Yo soy poder ( la emperatriz divorciada )

Fiesta de té

El sonido de la puerta llamó la atención de Aruna que estaba leyendo un libro, hacía dos días que había llegado y no le interesa salir a menos que la invite la familia real. -Silvia puedes ir a ver quién es, por favor- le dijo Aruna. -Sí Su Majestad- respondió Silvia, -¿Qué necesita, jovencita?- preguntó Silvia, después de haber abierto la puerta. -Vengo de parte del emperatriz Navier y la segunda esposa Dafne, ambas invitan a la emperatriz Aruna a una fiesta de té- dijo una joven pelirroja con pecas. -¿Podrías esperar a que me cambie para la ocasión?- habló Aruna levantándose de su sitio y dirigiéndose a donde estaba la chica. -Por supuesto, majestad- respondió.

Después de que Aruna se cambiará se dejó guiar por la joven que se presentó como Laura. Habían caminando por unos cuantos minutos hasta llegar a un patio hermoso de rosas blancas y tulipanes; se divisó a lo lejos a seis personas sentadas en lo que parecía un pequeño "castillo" con techo de cristal. Aruna y sus damas de compañía, junto a Laura (sin Dimitry porque Aruna le pidió que cuidará de Victoria y le diera un paseo por la capital), llegaron al lado de Navier y Dafne, al llegar Aruna se sentó en uno de los dos asientos que quedaban  desocupados y saludo.

-Buenas tardes majestades, me sorprende la invitación- dijo Aruna sinceramente. -Pensé que sería más placentero para ti pasar tiempo conmigo y con Navier, después de todo nos defendiste de Rashta- dijo Dafne con una sonrisa, estaba feliz y no lo podía ocultar.

-Tenía que defenderlas de su sucia trampa, después de todo sus intenciones no eran más que dejarlas mal en frente del emperador y enfrente mía, pero en sus planes no tomo en cuenta que no soy tan tonta como los demás- dijo Aruna con una expresión entre tranquila y burlona. -Bebe un poco de este té de frutos rojos, lo pedí especialmente para ti, Dafne me dijo que te gusta y no quería dejar pasar la oportunidad- habló esta vez Navier.

Aruna tomo un sorbo de su té y sonrió feliz, le encantaba ese té;-Bueno ya que nos hemos dado una introducción, podemos ir al punto de conversación, sé que no me han invitado aquí solo para beber un buen té- dijo una Aruna neutra y sin expresión. Navier y Dafne se miraron y sonrieron, sabían que Aruna no es tonta y se daría cuenta, -Antes que nada, te quiero presentar a mis damas de compañía, Rubí y Estela, son condesas de la región- habló Dafne, presentando a las dos jóvenes que estaban detrás de ella. -También te quiero presentar a las mías, la condesa Eliza y la condesa Jubert, y estoy segura que a Laura ya la conoces- agregó Navier a la conversación.

-Las mías ya las conocen, son Arianna y Silvia- habló otra vez Aruna, -Bueno, ya que las presentaciones se hicieron, quiero oír las peticiones que tienen para mí- finalizó.

-Queríamos saber si su majestad estaba de acuerdo con hacer una alianza personal, esto lo hago porque siento que Rashta será un problema en el futuro, y Sovieshu no me hace caso incluso después de tantos años casados- suspiro -pero eso no me afecta en lo absoluto quiero lo mejor para mi reino y si eso implica desobedecer a mi propio marido, lo haré, solo quiero tener su protección y amistad emperatriz Aruna y espero que usted pueda dármela- explicó Navier.

Dafne y Navier esperaban nerviosas, la respuesta de Aruna quién cerró sus ojos para pensar. -Diga algo emperatriz, me siento muy nerviosa y no puedo evitar decir cosas, así que por favor responda si no, ¡¡Terminaré diciendo cosas sin sentido!!- habló Laura desesperada, esperar no era su fuerte en lo absoluto y eso puso más nerviosas a las presentes. -Quiero dejar en claro, que si voy a ser parte de esta alianza estaré esperando que esa tal Rashta sea sacada de este palacio, porque puedo asegurar por mi cuenta que ella no traerá felicidad o prosperidad a este reino- respondió Aruna.

-Eso es un ... ¡¡¿sí?!!- preguntó Rubí ahora muriendo de emoción, se notaba que ella y Laura eran familia (primas hermanas); cómo respuesta recibió un asentimiento de parte de Arianna, y todas las presentes suspiraron de alivio, Navier y Dafne estaban de acuerdo con Aruna, Rashta no es un buen augurio para el imperio de Oriente.

Todas se relajaron y empezaron a hablar y congeniar perfectamente, incluso se podía notar a Aruna menos tensa al lado de Dafne, eso era un avance, y las damas de compañía se habían convertido en hermanas hablando, algo sorprendente para cualquiera.

Estaban disfrutando plácidamente de su fiesta de té, pero no todo era felicidad porque justo en ese momento entró una peli plateada al "castillo" con techo de cristal. Los guardias trataron de detenerla pero no pudieron, -¡¡¡¡¡Necesito hablar con las emperatrices, es algo urgente, no pueden tocarme sino le diré al emperador y ahí veremos quien se atreve a llevarme la contraria!!!!!- grito Rashta como loca. Los guardias seguían tratando de pararla, pero justamente Rashta tropezó y se agarró del mantel, haciendo que todo lo que estaba en el mantel, pasteles, galletas y tés se derramarán encima de Aruna. Cuando se levantó y se limpio su vestido miró hacia adelante y vio el vestido de Aruna arruinado, -"justo lo que quería, pronto el emperador estará aquí y solo tengo que hacer que me pegué para hacerme la víctima"- pensó Rashta con malicia.

El emperador había llegado y Rashta sólo tenía que arrodillarse y hacer creer que la estaban maltratando, pero justo cuando iba a arrodillarse paso Aruna dijo:
-¡¡QUIEN SE ATREVIÓ A HUMILLARME DE ESTA MANERA, NO SOLO ME HA ECHO ENOJAR SINO QUE  A ARRUINADO LA FIESTA DE TÉ!!-

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Holis, ¿Qué les ha parecido este capítulo? Lamento la tardanza pero he estado ocupada con mis estudios, así que espero y me tengan paciencia ¡¡Disfruten del capítulo voten y comenten!!