🌹03: βεsοs ιπυsυαl.

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La cálida luz de la luna que entraba por la ventana, se encargaron de despertar al Omega que se había quedado dormido. Salió de las cálidas sábanas que lo arropaban, y poniéndose los pantuflas, abandonó la habitación para ir al baño.

Después de tres días, el príncipe Alfa había iniciado con el cortejo, le hacía visitas al Omega y lo llevaba al bonito campo de flores. El mismo día de las elecciones, MinHo presentó a TaeMin a sus padres quienes quedaron encantados con el Omega—aunque extrañados al no poder tocarlo, pero se guardaron las preguntas para después—Los padres del Omega se opusieron. Eso era una completa una locura. ¿Si quiera había posibilidades de que tuvieran cachorros sin que el príncipe muriera envenenado? 

MinHo quería morir.

Al final y muy a su pesar, aceptaron, puesto que no podían contradecir la decisión del Alfa mientras estuvieran en Incheon.

Frente a la puerta del baño, TaeMin entró y se paró en frente del espejo del lavabo, se despojó de su pijama y ropa interior. Desnudo frente al espejo, el Omega miró las pequeñas rosas negras en su torso, en sus clavículas y algunas en su cuello. Con las yemas de los dedos, tocó la pequeña rosa en su cuello.

En realidad, no sentía nada más que no fuera su piel.

Las rosas en su piel eran como lunares pero en forma de rosa—ni muy grande ni muy pequeño—Debía admitir que cuando las rosas aparecieron, se asustó, y hacía preguntas a su madre pero quien le respondía simplemente con un ''no sé TaeMin'', pero después de varios días la reina simplemente le dijo que era un Omega diferente. 

Entonces, comprendió que era un Omega diferente. No era un Omega igual a los demás. Era un Omega venenoso y con rosas negras en la piel.

Al ser un Omega venenoso, sus padres y hermana se mudaron a las habitaciones del otro extremo del castillo.

TaeMin era como un hongo venenoso, y sus padres no querían morir envenenado.

Después de que las rosas negras aparecieron, los abrazos desaparecieron, y TaeMin odiaba ser venenoso.

Él odiaba las rosas negras en su piel.

Si no fuera porque MinHo le había dicho lo hermoso que era con todas esas rosas en su piel, aún sino podía tocarlo, él todavía seguía siendo hermoso, y siempre habría una forma de tocarse. Pero ahora aceptaba que le gustaba ver las rosas en su piel. Y también pensaba que, las caricias física no siempre eran las mejores, esta nueva forma de estar en contacto con el Alfa era mucho mejor—eso no significaba que no deseara poder abrazarlo físicamente.

Después de preparar el jacuzzi con agua caliente y agregar mezclas al agua, el Omega entró y cerró los ojos, sintiendo su cuerpo relajarse bajo el agua. Una tímida sonrisa se curveó en sus labios, al pensar que en una hora se vería en la cena con su Alfa.

Aunque se habían visto en la mañana, él y su lobo estaban feliz de volver a ver al Alfa.

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Después de la agradable cena con los padres del Alfa, MinHo y TaeMin ahora se encontraban caminando por el bosque, sin tomarse de las manos, mientras eran observado por la reina desde la ventana.

Luego de varios días, la curiosidad de la reina había aumentado. Sentía mucha curiosidad de saber por qué TaeMin siempre usaba sudadera, y el que no les permitiera tocarlo—incluyendo a MinHo—solo era la cereza del pastel. Al principio pensaba que no le gustaba tanto el contacto físico, pero en ningún momento lo había visto abrazando a MinHo y viceversa.

Todo eso se le hacía muy extraño.

¿Acaso TaeMin estaba ocultando algo?

Esa pregunta había estado nadando en su cabeza, y en la cena había estado a punto de preguntar, pero evitó hacerlo para no incomodar al Omega, y entonces, ahora sintió curiosidad por saber qué había pasado con el bebé de hace años.

𝓞𝓶𝓮𝓰𝓪 𝓥𝓮𝓷𝓮𝓷𝓸𝓼𝓸🌹〖2ᴍɪɴ〗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora