sweet scent

09

Mina llegó a su casa aun con muchas cosas en mente que no se fijó en que pasaba en la sala de su casa hasta que escucho un jadeo.

Salió de su burbuja y dirigió toda su atención al sillón. Abrió los ojos con sorpresa y su garganta se secó. 

Jihyo se encontraba sobre una chica comiéndosela con la boca. 

Nayeon carraspeó incómoda captando la atención de las dos individuas, grata fue su sorpresa cuando la acompañante de su prima era nada más y nada menos que su amiga Chaeyoung.

En cuanto la menor la vió los colores se subieron a su cabeza y los de la mayor también, pues Chaeyoung se encontraba con el pelo desordenado, su camisa un poco desabotonada y los labios sumamente rojos, su prima se encontraba en la misma situación, esto era bastante incómodo para todas. 

—H-hola Mina Unnie... yo ya me iba... nos vemos— dijo Chaeyoung tomando sus cosas y corriendo hacia la puerta. 

Cuando la beta abandonó la casa, Mina dirigió una mirada molesta hacia su prima. 

—¿Pero qué mierda, Jihyo? No puedo creer que te hayas metido con Chae... ¿Sabes cuantos años tiene?— dijo Mina acercándose más a su prima, esta se comenzó a intimidar. 

—Mina, tranquila, por favor... yo lo puedo explicar... sabes muy bien que yo no soy ninguna mujeriega, así que no "me metí" con Chaeyoung solo para utilizarla o algo así. 

—¿Entonces?— preguntó Mina intentando calmarse, pues Chaeyoung era como su hermanita y sentía la necesidad de protegerla, incluso de su prima favorita.

La mayor suspiró pesadamente y se sentó en el sillón otra vez. 

—Creo... no, estoy segura de que Chaeyoung es mi pareja predestinada, lo sentí desde la primera vez que lo vi. 

Mina abrió los ojos con sorpresa y se quedó sin palabras. 

¿Chaeyoung y Jihyo almas gemelas? 

—¿Estás segura?— preguntó la menor. 

—Por supuesto, yo lo siento aquí — Jihyo se tocó el pecho —Nunca pensé que encontraría a mi pareja tan pronto, ni que esta sería una mujer y beta... pero estoy feliz de que sea Chaeyoung, es alguien maravillosa.

Mina suspiró pesadamente y sentó a lado de Jihyo. 

—Solo te diré una cosa, no quiero que lastimes a Chae, quiero que la cuides bien y que seas la mejor alfa del mundo. — dijo la menor volteando a ver a la mayor, este solo asentía con una sonrisa — Chaeyoung nunca ha tenido pareja, así que ve lento con ella. 

Jihyo solo se limitaba a mirar a su prima y a aguantar su risa, pues Mina parecía una madre. 

—Haré todo lo que me dices Mina, yo jamás haría algo para lastimar a Chaeyoung, primero me mato antes de hacerle algo malo. 

Mina sonrió hacia la mayor, pues veía sinceridad en sus ojos. 

—Muy bien— dijo y se recargó por completo en el sillón. 

—¿Cómo te fue con Nayeon?— preguntó la mayor un par minutos después.

—Pues... sucedió algo. 

Jihyo abrió sus ojos y se acercó más a Mina. 

—¿Al fin te confesaste? 

—Algo así... le llegó el celo y...— la mayor no la dejo terminar. 

—¿Te la follaste, Mina?— dijo la más alta, muy sorprendida. 

—No, jamás me aprovecharía de ella así, — respondió Mina muy indignada —le di sus supresores, pero sin querer confesé mis sentimientos solo un poquito, pero Nayeon ya estaba muy perdida en su celo... dudo que recuerde algo. 

La mayor simplemente le miró sorprendida. 

—¿Te pudiste controlar?— Mina asintió —Te admiro Mina, si mi amor platónico entrara en celo frente a mis ojos me sería casi imposible controlarme. 

—Lo fue, pero quiero hacer las cosas bien— dijo Mina viendo a la nada pensando en lo que haría cuando regresara a la escuela. 

—¿Las cosas bien? ¿Al fin te vas a confesar? 

Mina asintió lentamente. 

Jihyo gritó de la emoción y abrazó a su prima, la menor intento soltarse, pues su prima la estaba apretando mucho. 

—ESTOY TAN ORGULLOSO DE TI... AH MI PEQUEÑA PRIMA YA ESTÁ CRECIENDO. 

—Su-suéltame, me asfixias Jihyo— dijo Mina tratando de separarse. 

La mayor por fin lo hizo y miro a su prima con una gran sonrisa.

—¿Cómo se lo dirás? 

—No lo sé, pero tengo unos días para planearlo bien. Lo más seguro es que Nayeon no irá a la escuela por su celo y yo tampoco porque entre en el mío... tengo tiempo y mucho que hacer. 

Mina se levantó y fue hacia su mochila en busca de un cuaderno. 

—¿Qué haces?— preguntó la mayor viendo cómo Mina empezaba a escribir algo. 

—Estoy escribiendo mi confesión. 

Jihyo se levantó del sillón y le quitó el cuaderno a Mina. 

—Ni se te ocurra, entre más lo pienses y lo planees, más nerviosa te pondrás y más la vas a cagar... yo sé lo que te digo— dijo la mayor desviando la mirada recordando su primera confesión a su amor de secundaria. 

—De acuerdo...— dijo Mina bajando la mirada, el miedo ya la estaba invadiendo. 

—Tranquila Minari... todo saldrá bien, no conozco a la chica, pero tengo una corazonada. Esa omega y tú terminarán juntas y con muchos cachorros o no, no sé si quieras hijos, pero terminaran juntas. 

La menor miró a Jihyo y le sonrió, agradecía mucho que su prima le mostrara tanto apoyo, le daba mucha más confianza. 

—Muchas gracias, Ji. — Mina abrazó a la más baja —Me iré a bañar y a dormir. No quiero alterarme durante mi celo. 

Jihyo asintió y soltó a Mina. 

La menor subió las escaleras y se metió al baño para darse una ducha caliente.

い. ઇઉ

Cuatro días después, Mina se encontraba en frente de la escuela a punto de entrar, las manos le sudaban y su corazón palpitaba muy rápido. 

Tomó una larga respiración y comenzó a caminar, estaba más que nervioso, el simple hecho de encontrarse a Nayeon le daba miedo. 

Caminó lentamente hasta su casillero y comenzó a sacar los libros que usaría en las primeras tres clases. Cerró la puerta y el corazón casi se le sale de su pecho al ver a Nayeon justo en frente suyo. 

—H-hola Minari Unnie. — Habló Nayeon entrecortadamente sosteniendo entre sus manos la chaqueta de Mina, la cual ya estaba limpia, ella misma se había encargado de lavarla. 

—H-hola Nay... ¿Cómo te sientes?— preguntó Mina muy nerviosa.

—Bien... gracias por preocuparte— Nayeon le extendió la chaqueta —Ten, la lave... gracias por dejármela— la menor se le sonrojaron las mejillas. 

Mina la tomó entre sus manos y le regaló una sonrisa a Nayeon. 

—Gracias— las dos se quedaron calladas y se miraron por unos segundos —¿Puedo acompañarte a tu casa hoy? 

Un brillo se instaló en los ojos de Nayeon. 

—C-claro, Mina Unnie— la campana sonó y todos los alumnos comenzaron a irse a sus clases —Te veo en la tarde entonces. 

Nayeon comenzó a caminar hacia su salón y se despidió de la mayor con su mano. 

Mina también se despidió y cuando Nayeon estuvo lo suficientemente lejos soltó un suspiro.

—No la cagues Myoui Mina — se dijo antes de dirigirse a su clase.