camus x todos

aioros x camus (una noche contigo)

[Aioros]

No lo puedo creer, aioria y su esposa marin llevándome a rastras a un estupido bar con bailarines en tubo solo para que conozca gente ¿acaso no entienden que no son de mi agrado las relaciones amorosas? Esto es tonto no quiero ir, pero en fin, supongo que sera algo rápido, solo iremos,tomaremos algo y me escapare en cuanto pueda, aparte no puedo creer que vendan omegas en ese lugar, me da asco de solo pensar lo que aran con esos pobres seres

No pude evitarlo y al fin llegamos al dichoso bar, nada fuera de lo comun, dioses soy un alfa ocupado y llendo a estos lugares por capricho de mi hermano, ya traga me tierra

Han pasado horas y por fin aioria esta borracho, creo que ya nos podemos ir al fin, tengo cosas de la empresa que debo solucionar, no gano tanto dinero estando borracho

—con ustedes empezara la venta de omegas asi que saquen su dinero que él show comenzara!!— escuche decir al presentador, oh esto sera interesante supongo que al menos me quedare asta de esta aberración termine y lograr tener en mi memoria los desvergonzados que compran omegas.

Pasaron y pasaron, nada nuevo, solo un montón de betas arrastrando a cada omega e inyectando les algo raro para que suelten mas hormonas, esto me da asco de solo verlo.

Estaba apunto de irme pero un olor un mucho mas tentador que él de ningun otro omega que haya pasado llego a mi, voltee y ¡oh dios! Ese chico era un angel caído del cielo, su blanca y tersa piel que solo cubría una muy transparente tela negra que combinaba con la alfombra del escenario, sus cabellos rojizos que caían por su cuerpo haciéndolo ver aun mas hermoso, esos ojitos ruby que entraron en lo profundo de mi frío corazón al instante, no habia duda, el era mi omega, y...wow de ningún omega que ya haya pasado a ese escenario solo el se resistía, por esas pequeñas gotitas de agua que resbalaban por sus mejillas se notaba que no quería estar en ese lugar, y...su vientre...¡por todos los dioses! Estaba embarazado! No tengo idea de quien y no me importaba, ese pequeño necesitaba mi ayuda y urgente, su embarazo no se hacia notar mucho, a lo mucho tendría unos dos o tres meses, asi que no seria tan difícil comprarlo.

Al se mi mano todo lo que pude asta tener la atención de el dueño de ese pequeño—le ofrezco por él él 10% de la ganancia de mi global empresa de vinos "la flecha dorada"—dije sin pensar, a ese asqueroso hombre se le iluminaron los ojos y con algo de brutalidad me lanzó a ese angelito a los brazos, junto a sus papeles—camus diamont queda vendido al mundialmente conocido Aioros sagitarius lionel!!!—solo le aventé un cheque y me largue, marin llevaría a aioria a su casa asi que lleve a camus a mi auto y comencé a conducir, camus no decía nada, solo abrazaba su vientre con algo de miedo—calma, te protegeré a ti y a tus bebes —dije aun mirando al frente, sentí como me miro y formulo una pregunta —¿como sabes que...son dos bebés?—Sonreí victorioso, sabia que yo tenia razón —enseñanzas de la abuela querido— le guiñe un ojo y camus no dijo nada, tenia frío, era mas que coherente, nevaba y él no tenia nada con que cubrirse aparte de esa delgada tela negra, moví la cabeza y en un semáforo lo envolví en una manta que normalmente solia llevar en él coche para dormir en la oficina, camus al sentir el calor soltó la sonrisa mas linda y encantadora del mundo.

Llegando a casa lo hice pasar, las sirvientas le dieron ropa decente y una habitación a un lado de la mia, no pude quedarme asi que me fui al trabajo.

Días y días trabajando y al fin podia ir a casa, ducharme y ver a él hermoso angelito que me esperaba con ansias como cada vez que volvia a casa por alguna razón, y aunque no me quedaba por mucho tiempo, cada segundo camus me lo hacia él cielo, cada berrinche de niño pequeño que hacia o la alegría de sentir a esos bebés que ya solo les faltaba un mes por nacer, y aunque sabiendo que no eran mios yo los amaba tanto como a camus aunque ninguno de los tres lo supiera, me estaba acostumbrado, ahora tenia una razón para volver a casa a diario teniendo a alguien que me reciba aparte de las sirvientas.

Él dia llego, camus había entrado en su labor de parto en plena nevada, las puertas estaban bloqueadas por él hielo y él frío era demasiado, sin mas y con él corazón en la boca yo tuve que ayudarlo a sacar a esos dos pequeños al mundo, por dios ahora todos los doctorados y carreras que poseo no me sirven absolutamente de nada, solo escucho como camus grita del dolor y yo sudo cada vez mas.Pasaron unas horas y...el sonido mas bello que haya llegado a mi, ahora camus cargaba a dos pequeños en brazos, ambos de los ojitos violeta de su madre y...son hermosos, en pequeño con un cabello tan dorado como él mismo oro y él otro...su cabello era como la esmeralda mas hermosa cortada en hebras delgadas

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Como soy mala esperen segunda parte muajaja >:D