir de su hija.

-Ni se ha indignado a mandarte una carta y me pides que la saludé, eres demasiado buena madre. Además se rumorea que se ha convertido en la segunda concubina del emperador de Oriente- respondió Aruna, secamente. No le gustaba hablar de esa "prima" indeseable.

-Por favor Aruna, hazlo por mi- dijo una Violeta suplicante -Además, si se convirtió en concubina es beneficioso para ti, ¿No lo crees?-agregó Violeta, con voz dulce y suave.

Aruna lo pensó un momento, y aunque desearía que fuera mentira, su madre tenía razón (como siempre). No podía dejar esa idea a un lado y finalmente respondió.

-Lo tomaré en cuenta, pero que quede claro que lo hago por ti madre- respondió seria.

Tanto sus padres, hermana y damas de honor como algunos sirvientes de alrededor rieron bajo por la respuesta de su gobernante. Si bien Aruna es la representación de poder, era débil a las súplicas de su madre como casi la mayoría de todo el reino, porque la ex emperatriz tenía cierto encanto e inteligencia que la ayudaba a poder manejar situaciones incómodas o de gran tensión, y era mejor no hacerla enojar porque cualquiera se arrepentería en el momento (aunque era muy piadosa).

-Bueno, tengan un buen viaje y cuídense- habló Albert, el ex emperador dándoles un beso en la frente a sus hijas -¡Ah! También, Aruna podrías aprovechar para ver a algún pretendiente para casarte y quitarte ese peso de encima- dijo de forma divertida Albert -Pero, no te sientas presionada, solo quiero tu felicidad, así que tomate tu tiempo- agregó sonriente, sacándole una sonrisa a su hija mayor, siempre agradeció que sus padres no la presionaron con el matrimonio y también sabe que se sienten culpables por haberla convertido en emperatriz tan joven.

-Gracias papá, lo aprecio muchísimo- dijo sonriendo.

En la actualidad.

El carruaje paro en una gran entrada, la entrada del palacio. Un guardia le pidió información y Aruna le entregó a su guardia real Dimitry, la carta, el otro guardia al ver el sello de su emperatriz, abrió inmediatamente las puertas del palacio y dejó entrar a la emperatriz del Reino de las joyas y su comitiva.

Al estar ya estacionados correctamente, Dimitry extendió su mano para ayudar a bajar a las cuatro personas que estaban en el carruaje, primero Aruna, después Victoria seguida de Arianna y por último Silvia quien se quedó hablando con Dimitry, ya que estaban comprometidos y se amaban demasiado. Aruna siempre amó a sus damas de compañía y su guardia real, eran como de la familia y deseaba su bienestar y felicidad, como si fueran sus primos e incluso hermanos.

Al bajar una sirvienta les hizo seguirla, Aruna dio la orden de que su hermana, damas de compañía y guardia real vinieran con ella y los demás que se fueran arreglar las cosas y descansar, y es que Aruna siempre apreciaba el esfuerzo de sus sirvientes y cada que podía trataba de que descansaran lo necesario según su trabajo ( se refiere a que si algunos sirvientes hacían demasiado trabajo trataba de darles mucho descanso).

Así fueron caminando con la sirvienta hasta una sala y entraron en ella. Ahí se encontraban los emperadores, una chica de cabello plateado, un chico que reconoció como el duque Ergi, otro que aseguraba que era el príncipe Henrey y por último su prima adoptiva, no se sorprendió mucho por eso, ya que ya se imaginaba por los rumores que ella era una concubina y ahora lo confirmaba, aunque la presencia del Duque Ergi y el príncipe Henrey se le hacía raro.

-Saludos majestades, la emperatriz Aruna se presenta- habló Aruna, seguido a lo dicho su hermana, damas de compañía y guardia real hicieron una reverencia.

-Un gusto tenerla aquí, soy la emperatriz Navier-dijo en respuesta al saludo de Aruna, la cual la había mirado con detenimiento y solo había algo en su mente - su belleza y respuesta a mí presentación me hace saber, que es una mujer digna de ser emperatriz, me agrada su forma de ser- pensó Aruna.

-Es un placer para mí tam- sovieshu fue interrumpido por la albina que estaba situada detrás de él.

-Rashta recibe a Su Majestad con mucha alegría espero ser su amiga- dijo Rashta casi gritando lo último a Aruna.

-Es de mala educación interrumpir a alguien cuando habla señorita y ni siquiera la conozco lo suficiente como para ser su amiga- respondió Con seriedad Aruna, quien estaba segura de que esa muchacha no había tomado ni una sola lección de ética y modales.

-Perdona a Rashta prima, ella es nueva en el harem- rompió la tensión Dafne -Es bueno volver a verte- agregó.

-Esta bien, también es un gusto verte Dafne- dijo Aruna, aunque no le cayera bien Dafne, no la odiaba simplemente era demasiado precavida con ella y con todo lo que hacía, además mantener las imágenes es bueno cuando vienes aún nuevo reino.

Dafne sonrió, conoce a su prima y sabe que a ella le gusta mantener las imágenes, además en el fondo de su corazón la quiere demasiado y por esa razón quería ser adoptada pero no pensó que eso tendría un efecto negativo, aunque siempre le tendrá mucho aprecio, respeto y admiración a Aruna.

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Holis, ¿Qué tal les pareció? pensaron que Dafne sería mala o buena, tal vez cambie su personalidad o forma de ser, quien sabe, espero que hayan disfrutado del capítulo y hasta la próxima. Comenten y disfruten.

Yo soy poder ( la emperatriz divorciada )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora