¡Villano!

Chapter 47.

'La protagonista era básicamente estéril, así que no era que le pusiera las manos encima...'

La obra original era para todas las edades.

Incluso si las chicas se abalanzaron sobre él, él las esquivaba por los pelos. No había confesiones, sino que se iba por las ramas. Tampoco salían las habituales escenas de besos.

A veces, salía algún coqueteo cursi, pero era tan incómodo que, tras una avalancha de comentarios malintencionados, éstos también desaparecen.

Sin embargo, tal vez porque seguía viéndolas como sus mujeres, a pesar de todo esto, el protagonista se enfurecía cada vez que uno de los personajes femeninos era menospreciado.

En un futuro lejano, cuando la novela estuviera terminada, probablemente tendría una relación con alguien. Sea como sea, si se quedaba al lado del protagonista, su cuerpo estaría a salvo.a

'Bueno... todavía es mejor que Lee Jin Woo'.

Al fin y al cabo, Hayeon le odiaba de todas formas, y Jinwoo no pensaba volver a encontrarse con ella, así que no había necesidad de volver a verla.

Después de todo, el que había hecho fracasar el compromiso sin mediar palabra y menospreciado a su familia de forma indecorosa y desvergonzada había sido Lee Jinwoo.

Aunque había sido invitado, era probable que pensara que se trataba de una petición oficial de disculpas.

Jinwoo siguió considerando el momento de dar su disculpa.

— He oído que te has convertido en caballero. Enhorabuena.

— Sí, veo que lo sabías.

— ¿Qué? Oh... Es porque eres famoso.

— ....

Era una atmósfera delicada que era muy diferente de lo que él había esperado. Se sentía frío, pero al mismo tiempo, no se sentía exactamente así.

El maestro de la espada no quitaba los ojos de Jinwoo.

Hayeon también miró a Jinwoo.

Sentía que se habría sentido más cómodo si hubieran sido abiertamente fríos, pero tenían un comportamiento muy extraño.

El silencio cayó sobre ellos una vez más.

Fue en ese momento cuando llegó la comida.

— Ejem... por favor, disfruten.

Era una comida sencilla, pero a Jinwoo le gustaba. Era porque le recordaba los días en que había pasado hambre y comía en el templo.

'Este tipo de cosas estaría bien de vez en cuando'.

No tenía ni idea de cuánto tiempo hacía que no comía estofado de pasta de soja. En su casa también le habían servido un poco, pero tenía una sensación tan lujosa y carente de toda crudeza que no se ajustaba en absoluto a sus gustos.

La comida de aquí, que era algo acuosa, era mucho mejor.

— ¿Está apetecible?

— Sí, es la mejor comida que he comido últimamente.

— ¡Oh! Qué recto y modesto. Debes haber experimentado tantos manjares... mmm, parece que sabes encontrar el sentido.

El maestro de la espada dijo algunas cosas extrañas mientras asentía con una sonrisa de satisfacción.

Jinwoo no tuvo el valor de preguntar qué quería decir.

Era porque en un sentido diferente al de antes se sentía incómodo a su alrededor.

Los ojos del maestro de ceremonias eran intensos y Jinwoo percibió un cierto deseo en ellos.

Jinwoo desvió la mirada al sentirse agobiado por los ojos cada vez más ardientes del maestro de espadas.

— ¿Cuáles son tus aficiones?

— Ah... sólo un poco de lectura...

— Del tipo erudito veo. ¿Y tus comidas favoritas?

— No hay nada que odie especialmente, pero creo que la cocina coreana es bastante agradable.

— Oh... global pero patriótico. Qué joven tan raro.

El maestro de espadas asintió ante la respuesta de Jinwoo.

Hayeon miró al maestro de espadas con cara de estupefacción.

— ¿Tienes una religión?

— No, no la tengo.

— Sí, si eres un guerrero así debe ser. Debes ponerte en el centro. Una buena actitud.

— ¿Qué?

— Tu personalidad es recta como si no fueras el nieto de ese bastardo. Tu crecimiento individual ha dado buenos resultados. Las cualidades del mundo y una buena personalidad, el coraje y el espíritu para lidiar fácilmente con el mundo.

Jinwoo fue incapaz de seguir el ritmo de la conversación por más tiempo.

Simplemente decidió al menos intentar comer.

Jinwoo evitó la mirada del maestro de espadas y comió su comida.

El maestro de ceremonias se maravillaba cada vez que Jinwoo movía la cuchara y asentía con la cabeza cada vez que cogía los platos secundarios con los palillos.

'Oh... Dios, por favor...'

Sintió que se iba a enfermar de la incomodidad.

— Asombroso.

— ¿Qué?

— Debes haber tenido un entrenamiento infernal. Debe haber sido una agonía más allá de la resistencia humana. Yo... siento que nunca podría imaginarlo.

— Ah... bueno...

Ante la apasionada y ardiente mirada del maestro de la espada, Jinwoo respondió de forma vaga.

El cuerpo de Jinwoo era así de perfecto.

No habría sido extraño llamar idealista a ese cuerpo que había alcanzado la cima de su potencial.

'Bueno, fue realmente difícil, pero...'

Continuará...