Capítulo 1. Opinión sin precedentes

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-Sí, sí. Ya voy para la facultad... oh, ¡que sí Hyunjin!- Repitió por tercera vez en ese mismo rato, su amigo del otro lado de la línea no dejaba de insistir que debía llegar rápido a la universidad si no quería reprobar-otra vez-por faltas.

Y para la desafortunada suerte de aquel joven de grandes mejillas, cuando colgó la llamada se dio cuenta que no llegaría muy rápido como afirmaba, pues la enorme cola de carros se veía interrumpida por una manifestación al frente, Jisung no pudo sentirse más frustrado, ¿era en serio?, ¿justo ese día tenían que hacer una manifestación?

-¡Mierda!-Exclamó fastidiado a la vez que golpeaba el volante con sus manos. Tenía que resignarse a que no iba a llegar a la segunda clase tampoco.

Recargó su cabeza en el respaldo del sillón.
Suspiró liberando todo el aire de sus pulmones y luego pasó su mano por su cabello haciéndolo hacia a un lado.

Su frente estaba cubierta con una ligera capa de sudor gracias al horrendo calor que estaba haciendo ese día, todo estaba bien, hasta que recordó que había batallado muchísimo esa mañana para peinarlo y rápidamente bajó el espejo que se encontraba justo arriba de su cabeza y sí, ahora su peinado estaba arruinado y para acabarla el calor parecía aumentar cada segundo.

"Este es el peor día que he tenido"

Pensó irremediablemente y en segundos se sobresaltó cuando escuchó como de atrás le pitaron incesantemente.

-Ay, dios santo, ¿qué modales son esos?- Exclamó enojado pero se alivió cuando se dio cuenta que la calle se estaba viendo menos concurrida y sin más fue quitando el pie del freno para avanzar hasta que sin darse cuenta una persona que iba corriendo por la calle se vio muy cerca de su auto, y Jisung tuvo que frenar de sopetón para después sentir como su carro había sido empujado hacia el frente, aún así no le tomó importancia pues se distrajo cuando vio al chico con una gran pancarta estrellándose en el cofre de su auto nuevo, Jisung chilló de enojo.

-¡Mi auto!-Gritó cuando bajó del vehículo cerrando su puerta con fuerza.

Ni siquiera se fijó si el chico estaba bien, Jisung sólo se interesó por su carro y por su bienestar.

-¡¿Eres idiota?!, ¡Me pudiste haber matado!- Jactó más que molesto el chico de la pancarta que para ese entonces ya estaba arrugada en el suelo.

-¿Qué es esa manera de cruzar la calle?- Preguntó con bastante recelo.

-Es una manifestación, hermano, ¡quién debe fijarse eres tú!- Alegó bastante aturdido.

-Un real desperdicio, piensen en la gente que se atasca en el tráfico por culpa de revoltosos como ustedes. -Escupió manteniendo sus manos en su cintura con el ceño fruncido.

-¡Mira idiot-!

El chico estuvo a punto de golpear a Jisung si no fuera porque otros chicos (los cuales intuía que eran sus amigos porque se vestían igual de horrible que él, según Jisung y además que llevaban algunos instrumentos que desconocía el origen y sus nombres, pero parecían "del tipo que los llevaría") llegaron a su lado para detenerlo, Jisung los ignoró comenzando a inspeccionar su auto.

-¡San, bájale!-Gritó un chico un poco más bajo tomándole del hombro para que no saliera a golpear al dueño del auto.

-¡Minho, pero mira a este-..!- El llamado Minho tomó otra vez el hombro de San para detenerlo.

-¡Idiota¡-Gritó Jisung al darse cuenta que la defensa trasera de su auto estaba chocada y que el carro de atrás ya había desaparecido del lugar.

Jisung no pudo evitar bufar y revolver más su cabello, no podría ponerse peor.

Héroes Del Silencio |MinsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora