Descanso

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Ash aún se encontraba con el demonio de los tambores tocando cada uno de ellos.

Estaba arriba en el techo de la habitación y el demonio seguía en el suelo como si nada mirando fijamente a el rubio.

Demonio de los tambores:- qué no escuchaste mocoso. Quien te dejo entrar a mi casa?—

Ash ignoró el comentario de él demonio y tomó con más fuerza su Katana mirando hacia todos lados.

El demonio golpeó el tambor de su hombro derecho pero en vez de rotar la habitación, este lanzó una onda. Ash al ver esto se agachó rápidamente para evitar ser golpeado, pero cuando creyó haberse salvado, el demonio movió su mano y tocó el tambor de su hombro derecho y ahora si la habitación roto haciendo que cayera del techo.

No le dió tiempo ni para levantarse cuando el demonio volvió a girar la habitación haciéndolo rodar por todo el lugar

Ash:- mierda— pensaba mientras giraba—debo encontrar la manera de atacarlo pero no puedo si me la paso golpeándome con las paredes—

El demonio empezó a golpear el tambor de su muslo izquierdo, luego el derecho y al final tocó el de sus hombros en el mismo orden que hizo con sus muslos.

Y con ese movimiento logró descifrar cómo vencer al demonio.

Ash: los tambores solo cambian cuando termina de tocar la melodía— pensaba mientras saltaba de un lado a otro — si solo toca uno tarda unos segundos en cambiar de dirección. Si memorizo los toques que da a cada tambor podré predecir los momentos de la casa y sabré cuando es el momento de atacar. Podré cortarle la cabeza usando sus propios trucos en su contra—

La habitación rotaba con cada toque del tambor moviendo a Ash de un lado a otro quebrándomele uno qué otro hueso y costillas antes cada choque que daba con las paredes y el suelo de la habitación.

Ash: siento como me crujen las costillas, además no me e recuperado de mis heridas—pensaba mientras se tocaba el torso ante el dolor y miraba con la respiración agitada al demonio.

El demonio tocó el tambor de su estómago y de este salieron tres ondas que raspaban las paredes cual garras en directo hacia el rubio.

Como pudo, salto y se clavó del techo con la espalda para no ser alcanzado por las ondas. Al ver esto el demonio roto la habitación haciendo que por el cambio brusco Ash se cayera de espaldas lastimándolo aún más.

Volvió a lanzar tres ondas contra el rubio aprovechando que estaba en el suelo directo a matarlo.

Ash: ¡¡levántate, levántate!!— se decía a si mismo para poder esquivar el ataque.

Aunque no logró ser lo suficientemente rápido, a pesar de haberse levantado, una de las ondas logró darle en la pierna izquierda.

Ash:-¡¡Ahhhhh!!— se quejó de dolor mientras intentaba mantenerse firme.

Demonio de los tambores:—¡maldito! ¡Esto ya es irritante!! ¡¡Muerte de una vez!!—

La ira se empezó a apoderar del demonio al ver que no lograba matarlo tan fácilmente como a los anteriores humanos. Grito con furia y empezó a golpear los tambores a un ritmo desenfrenado.

Amor por un demonio.(Au Banana fish de Kimetsu no yaiba)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora