don't run away ; hanknow

once

El cumpleaños de Minho. No era exactamente su día favorito en todo el año, nunca lo fue.

No podría decir que sus cumpleaños siempre terminaban siendo malos, creó algunos buenos recuerdos en sus 22 años de vida, pero tampoco tenía razón para esperar ansiosamente que llegara su cumpleaños.

No veía la razón por la cual debería estar emocionado. Si, las personas te dan extra cariño y te desean lo mejor pero, ¿por qué no lo hacen cualquier otro día? ¿por qué tienen que esperar a ese día específico para poder hacerte sentir especial?

Siempre pensó que se sentía forzado, la forma en la que la gente era el triple de amable en su cumpleaños. Era eso o tal vez el hecho de no haber tenido tanta gente cercana con la cual celebrar su día especial.

Al crecer se le dificultó conseguir amigos, era el tímido niño al que nadie le prestaba atención, por eso sus compañeros de clase nunca se molestaron en hablarle. Siempre miraba a sus compañeros desde lejos organizando sus fiestas de cumpleaños e invitándose uno a otros, pero él era el que nunca recibía una invitación.

La única fiesta de cumpleaños que recordaba haber ido cuando era un niño fue cuando iba a tercer grado y la verdad es que siempre sospechó que fue invitado solamente porque la mamá de su compañera la forzó a hacerlo. No fue divertida para nada, no sabía que hacer ni a quien hablarle, así que estuvo todo el tiempo en la mesa, comiendo las cosas saladas que habían. La mejor parte y única que disfrutó fue cuando el gato de su compañera apareció y pasó lo que restaba de la fiesta jugando con el gato hasta que Eunji fue a buscarlo.

Nunca planeó sus propias fiestas de cumpleaños antes, no tenía a nadie a quien invitar. Siempre pasó sus cumpleaños con Eunji quien intentó hacerlo sentir especial e inolvidable - cosa que por suerte hizo bien cada año que pasaba. Usualmente sus abuelos iban y lo visitaban también, lo que era lindo, apenas podía verlos después de todo.

Más tarde en la secundaria pasó sus cumpleaños con Momo y finalmente aprendió sobre la belleza de una amistad. Era una cosa celebrarlo con su tía pero, ¿celebrarlo con su mejor amiga? Era una bomba.

El primer recuerdo de su cumpleaños que tenía fue por el de cuatro años. Su mamá aún estaba viva y la recordaba hablando con Eunjin sobre llevarlo al parque de diversiones. No podía recordar mucho de ese día, recuerda haber comido algodón de azúcar y haberse tomado una foto con su mamá y su tía, aún la tenía. Después de eso lo llevaron al cine a mirar una película de dibujitos y terminaron el día yendo al shopping y prometiéndole a Minho que le comprarían dos juguetes que sean a su propia elección.

Recordaba estar corriendo por uno de los locales y tratando de elegir dos juguetes. Terminó escogiendo un oso de peluche gigante, más grande que él mismo en ese tiempo y otro más chico, porque pensaba que el oso necesitaba tener compañía.

Otro cumpleaños anterior que recordaba de su pasado fue cuando Eunji y el novio, que tuvo por un año esa época, lo llevaron al zoológico. Él eligió el lugar porque Eunji básicamente le había dicho que lo haga así que quiso ver algunos animales y decidió ir allí.

Uno de sus cumpleaños favoritos fue el de sus 17. No porque fuera divertido, fue un cumpleaños promedio pero... fue memorable. Momo y él decidieron tener una pijamada ya que ninguno tenía ganas de salir y Eunji estaba echando humos, diciendo que era demasiado chico como para estar teniendo pijamadas con chicas, lo cual lo llevo a decirle que era gay finalmente. Terminó siendo todo muy emocionante, Eunji sollozando y diciéndole cuánto lo amaba.

Así que, sí, tenía algunos recuerdos divertidos del pasado, pero de todas formas, su cumpleaños era solo otro día más para él, nunca conectó con ellos. Le gustaba celebrar el cumpleaños de otras personas. Le gustaba planear que regalarle a Momo, le gustaba hacer regalos tiernos para Eunji y ahora que vivía con Chan y Changbin, celebró el cumpleaños de Felix, Jisung y Seungmin también.