-Oye siento lo de antes- se disculpó Malcolm alzando la mirada.
Me quedé estática sin querer mirarle aún pero finalmente me rendí y le sonreí algo cansada.
-¿Pero entonces estáis saliendo o no?-
-¡Dios cállate de una puta vez!- estallé en grito al volver escuchar esa pregunta.
-¿Sabes qué?,da igual.Reese y tú solo soís mis vecinos que conocí en verano,seguramente empiecen las clases y dejemos de hablarnos.No podré ni mirar a tu hermano a los ojos porque se acordará de todas las cosas que hicimos que aún ni si quiera se si hice bien o no. Esto,todo esto es una mierda,y seguramente me arrepienta de por vida-finalicé.
Malcolm seguía boquiabierto como si quisiera hablar,pero era incapaz.
-¿Entonces que fue lo de antes?- preguntó una voz por detrás.
mierda,como puedoser tan tonta
-Te quiero,pero no se si como para algo serio- dije apenada sin darme la vuelta.
-Te entiendo,solo quiero que seas feliz- se acercó por detrás a darme un abrazo y recosté mi cabeza en su brazo.
-Oye pero yo pensaba que si ibais a salir- se quejó Malcolm.
-¿Te crees que estamos en una telenovela?,bastante tengo con todo lo que llevo- me quejé de nuevo.
-No se a que esperáis,tenemos que ir a comer- dijo Lois entrando al cuarto.
Malcolm fue directo a salir corriendo tras su madre.
Cuando Reese iba a salir le agarré de la muñeca y antes de que pudiera decir algo volví a besarle pasando mis manos por su cuello.
Se separó algo asustado llevando su mano a su mejilla.
-¿Te crees que soy tan tonta de decirle a tu hermano y tus padres la verdad?-
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-Mirame- repetí después de chasquear los dedos.
Dewey miró atentamente a lo que iba a decir.
-Te juro que haré todo lo que quieras mientras no digas nada-
-Siempre decís eso y luego no lo hacéis- se quejó cruzándose de brazos.
Me quedé pensando por un momento para después levantarme del suelo sin mirar atrás.
Abrí la cremallera de la maleta cogiendo mi teléfono.