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Al finalizar las presentaciones, el representante de los profesores nos dijo que la calificación, se encontraría junto con las demás y nos la darían al finalizar el semestre, lo que va a suceder en una semana más.

Después de eso, salimos de ahí, para encontrar a mis amigos, quienes nos felicitaron. Todos se veían muy contentos, Yoongi miraba hacia el suelo, con sus manos dentro de los bolsillos del pantalón, pero aún así, logré ver una ligera sonrisa en su rostro.

-chicos por cierto, ¿Ya tienen todo listo para el viaje?- preguntó Martha - se acerca la fecha de partida

-yo no, - respondí - no pude comprar nada, está presentación me traía loca -

-yo igual - dijo James

-¡Perfecto! Entonces vamos todos a la plaza comercial- ¿Quién se emociona por eso?, Claro, solo ella

-de acuerdo, vamos - dije sin muchas ganas

Empezamos a caminar, pero una punzada muy fuerte me hizo paralizarme, la rodilla derecha me estaba lastimando y no se detenía. Mire hacia adelante, pero el único cerca era Yoongi y claro que no le diría nada. Por suerte, Sunmi volteo y me vio, le hice señas para que se acercarse pero no dijera nada, por Yoongi

-ehh, am chicos, adelantense...yo...ahora los alcanzamos - dijo Sunmi con nerviosismo

-¿Pasa algo?- pregunto Yoongi

-amm...es que..¡Unnie tiene dolores menstruales!

¡Maldición Sunmi! ¿No se te pudo ocurrir otra cosa?

Todos se rieron y siguieron caminando, y ella se acercó rápido a mi

-¿Qué pasa? ¿Duele mucho? - se veía un poco angustiada

-si, n-no puedo moverme - respondí con dificultad

-tranquila, trata de respirar profundamente - me sostuvo pasando mi brazo sobre su hombro y así me mantuvo por qué no lograba caminar

Hice respiraciones profundas y poco a poco el dolor disminuyo. Pasaron un par de minutos para eso

-eso es Unnie, vas muy bien...

Es una chica fuerte, más de lo que aparenta.

Por fin logré recuperarme y ella me ayudó a caminar hacia la salida

-Tus medicinas, ¿Las traes? - recordé que no llevaba mi mochila, se había quedado en el dormitorio

-no Sunmi, están en mi mochila y la dejé en mi habitación - dije apenada

-¡Unnie! Sabes que debes....

-llevarlas siempre conmigo, lo sé, lo siento- dije sonriendo

-Bueno, préstame tu llave, yo voy por ella y nos vamos con los demás

Hice lo que me pidió y me quede cerca del auditorio esperándola. Pasaron varios minutos y logré verla a lo lejos, pero Yoongi venía con ella, ¡maldición!

-¡aqui estoy Unnie!- dijo sonriendo y me dió la mochila - amm...tus cosas personales están dentro y...te traje agua...debes hidratarte mientras estás en tus días...- dijo nerviosa-

Negué con la cabeza mientras me reía.

-gracias Sunmi - el chico estaba junto a ella sin decir nada

-vamos Unnie- se acercó y me ayudó a levantarme, ya podía caminar, así que no hubo problema.

Yoongi de adelantó y aproveché para tomar los analgésicos

-Sunmi...¿el te pregunto algo?- pregunte con algo de temor y ella suspiro

-si, quería saber que pasaba, por que fui a tu habitación por tu mochila. - ¿Y a él qué demonios le importa? - le dije lo que a los demás, que sin darte cuenta tu periodo llego y parece que lo creyó, me siguió hasta aquí, según para acompañarme

-ok, gracias por esto Sunmi

....

Llegamos al centro comercial y nos dividimos, cada quien iría a buscar sus cosas, Luis y Sunmi iban conmigo, pues, ella le avisó lo que pasó anteriormente.

-¿que opinas de este?- estábamos en una tienda de trajes de baño, llevábamos mucho tiempo aquí por qué Luis no dejaba que ella escogiera uno

-¡Oppa, con eso voy a parecer monja! - yo me reía por los celos del chico

-déjala que use lo que quiera, ¿para eso estás no? Tú puedes defenderla y cuidarla, así serás el superhéroe de Sunmi- dije a modo de burla

-pues...ahora que lo pienso, no estaría mal...- suspiré, espero poder irme de aquí ya.

Yo había escogido rápido lo que me llevaría, dos bañadores sencillos pero lindos, ambos de dos piezas. Incluso ya los había pagado, solo estaba esperando a mis amigos

Por fin Sunmi escogió también dos prendas y luego de pagarlas, salimos a la siguiente tienda para comprar lo que faltaba

El resto de la tarde se nos fue entre tiendas y muchas bolsas. Nos regresamos en taxi, pues, llevábamos muchas cosas.

Al llegar al campus, Jin y Luis me ayudaron con mis cosas, llevándola a mi habitación, luego pasé la noche acomodando todo y alistando lo que podía empacar de una vez para el viaje.

[.]

Los días siguientes fueron más tranquilos, era nuestra última semana de clases y básicamente se trató de recopilación de calificaciones.

Después llegó el día en que nos entregaron las notas de cada materia, me hizo muy feliz ver qué las mías eran bastante buenas ¡Conservaría mi beca!

Eso significaba vacaciones libres de problemas, y vaya que lo agradecía, después de las horribles noticias que había recibido, merecía relajarme, y si pensaba hacerlo.

-¡chicos! - Martha llegó hasta donde estábamos, en el jardín trasero, -¡Tenemos grandes noticias!

¿Tenemos? no ví a nadie más que a ella...oh, si, ahí viene James

-cariño, íbamos a darles la noticia juntos ¿no?- la miró con reproche

-lo siento amor, ¡es que estoy emocionada!- ella daba saltitos en su lugar

-bueno y ¿cuál es la noticia? - pregunto Yoongi

Ellos se miraron y dijeron al mismo tiempo....

-¡Ya tenemos camioneta!

-¡Ya tenemos camioneta!

Los demás se sorprendieron, pero también se veían felices. Martha se acercó a mí y susurro cerca de mi oído

-es genial, bastante amplia, ¡será perfecta!- me sonrió con mucha emoción

-¡gracias! - le dije. En verdad me sentía agradecida con ellos por su preocupación

Siguieron hablando un poco más de muchas cosas, la mayoría sobre el viaje. Jin dijo que Sophie consiguió otra camioneta solo para esta ocasión, su padre se la había prestado para llevarnos a viajar, la diferencia, es que la de James, ya le pertenecía y dentro de dos días la irían a recoger.

Cuando el esperado día llegó, Martha y James se fueron temprano para recoger el vehículo, llegaron por la tarde y nos llamaron para verla. Todos estábamos en el estacionamiento, maravillados por nuestro nuevo transporte. En este tiempo, los demás consiguieron su licencia de conducir, así que, uno por uno, dieron una vuelta en la camioneta para "estrenarla" . Claro, todos excepto yo.

-¿Segura que no quieres hacerlo? -preguntó Luis

-Prefiero no hacerlo, no sé cuándo va a venir un dolor y si me toma por sorpresa en plena conducción podría causar accidentes, será mejor que me quedé a salvó aquí.

Comprendió y se fue a ver el vehículo junto con los demás. Me quede a lo lejos viéndolos como disfrutaban, se veían felices.

Melodias Para Dos. Segunda TemporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora