Meses después de perder al amor de su vida, Dusan Vlahovic decide refugiarse en el fútbol y dejar a un lado su vida privada, pero una vez que las vacaciones de verano lleguen, conocerá a Danny Marrero, una chica quien huye de su prometido al ver que...
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-Y...? Como te fue en tu entrevista?- pregunta Mar cuando Danny se mete al auto.
Ella suelta un suspiro -me fue bien. Me transmitieron buenas vibras y tengo las esperanzas de que me fue bien- dice segura.
-Bueno, pues si te aceptan, ahora tendrás que tomar la decisión de si quedarte en Milán o irte a Turín- revela Mar.
Tenía razón, si la aceptaban en la empresa de la ciudad de Milán, tendría que tomar una decisión acerca de en dónde trabajar. Por un lado no quería ir a Turín pues se encontraría a Dusan quien aún le tenía rencor, pero al mismo tiempo, el ambiente de trabajo era mucho más de su agrado.
Las chicas deciden ir a tomar un café y coincidentemente Sandro y Dusan se encontraban en el mismo lugar -si quieres nos podemos ir a otro lado- sugiere Mar.
Danny traga saliva -No, está bien. Aparte que tu novio ya nos vio- las chicas se acercan a los futbolistas.
-Danny, puedo hablar contigo?- pide Dusan educado. La castaña acepta y se alejan a un lugar con menos ruido -mira, quería ofrecerte una disculpa por lo de anoche, pero quería que supieras que el problema soy yo, es muy temprano para que yo inicie una relación con alguien y...
Ella sonríe -ejem, noviazgo? Creo que también vas muy rápido- lo interrumpe -escucha, aprendí mi error al querer apresurar las cosas. No porque sienta algo por ti, signifique que quiera iniciar algo contigo desde ya, digo, mis papeles del divorcio aún ni llegan- confiesa.
No se esperaba que la castaña le respondiera con madurez -oh... ya veo.
-Estamos bien?- pregunta.
-Solo si estas dispuesta a llevar las cosas lentas y sin presión alguna- condiciona Dusan con un tono cómico.
Danny ríe -con mucho gusto.
Finalmente, los cuatro disfrutaron de una linda tarde y cuando llegaron a la casa de Sandro, un chico demasiado alto y rubio esperaba en la entrada. Danny de inmediato lo reconoció.
-Erling...- se le escapa decir como si hubiera visto a un fantasma.
-Pero por qué siguen apareciendo delanteros de casi dos metros a mi casa?- cuestiona Tonali.
El noruego se gira dejando ver un folder -hola, Danny- saluda cordialmente.
Se acerca sin poder creerlo -qué haces aquí?
El delantero ahora del Manchester City suspira -bueno, digamos que mi representante esta de vacaciones por lo que no te podían entregar lo que querías- le enseña los papeles del divorcio.
-Oh... gracias, Erling, yo...
Haaland se fija en quienes acompañan a su ex esposa -Dusan, cierto?- conocía perfectamente al serbio, tanto que le tenía rencor por lo que creía que le hizo.
La tensión crecía y crecía -Erling, lo puedo explicar...
-No es necesario- desvía la mirada -solo hace falta que firmes y esto se hace oficial- le da los papeles -me quedo en este hotel- también le entrega la dirección de su hotel y sale caminando derrotado.
Danny se queda inmóvil, Dusan también. Mar y Sandro se quedaron mirando entendiendo que ellos necesitaban arreglar asuntos pendientes, así que se meten a la casa.
El serbio juega con su boca -Erling aún te quiere.
-Si...- Danny responde sin mirarlo.
-Acaso, tu aún lo quieres?- cuestiona sin obtener ninguna respuesta -no te divorciaste porque lo hayas dejado de querer, sino te asustó el estar casada con alguien- revela Dusan siendo completamente verdadero.
-Dusan, puedo explicarlo...
-No hace falta, Danny. Entiendo todo. Después de todo, siempre fui el otro- expresa con el corazón roto.
-Por supuesto que no!- la castaña lo alcanza a tomar por los brazos -eso fue antes de que comenzara a enamorarme de ti. Me hiciste olvidar de Erling porque eras mejor que él. Necesitaban de una persona más madura y tu eras el perfecto.
Las palabras de la chica no hacían efecto alguno en Dusan -lo siento, Danny, pero jamás debí involucrarme contigo- se aleja directo a su carro para poder conducir de regreso a su casa llegando sin decir nada a su hermana y cuñado, directo a su cuarto.
-Habla con él- pide Héctor y Reb sube a ver a su hermano.
Reb toca con delicadeza la puerta de su hermano -no ahora, quien seas...
-Soy yo. Dime lo que pasó- pide su hermana sentándose en la cama.
Dusan la mira y procede a explicarle todo -creo que en mi interior, también me enamoré de ella. Pero no se me hace justo que ella este enamorada de dos chicos al mismo tiempo.
-Te entiendo, es complicado. Pero ponte en los zapatos de Danny, que pasaría si Minka aparece en estos instantes en vez de Haaland, aún estas sensible por ello porque aún no te permitió iniciar una relación con Danny- explica Rebeca -estarías también confundido y necesitarías aclarar tu mente. Escucha, si los dos están destinados a estar juntos, entonces pasará, sino pues ni modo, tampoco quieras forzar las cosas, ojo que también queda la opción de pelear por su amor.
Su hermana tenía razón, tenía que luchar por el amor que tenía por Danny. No sin antes darle su espacio.
-Tienes razón, hermana. Esperaré cuando esté lista.
-Aunque tu fuiste quien se fue, así que creo que ella esperará de ti. Pero primero déjala arreglar su situación con Haaland, no sea que lo arruines más- evita Reb.
-Arruinar? Pero cómo?
Rebeca se rie parece que eres nuevo en esto del amor. Evita crear más dramas, es lo que te puedo decir. Es más, yo te aviso cuando puedes tomar acción- promete.
