El Conde Jungkook ♡ Kookmin

🥀𔘓 ¦ Capítulo 6

- Vamos a ver que tenemos aquí - dijo ese tal recolector acercándose a nosotros.
 
Él tomó la cara de Hoseok y lo examinó de un lado a otro. Mi amigo se resistía intentando apartarlo con todas sus fuerzas, pero no conseguía moverlo ni un milímetro.
 
- No ganarás nada haciendo eso, solo lograrás cabrearme - sus uñas crecieron un poco tomando forma de garras - y no querrás verme cabreado.
 
Tras la amenaza, el desconocido pasó su lengua por la mejilla de Hoseok.
 
- ¿Qué crees que estás haciendo? - respondí para protegerlo. No iba a aguantar ese tipo de trato hacia él.
 
Fui hacia ese hombre y lo separé de mi compañero. Me daba igual que fuera un vampiro, no podía hacer eso, era abuso. Pero claramente, volví a ser impulsivo. El recolector me agarró del cuello y me levantó del suelo ahorcándome.
 
- Señor Jeon, controle a su nova*. No queremos que muera antes del gran día.
 
- Sí, señor.
 
Me estaba quedando sin aire, él no me permitía respirar y apretaba muy fuerte.
 
- Su... suel... tame.
 
- No sé si castigarte - sonrió de lado. - ¿Qué hago? ¿Lo castigo? - preguntó a los dos hermanos.
 
- Eh, n...
 
- Hágalo.
 
Nunca me imaginé lo que escuché. NamJoon iba a negarse, pero Jungkook lo interrumpió diciéndole que sí. ¿Qué mosca le había picado?
 
- Hmm. Castigo. Castigo - se quedó pensando, pero luego me miró y me bajó al suelo manteniendo su agarre un poco más suave. Esa posición por lo menos me dejaba tomar aire. - Ach. No quiero castigarte, no es divertido.
 
Con su uña me hizo un leve corte en el cuello. No era muy profundo pero lo suficiente para que me saliese sangre. Acercó su cara hacia mí oliendo el líquido rojo que salía de la herida.
 
- Hm - sus ojos brillaron al mirarme. - Un nova de sangre pura - pasó su dedo por la zona y luego lo llevó a su boca. - Parece que esta vez han contribuido de forma significativa. Un buen regalo después de todos estos años sin participar en el evento. Sí, él será el centro de la cacería**.

¿Ca... cacería? Podía hacerme una idea de que iba solo por el nombre, pero no estaba preparado para reconocerlo. ¿Nos... iban a cazar?
 
El extraño me soltó al fin y nada más hacerlo miré a Jungkook. Confié en él, pero no me dijo nada de esto. No debería de haberme fiado, fui un idiota.
 
Su mirada fría y distante como si no le importase lo que ocurría estrujó más fuerte mi corazón.
 
Me salvó de morir en la tormenta, nos dio la oportunidad de escapar cuando NamJoon no pudo controlarse, nos cuidó esos dos días y, ahora, no lo veía por ningún lado. El chico al que llamaba Conde Jungkook no estaba, se había marchado dejando solo al vampiro.
 
Solo era uno, era uno contra dos y ninguno de ellos hacía nada. ¿De verdad nos habían utilizado? ¿Solo nos mantenían con vida para esa maldita cacería?
 
Mi dolor se demostró en mi rostro dejando caer una lágrima por mi mejilla la cual siguió bajando y se mezcló con la sangre de mi cuello. Él solo me miraba, tranquilo, imparcial.
 
Noté un pinchazo y algo entrando en mi torrente sanguíneo. Supe tarde que el recolector utilizó una jeringuilla para inyectar alguna droga en Hoseok y luego lo hizo conmigo.
 
- Confiaba en tí - le dije antes de que todo se volviera negro y cayera al suelo.
 
En mis últimos momentos de conciencia escuché al desconocido diciendo que nos llevarían a otro sitio. Ya no me importaba el lugar que fuera. ¿Querían cazarnos? Pues no lo tendrían fácil. Ya tuviéramos que enfrentarnos a miles de vampiros, nosotros dos saldríamos. Me hice una promesa a mí mismo: no dejar que nos pase nada, luchar hasta el último aliento, volver a casa y salir de ese mundo de locos en el que nos habíamos metido sin darnos cuenta.