Jinwoo llegó al edificio principal. Era grande y colorido, lo suficiente como para que cupiera un campus de tamaño normal. Pensó que era más apropiado llamarlo castillo que edificio principal.
La Universidad de Daeseon le recordaba a Hogwarts.
El edificio principal se construyó con recursos recogidos en las puertas.
Piedras de distintas tonalidades cuyos colores cambian cuando la luz penetra a través de las paredes. Antes, cuando los turistas que pasaban por allí recogían las piedras y no las devuelven, el acceso al edificio principal quedaba restringido a los turistas indefinidamente.
Los guardaespaldas escoltaron a Jinwoo hasta el garaje cercano al edificio principal.
No había otros vehículos a la vista. Nadie podía acceder al garaje. Nadie lo utilizaba. Nadie más que Jinwoo. Ni siquiera el decano ni el personal de la facultad podían acceder al garaje.
Estaba hecho estrictamente para Jinwoo.
El garaje ocupaba un gran terreno, algo que a Jinwoo le parecía un escandaloso desperdicio de espacio. Tenía la sensación de que Lee Jinwoo había comprado el solar por comodidad y no por necesidad.
"A ese tipo le encanta hacer alarde de su riqueza donde quiera que vaya. Tipo loco..."
Jinwoo no sabía que le esperaba una sorpresa.
Había varios aviones, motos y yates. Detrás del garaje había una larga pista de aterrizaje para helicópteros y una pista de aterrizaje. Era indistinguible y Jinwoo se preguntó si estaba en un aeropuerto o en la universidad.
"¿Está bien usar la universidad en privado de esta manera?"
Tal vez.
Para Lee Jinwoo, lo sería.
Después de aparcar el vehículo, Jinwoo y Yoona se dirigieron a un lugar determinado.
Un anciano les esperaba.
La brillante y libre sonrisa del anciano le asqueó un poco.
—¿Él es...?"
Se preguntó Jinwoo.
—Maestro, éste es el presidente Kim Myungsoo. Sé que ya se han visto algunas veces, pero...
—Ah, ya veo.
Respondió Jinwoo sin rodeos.
Kim Myungsoo era el actual presidente en funciones de la Universidad de Daeseon. El anciano corrió hacia Jinwoo mientras se secaba el sudor con un pañuelo blanco. Aunque sus gafas con montura de oro y esa barriga suya eran impresionantes.
Sabía que sólo debía ser una persona basada en la apariencia, pero tal vez vivir dentro del cuerpo de un villano había corrompido lentamente sus pensamientos...
—¡Buenos días, señor Jinwoo! Es un día tan caluroso, pero estoy muy contento y honrado de conocerle, ¡el futuro de Corea! Jaja...
El anciano se rió con ganas.
—Sí, es un placer conocerte. Entremos... has esperado demasiado tiempo en el calor...
Jinwoo se interrumpió.
—¡Ah! Estaba lleno de euforia porque había perdido la noción del tiempo. Gracias por preocuparse por mí, señor.
Este anciano, el presidente Kim Myungsoo, estaba haciendo favores que casi podían penetrar en el núcleo interno de la tierra. También interpretó bien el papel, su rostro se conmovió hasta las lágrimas que cayeron una gota. Debería ser un actor... incluso se tambaleó ligeramente hacia atrás.
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¡Villano!
FantasiLee Jin Woo una vez vivió una vida triste. Vivía lamentablemente día a día en su estudio de cinco pisos lleno de moho. Entonces, un día, murió en un incendio repentino. Cuando se despierta, se encuentra dentro de una novela. Pero solo hay un problem...
