Todo lo que nunca supe decirte

Todavía te recuerdo

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Aprendi a dejarte ir y no pensar en ti.
Conseguí pasar pagina perdonándote pero no olvidándote.

Sigo acordándome de ti, de tu voz, de esas mariposas en el estomago que tú, solo tú me hacías sentir.

Aunque también me acuerdo de aquellos momentos en los que me ahogaba con mis propias lagrimas pensando que te perdía. Nada me ha dolido más que perderte, que no estuvieras conmigo me hacía vulnerable, pequeña y odiaba sentirme así.
Yo merecía mucho más que eso.

Dolía. No podía cerrar nuestro libro, nuestra historia, sin sentir un vacío enorme en mi pecho. Cuando te fuiste todo dejo de tener sentido, la vida, mi vida.

Al final te perdí, pero también me perdí a mi misma por pensar que tú algún día volverías a mis brazos. Que ilusa, ¿no? Como te ciega el amor.

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