¡Villano!

Chapter 32.

Yoona estudió la expresión de Lee Jinwoo.

Parecía completamente desinteresado, su rostro era inexpresivo. Por lo que parecía, no le importaba el mundo. Ella no podía leer ninguna emoción que emanara de él.

Al verle mostrar generosidad un día y, al siguiente, frialdad y despreocupación por el mundo, no pudo saber qué lado de Lee Jinwoo era real y cuál era una fachada.

Lee Jinwoo pareció percibir lo que Yoona estaba pensando, pero no le dio importancia.

Sonrió cálidamente y dijo. — Hm, ¿deberíamos ir a ver una película mañana? He oído que John Cruise va a venir a visitar Corea. —

— Eso parece. Creo que la película trata de un talento de rango A que se convierte en espía secreto. Si quieres verla, entonces ordenaré que se vacíe el cine. Aunque creo que será mejor comprar uno también en este momento.

— ¿Oh? ¿Los cines no suelen estar afiliados a las grandes compañías?

— ¿Es eso un problema?

Lee Jinwoo parpadeó sorprendido por un momento tras escuchar lo que dijo Yoona antes de dejar escapar una sonrisa.

***

El programa diario de Jinwoo era sencillo.

Se levantaba temprano en medio de la noche y entrenaba arduamente hasta la tarde. Cada sesión de entrenamiento era extrema e intensa.

Jinwoo entrenaba su fuerza y habilidad física, su rango de potencial no despierto, además de dedicar su tiempo y esfuerzo al mana de Información, lo que le hacía aumentar el tiempo de entrenamiento hasta que le preocupaba toda la mañana.

Cada fibra de su músculo que se llenaba de mana llevaba a su cuerpo a una dimensión superior de poder cada vez que entrenaba.

El mana había viajado hasta sus huesos, médula e incluso sus órganos, haciendo que su potencial no despertado, que antes era bajo, aumentará continuamente sin parar.

Su rango de potencial no despertado era una medida directa de cuánto podía retener y manejar su cuerpo el mana, y de la eficacia con la que su cuerpo podía utilizar dicho maná.

El personaje principal de la novela era capaz de alcanzar el rango S simplemente cambiando sus huesos y tendones, así como adaptándose al mana dentro de su cuerpo, pero Jinwoo no se conformaba con eso.

Buscaba tener el mismo nivel de mana que uno de los doce reyes que yacían latentes y que se liberarían de su sello dentro de las puertas.

El protagonista apenas había logrado alcanzar ese físico en la última mitad de la trama original.

Parecía algo que el autor había lanzado por descuido, porque le apetecía, porque era más fácil, pero a decir verdad, era la cúspide del físico humano que el hombre pretendía alcanzar. Era una especie de conocimiento en el que uno sería capaz de dominar cualquier arte marcial con sólo ver un simple movimiento.

Al final, los escenarios de muchos libros eran similares. El punto de diferencia era su singularidad y la forma en que se representaba.

En cualquier caso, para que Jinwoo alcanzara ese pináculo, necesitaba fijarse una meta clara y esa meta era enorme: necesitaba verter enormes cantidades de mana en su cuerpo. Si otra persona en cuestión hubiera intentado hacer lo que Jinwoo había hecho, jamás soñaría con poder lograrlo. Después de todo, comparados con Jinwoo no se ahogaban en charcos de riqueza.

Después de terminar su agotador entrenamiento matutino, Jinwoo pasaba el resto de su tiempo consumiendo enormes cantidades de comida y medicinas para que su cuerpo estuviera más sano.

Tanto si estaba lleno como si no, seguía consumiendo.

Consumía cosas como medicinas doradas extremadamente preciosas que sólo podían encontrarse en China, o pociones altamente refinadas de América o Europa. Todas estas cosas a las que el mundo no se atrevería a ponerles precio debido a su extrema rareza entraban en el sistema digestivo de Jinwoo.

En cuanto al tiempo restante que le quedaba, concentraría su mana de información.

Tal y como lo recordaba de la novela original, el mana de información era similar a un truco que se utiliza en un videojuego. Así fue como el protagonista pudo dominar la liga nacional en menos de un año y llegar a ser campeón del mundo al siguiente.

Aunque la mayor fuerza que Lee Jinwoo tenía detrás era su capacidad para aniquilar por completo a quien fuera y lo que fuera, ya fuera una empresa grande o mediana.

Viendo que Lee Jinwoo ya tenía mucho poder en sus manos, era difícil imaginar la cantidad de fuerza que corría dentro de la mano del presidente Lee Heejin. Dios sabe qué talento posee el presidente.

Y así, Jinwoo que estaba sediento de crecimiento utilizó su mayor poder de riqueza infinita para alcanzar su objetivo.