Un café contigo

2. El chico de mis sueños.

Nyah

Tenia cuatro dias. CUATRO. sin beber café ya que la única cafetería que me gustaba era la de Gigi, pero ella había salido unos días de la cuidad por su hermano y hasta hoy regresaba. Mi corazón estaba feliz por volver a saborear y oler el delicioso aroma a café.

Entré a la cafetería después de mi primer turno en el hospital. Tenía un descanso de dos horas porque luego tenía una cirugía que duraba dieciséis horas con mi mentora. Así que necesitaba unos tres café antes de la tortura que me esperaba.

Gigi gritándole a la licuadora y la golpeaba por los lados.

Me acerqué a ella con mis antebrazos puestos en el mostrador.

—Si le pegas un poco más fuerte yo creo que quizás, solo quizás...la rompas por completo—bromee. Se volteo y me miro con los ojos entrecerrados y yo reí. Suspiró recostándose en una mesa donde estaban los distintos sabores de cafés, endulzantes y esas cosas.

—La compre hace dos días en Los Ángeles y ya no sirve—cruzó sus brazos enojada—pero bien me decía mi abuela Francesa: No compres cosas baratas porque te sale caro...

Fruncí el ceño y estalle de la risa.

—Tu ni abuela no es Francesa, es Suiza—dije sin parar de reír.

—Es lo mismo, está cerca—dijo restándole importancia. Se giró de nuevo hacia la licuadora y la miro como si fuera su enemigo número uno.

—Cerca a 7 horas—me volví a burlar pero me calle cuando se giró y me miró mal. Levante mis brazos en señal de rendición.

Me acerqué a la caja para ordenar mi pedido.

—Hola Nyah. Que se te antoja hoy?—me recibió Cynthia con una gran sonrisa.

—Un Americano—pedí y saqué mi tarjeta para pagar—Mejor me pones dos, hoy será un día agotador.

—Como gustes—me cobró y yo esperé a que me entregaran el café. Minutos después Gigi me los entregó y me senté en unos sillones blancos que tenían una pequeña mesa en el centro. Coloque mi café ahí y saque mi teléfono para llamar a mi mejor amiga.

—Por fin me devuelves las llamada, llevo años tratando de localizarte.

Y ahí estaba mi mejor amiga, la reina del drama.

—Te llame hace dos horas drama queen—me reí.

—Es demasiado tiempo pero en fin—tomó su taza de té de su escritorio y me miró dando golpecitos con los dedos a su taza—Te tengo una propuesta.

—Propuesta?

—Bueno antigua más bien, ya te lo había insinuado...pero tienes que decirme si o no y ya luego te digo.

—Te doy mi respuesta cuando me digas—puso los ojos en blanco. Que no sea lo que estoy pensando—dije para mi.

—Solo di; si o no—hizo un movimiento con su mano para que respondiera.

—Vale, si—terminé aceptando y no se porque pero con Serena siempre terminaba aceptando sus dichosos planes o propuestas.

Segundos después acerca su rostro a la cámara y sonríe.